Deja de restarle valor a tu trabajo y comienza a sumar

¿Cuándo fue la última vez que agregaste valor en tu trabajo?, ¿eres de los que disfruta cuando aporta valor?, ¿o te pasa que tienes demasiadas tareas operativas y muy poco tiempo para pensar en cómo agregar valor?

Seamos sinceros. La mayoría de lo que hacemos durante el día posee un valor medio a bajo. Estamos a cargo de ejecutar tareas que pueden externalizarse o ser realizadas por alguien con menor preparación que nosotros. Sin embargo, insistimos en asumirlo todo, en desviarnos de nuestra misión fundamental que es la de agregar valor.

Si observan su trabajo desde una perspectiva mayor ¿quién se encarga de mirar y soñar el futuro?, ¿quién dedica espacio a pensar y a reflexionar sobre el propósito y el sentido de lo que hoy se está haciendo?, ¿quién visualiza aquellos proyectos que aportarán a la marca, al país, al mundo?, ¿quién investiga y trae tendencias para ser compartidas con el equipo?

Para provocar la suma de valor, te proponemos algunas ideas para que comiences ahora, toma nota.

 Prácticas para agregar valor

1. Tiempo para pensar/reflexionar:  Establece unas 2 horas semanales para dedicarte a ese proyecto que te interesa, que tiene proyecciones a futuro, que te hace sentirte entusiasmado e ilusionado. Sé riguroso con esas horas, no las cedas ante nada.

2. Busca tendencias:  Una de las mejores formas de inspirarse es conectarse con lo nuevo que está pasando, leer artículos sobre tendencias del mercado y el negocio, conocer los cambios en los comportamientos de tus públicos, actualizarse con ideas renovadas.

3. Aprende algo nuevo:  Puedes incorporar prácticas como la de leer un libro al mes, ver tres charlas en video a la semana, inscribirte en algún curso.

4. Escribe tus ideas y ponlas a prueba:  Haz una lluvia de ideas y anota todo en una libreta o en post it. Elige tres alternativas, estúdialas, desarrolla caminos de aplicación, ponlas en discusión con el público objetivo. Se trata de prototipar rápido. Así verás cuál de aquellas propuestas es la seleccionada para continuar creciendo.

5. Plantea conversaciones valiosas:  Puedes organizar una charla de dos horas una vez por mes para compartir con los demás temas y contenidos relevantes, y así extraer nuevas miradas respecto a una problemática o desafío.

6. Dedícate a ti:  Haz ejercicio, aliméntate bien, camina y admira un paisaje, desconéctate del día a día. No puedes aportar valor si tu cabeza, emociones y cuerpo están llenos de la rutina diaria.

7. Deja tu aporte:  Escribe un tema, deja un comentario en linkedin, entrega una recomendación. Cada persona tiene algo para compartir y eso hace que sientas que estás dejando huella.

8. Externaliza y pide ayuda:  Mientras puedas intenta salirte de todas aquellas funciones 100% operativas en las que no generas mayor diferenciación. Apóyate en tus proveedores, conviértelos en socios estratégicos, confía en esos equipos que te cubrirán las espaldas. Verás que de esa forma serás más valioso, tendrás más tiempo y podrás aportar más.

Atrévete a construir valor desde el puesto en el que te encuentres. Seas un gerente con visión, un miembro de directorio, un creativo innovador o un profesional multitarea, te animo a crear, innovar y ser más feliz.