Cuando los perros ladran NO siempre es señal que vamos avanzando
Gestionando talento con foco en el propósito
Hace algunos meses tuve la oportunidad de visitar Toledo en España, tierra no solamente de mi padre sino también tierra donde uno de los más grandes escritores pasó parte de su vida. . Durante mi estancia, recordé la que tal vez es su frase más célebre del libro, El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha: "Si los perros ladran es señal que vamos avanzando"
Comencé a reflexionar sobre el sentido de la frase y lo relacioné a nuestro trabajo gestionando personas al interior de las organizaciones. ¿Cuántas veces nos enfrascamos en iniciativas pensando que trabajamos para mejorar la experiencia empleado sin tener claro el propósito? Conozco algunos casos con los que seguramente muchos se sentirán identificados:
- Nos mudamos a espacios abiertos porque queremos que nuestros colaboradores trabajen en equipo, invertimos en infraestructura, los sentamos en un ambiente diferente por que creemos que así alcanzaremos este objetivo. Sin embargo, ¿nos aseguramos también que la cultura de la empresa fluya en ese mismo sentido? ¿Conocemos realmente si los colaboradores van a cambiar su estilo de trabajo sólo por sentarse en otro lugar?¿Qué sienten nuestros equipos cuando pasan por este cambio? ¿Los hemos escuchado, conocemos si hay "dolores" frente a esta transición?
- Instalamos mesas ágiles para inyectar de nueva metodología a diversos proyectos en la empresa porque sabemos que tenemos que acelerar, vivimos en un mundo de constante cambio, un mundo VUCA y el que no se sube a las metodologías ágiles está un paso por detrás. Muchas veces no nos hacemos las preguntas correctas en este ejercicio : ¿Obedecen estos proyectos a la estrategia de la compañía? ¿Tenemos clara cuál será la contribución a los KPI´s del negocio?¿Estará mi organización en el nivel como para asumir este reto?
- También queremos estar a la vanguardia de la transformación digital y así impulsamos la compra de varias herramientas, no queremos dejar de ser parte de esta ola, pareciese que sino estamos dentro estaríamos perdiendo competitividad. Dentro de este ejercicio, ¿Sabemos realmente cómo vamos a usar esas herramientas? ¿No será que muchas veces nos compramos más "juguetes" de los que podemos usar? ¿Hemos medido si la inversión que vamos a hacer impactará en los resultados?
Estas líneas no son para criticar las herramientas que están marcando la tendencia en la gestión de personas, más bien son para no olvidar un factor muy importante que debe estar presente. Como nos recordaría Simon Sinek con su teoría del Golden Circle, no olvidemos el "por qué". Tengamos en primer lugar y siempre en mente el propósito que nos impulsa a implementar cualquiera de nuestras acciones. Tampoco olvidemos que los que responsables de la gestión de talento están al servicio de los objetivos de la empresa y que tenemos la responsabilidad de diseñar soluciones que potencien los resultados.
De esta manera, con el norte siempre claro, dejemos que los perros ladren para que sean realmente señal de que avanzamos, en el sentido correcto.
Docente de Pre y Posgrado en Administración Marítima y Portuaria (ENAMM), Gestión Pública e Investigación (UCV), Negocios Internacionales (UTP). Candidato a Doctor UNMSM.
3 añosY sin embargo también, la frase es muy útil para casos como el del artículo muy bien enfocado.
Docente de Pre y Posgrado en Administración Marítima y Portuaria (ENAMM), Gestión Pública e Investigación (UCV), Negocios Internacionales (UTP). Candidato a Doctor UNMSM.
3 añosSin embargo la frase no se haya en el texto de El Quijote, se atribuye como otras frases apócrifas.
Gerente de Distrito en Boehringer Ingelheim
5 añosExcelente Maribel! Súper lo del Golden Circle . #Simonsinek