El brillo en los ojos
Dos veces y dos personas. Dos veces en mi vida me he encontrado con personas, también dos, que destacaban en mí “ese brillo en los ojos”. Entre las dos personas y los dos momentos, 20 años, o quizá más. Y en ningún caso se hablaba de cuestiones personales, sino de giros en mi vida que tenían que ver en el primer caso con el trabajo y en el segundo con el proceso formativo en el que me hallo inmerso.
Estos dos hombres eligieron mi candidatura entre otras para participar de sus proyectos. Había casi olvidado la primera ocasión, cuando fui contratado por un pequeño gran estudio de diseño gráfico para colaborar mano a mano con su propietario, del que aprendí que la disciplina, el trabajo duro y la creatividad pueden convivir perfectamente en el mismo pack. Casi la había olvidado cuando Bernardo Crespo, director del Programa de Dirección de Transformación Digital que estudio actualmente en el IE, aludía a esa característica como parte importante en su búsqueda de alumnos que conformaran el grupo del Programa. Otra vez, el “brillo en los ojos”.
En un mundo girado cada vez con más énfasis hacia lo tecnológico, surgen voces que nos hablan de humanismo, de no dejar de lado las cuestiones más emocionales de las personas que son las que en primera instancia operarán esta transformación digital. Uno de los “apóstoles” de esta apuesta por el humanismo, Andy Stalman, autor de los libros “Brand Off On“ y “Human Off On”, manifiesta en la presentación del segundo de ellos que: “A medida que la tecnología avanza, la necesidad de lo humano se acrecienta. La revolución posdigital será la revolución de las emociones, y reconocer lo humano en el offline y el online será nuestro desafío. A este proceso podríamos ponerle diversos nombres; yo lo he llamado HUMANOFFON”.
Es la época de los datos, big y small, y no cabe duda de que éstos nos definen y determinan comportamientos en muchas ocasiones, pero no podemos olvidarnos del factor humano, de las emociones como sustento básico de nuestro tránsito a través del día a día.
Una de las docentes del Programa que curso, Mosiri Cabezas, es una muestra palpable de cómo el mensaje subyacente, lo que transmite “por debajo” de su discurso, viene plagado de pasión. Significa su enseñanza una combinación muy equilibrada entre lo humano y lo tecnológico. En su paralelismo “desarrollo personal-evolución laboral”, nos muestra cómo estos dos conceptos conviven tan ligados que no se puede concebir la una sin el otro. Habla de cómo el afán de crecer como persona conlleva en su caso de manera directa una revolución en su enfoque laboral, hasta el punto de cambiar de empresa y sector después de muchos años.
Así pues, mantengamos y fomentemos el valor de las emociones, de lo humano como guía hacia donde queramos llegar, como vehículo relacional con los que nos rodean. Sepamos “leer” en el interior de las personas, de nuestros amigos, jefes, empleados y demás compañeros de viaje en lo personal y en lo laboral. Tal vez si lo hacemos encontremos a algunas personas con ese brillo en los ojos. O quizás otros lo vean en los nuestros.
Customer Strategy and Marketing
6 añosMuy bueno!
Corporate Venturing Manager @ EIT Food | Open Innovation Expert Across Industries, Now Focused on FoodTech & AgriTech
6 añosJuan Carlos enhorabuena! Esperemos encontrar ese brillo el uno en el otro durante este viaje!
Senior Retail & Sales Executive | Executive Coach | Specializing in scaling retail operations + developing high-performing teams | Former Director at LVMH, Tiffany & Co. and current CH Carolina Herrera
6 añosFelicidades Juan Carlos! Tengo la suerte de tenerte como Amigo y también como ejemplo de superación y aprendizaje. Me gustó muchísimo tu reflexión y mensaje!
Interim Sales, Director comercial/Desarrollo internacional/Gestión de equipos/Interim Management/Apasionado del Rugby/Super papá
6 añosPrecioso!!!Gracias por compartirlo!!!!Feliz día de Reyes!!!!
The Digital Advisory Board_ Passionate about Technology, Economy and Digital Innovation. I am your bridge between your web2 company to your web3 future company.
6 añosBuenisimo!