El artículo más importante que he escrito hasta ahora

El artículo de hoy será un poco diferente.

En el ámbito de salud mental, a mi parecer este es el tema más importante del que podemos hablar.

Todos tenemos trauma emocional, de alguna u otra manera y generalmente empiezan cuando somos niños. Existen los traumas más fuertes, como agresiones físicas, sexuales o verbales, pero también los hay en otras formas más “pequeñas”.

Presenciar peleas recurrentes de nuestros padres, no sentirte incluido por otros compañeros en la escuela, no tener a alguien cerca con quien poder confesar secretos sin temor a ser juzgado, no sentirnos capaces en matemáticas…

Trauma es cualquier experiencia en la que nos sentimos inmovilizados y lejos de un estado seguro (físico o emocional). Si vuelves a leer la lista de arriba todos pudieran entrar en esta descripción.

Contrario a la creencia popular, no es algo solo mental.

En realidad, tiene poco que ver con la mente. Es en el cuerpo donde se almacena… tal cual como el título del famoso libro The Body Keeps the Score (El Cuerpo Lleva la Cuenta).

De hecho, el 80% de las fibras vagales (aferentes) van del cuerpo al cerebro y solo el restante 20% van del cerebro al cuerpo (eferentes).

¿Tienes dudas de la importancia de involucrar al cuerpo en el proceso de cambio?

Imagina como te sientes después de una noche donde tomaste mucho. ¿Qué tan fácil es hacer ejercicio o simplemente mantenerte con la mejor actitud en esas condiciones?

La energía mental que requerirías para sentirte bien y operar con normalidad sería demasiada. Es por eso por lo que es esencial incorporar el cuerpo en la ecuación.

Hay muchos matices y cosas por comentar que no cabrían en un solo correo. Pero, para empezar a resolver nuestros traumas, podemos iniciar por dos puntos clave:

• Experiencias des-confirmantes.
• Sistemas de apoyo.

Como comentado hace unas líneas, realmente el trauma no sucede solo en nuestra mente y por lo tanto no puede ser resuelto solo ahí. Se necesita lo que es una experiencia des-confirmante, una vivencia completa.

¿Sientes que tienes que estar en control de todo o las cosas no salen bien? Tu cuerpo necesita vivir no tener el control y experimentar que aun así las cosas están bien.

¿Tienes miedo de enfrentarte a figuras de autoridad? Tu cuerpo necesitará experimentar plantear tu punto de vista frente a una figura de autoridad y darse cuenta de que no fue lo peor del mundo.

De nuevo, esto tiene muchos matices.

Probablemente una sola experiencia des-confirmante no sea suficiente. Después de todo le tomó años a tu cerebro estar conectado de cierta manera y también tomará cierto tiempo reconfigurarlo (aunque no necesariamente tanto).

Es por esto que resolver trauma emocional se convierte en un estilo de vida.

De la misma manera que una sola sesión de ejercicio no te deja musculoso de por vida, una experiencia des-confirmante tampoco hará que todos tus problemas desaparezcan.

Pero con tiempo y con práctica, poco a poco se va haciendo más fácil.

Ahora… quizá puedes estar pensando y que pasa si intento tener esta experiencia des-confirmante y todo sale mal. Como dicho antes, resolver nuestros traumas no es un tema de 1 segundo.

Lo comentado ahorita es solo una parte de la ecuación. El segundo punto es tener sistemas de apoyo. Pero lo redactaré más a detalle en el siguiente artículo.