EL futuro es la respuesta
Foto: Manuela Adler en Pexels

EL futuro es la respuesta

Antes fue la globalización. Empezamos a ver conexiones, monopolios y competidores por todas partes. Luego fue la transformación digital. Sin acabar de entender la segunda palabra y menos aún asumiendo la primera, atisbamos el riesgo futuro de la desintermediación o la amenaza de negocios digitágiles y capaces de crecer muy rápido sin lastres.

La transformación era algo que todos debíamos afrontar para evolucionar. Cada cierto tiempo además, informes y noticias impactantes sobre inteligencia artificial dibujan un futuro profesional sin rol claro para muchos.

Algunos anticipan la voracidad del sofware para  2030 otros para 2025 … futuros más o menos creíbles o cercanos que no parecen inspirar urgencia. De repente, en Diciembre 2019 un virus detiene el mundo, nos encierra en casa a una mayoría y nos enfrenta, en mi opinión, a nuestro mayor enemigo, el miedo.

Nuestro futuro profesional

Cuando pensamos en futuro profesional, el impacto COVID, la globalización, la digitalización o un despido no son más que detonantes del lastre real: nuestros miedos paralizantes del pasado, del presente o sobre el futuro .

Las reflexiones y decisiones profesionales no son sencillas para casi nadie y menos en tiempos convulsos. Tampoco he conocido (aún) a nadie que con 15 años tenga ya muy claro y acierte con su ikigai , certeza interior sobre lo que le apasiona, se le da bien, el mundo demanda y le aportará plenitud hasta los 100. Más bien he tenido y tengo cada vez más conversaciones con personas que se cuestionan y enfrentan a creencias y miedos, que deciden explorar el contexto con otra mirada, para redescubrir quienes son para afrontar sus retos.

Muchas personas han entrenado su miedo desde niños, temiendo fallarles a sus padres y maestros. Sienten también miedo de no encajar o estar a la altura de una oportunidad o responsabilidad profesional. El miedo nos impide a veces y durante años ser nosotros mismos por lidiar con jefes y colegas temerosos, dejando para más tarde o nunca la exploración de nuestra verdadera esencia, identidad o propósito.

El poder de la conversación reflexiva

La mayoría de personas con quien he interactuado han adolecido de conversaciones, herramientas y buenas preguntas a tiempo. Han (hemos) ido descubriendo el camino tomando decisiones (o no) y enfrentando miedos por necesidad, atracción por un reto o ambos al tiempo. No hemos practicado suficiente la introspección consciente, la evaluación y asunción de riesgos, la toma de decisiones que nos invita a actuar y avanzar más allá del más de lo mismo. No estamos entrenados, en definitiva, a atrevernos a cambiar

En este mundo de cambio y velocidad es necesario parar antes de que nos paren y cambiar antes de que nos cambien.

Pero es necesario parar y pensar antes de cambiar. Pensar para aprender de nosotros, si hemos vivido lo suficiente y nos regalamos honestidad. Pensar en lo que nos dicen los que nos conocen y aprecian para decirnos cómo nos ven. Pensar en propósito y en valores, en futuros posibles y probables, en cambio y oportunidad tanto o más que en facturas, riesgos, pasado y sus extensiones.

Todos somos mucho más que un título del siglo XX o determinado rol profesional. Somos suma de habilidades, aprendizajes, experiencia, relaciones, vocación…

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Patricia Boggan

🚀#jóvenesemprendedores 🔸️ Startup Programme Junior Achievement 🔸️ Bienestar y Felicidad en el trabajo🔸️Coaching Desarrollo Profesional🔸️ Soft Skills

3 años

Gracias por la reflexión, a veces queremos resolverlo todo desde donde estamos y nos cuesta demasiado. La clave es empezar con pequeños pasos, reconocernos, talentos, valores, lo que nos da energía... Desde ahí encontrar nuestro Ikigai y actuar es mucho más fácil.

Inma Jiménez Chinea

Facilitadora de liderazgo humanista, cambio sostenible y comunicación asertiva. Acompaño a líderes y a equipos a alinearse para conseguir sus objetivos.

3 años

Qué importantes son las conversaciones donde compartir y reflexionar desde la vulnerabilidad, reconociendo lo que hay para poder planificar desde ahí. Aceptar la vulnerabilidad es un acto valiente, compartirla, otro y tener la flexibilidad para surfear la incertidumbre con miedo, aún más. Tres decisiones valientes que nos ponen los pies en el suelo, las rodillas flexibles y el corazón latiendo a ritmo que marque la vida. Gracias por compartir Joan Clotet Sulé, como siempre muy inspirador 🙏

Ignasi Roselló

Asesor inmobiliario experto ➡️ Ayudo a propietarios de viviendas en Barcelona a venderlas con éxito | Real Estate · Negociación y Compra-Venta l immoaugusta.com

3 años

Al ser humano Joan Clotet Sulé el miedo le paraliza però tambien le evita peligros, una pequena dosis de miedo o prudència no va mal. Però lo que moviliza de verdad es la ilusión, las ganas, ese es siempre el motor de mejora en las personas y las Empresas.

Daniel Felices Holguera

IT Director | CIO (SAP , Ecommerce , Aplicaciones, Gestor de personas, Gestión de Proyectos y Servicios)

3 años

Gracias Joan Clotet Sulé, por tus reflexiones. Me asalta una duda, ¿no hay riesgo de estar perdiéndose el presente, sí estamos siempre con la mente en el futuro? Un abrazo

Verónica Mares Fernández

🚀 ¿Impulsas o Propulsas? 🚀 Tu talento está deseando crecer de forma exponencial 💥 ¡Aprende quién eres! 🎯

3 años

Para el miedo, hay un antídoto, la CONFIANZA estimado Joan Clotet Sulé !

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