EL FUTURO DE LA WEB ES VOLVER A SU PASADO: UX y Tecnologías descentralizadas.

Una vieja y poco respetada norma ISO de calidad software determina "El usuario debe tener el control". Es una de las leyes de la ergonomía cognitiva que más se rompe.

Lo podemos ver a diario en micro interacciones a causa de diseños que no respetan la forma de pensar humana, la vista, las leyes de percepción. En los desarrollos que testeamos y comprendemos que no han tenido ni un básico análisis funcional, servicios híbridos que no han respetado patrones de diseño de interacción.

Es también el "Control y la libertad del usuario" la heurística que más se viola en términos de macrointeracción, ya que al navegar en internet estamos inducidos en el flujo y encima se nos enajenan datos privados. La web hoy es propiedad de unas pocas empresas Meta, Google, Microsoft y Amazon.

Es un hecho triste y que parece irreversible, las personas cuando trabajan, estudian, se entretienen y comparten contenido en plataformas son usuarios obligados de gigantes tecnológicos y no tienen casi nada de control. Esa falta de control individual, nos atomiza, nos hace perder justamente ese gran poder que utópicamente vimos en la wikinomics...la colaboración de las masas, en la democratización a través espacio virtual.

Pero no siempre fue así, la web también tiene historia...La primera, que podemos llamar Web 1 de fines de los 80, que permitía leer páginas web estáticas en las que los usuarios podían ver, descargar información a través de protocolos de código abierto...era un gran rizoma de conocimiento hipervínculado con pocas imágenes y casi ausente de comercialización.

Luego a fines de los 90 y ya entrando al milenio vimos la Web2 en donde la escritura fue la clave.Entrando en el milenio nacieron las animaciones y la publicidad viral, también las "redes sociales", más personas comenzaron a participar activamente de la Red, a la par que se masificó, ahí se consolidó el dominio de unos pocos jugadores que cada año se fueron haciendo más poderosos y aumentando su dominio quienes controlan Internet y lo que consumimos y compartimos en la Red. Perdimos mucho en todo sentido, control, contenido de calidad, real conexión...

Pero siempre que hay un problema, hay una solución, se vislumbra ya una oportunidad de volver a tomar ese control, y mismo volver a lo bueno del pasado: el espíritu de la Web1 con las tecnología descentralizadas desarrolladas, poseídas y mantenidas por los usuarios.

Y ahí vienen de nuevo las normas ISO de calidad de software, porque para poder tener el control hay que hacer comprensible, perceptible, operable, robusto todo este nuevo corpus de conocimiento.

Emprender esa tarea necesita que aprendamos muchas cosas nuevas. Siendo que la habilidad humana por excelencia es aprender, estamos llamados naturalmente a esa tarea.

Al igual que en el campo del software libre en donde hace muchísima falta mejorar la UX para poder extender sus usos, las Tecnologías descentralizadas nos traen este gran desafío y lo abrazamos.

Para aprender, hace falta emprender, al igual que para emprender, hace falta aprender. Encendamos todas las formas de sinapsis posible de la inteligencia natural que tenemos. Volvamos al pasado, para tomar impulso. Avanti.