El primer bulldog francés que consiguió una Estrella Michelin
¿Qué tienen en común... un Bulldog Francés.... y la Mona Lisa?
El perro más feo del mundo....con el cuadro más....
"famoso" del mundo?
Ambas han sido inspiración para crear obras de arte de reconocimiento mundial (que terminaron en museos), pero sobre todo, ambas fueron la inspiración para crear el que una vez fue el restaurante más laureado del mundo.
Hoy, os presentamos la historia de ElBulli.
Resulta que allá por el 1900... el matrimonio alemán de "los Schilling" decidió alojarse en la cala Montjoi.
Todos unos emprendedores ellos, comenzaron con un mini golf,
luego un chiringuito,
luego un bar... y así...
fueron popularizando el lugar.
Eso sí... bajo el gran paraguas de marca "El Bulli", nombre inspirado en las mascotas de la pareja: perros bulldog franceses.
La cosa comienza a ponerse interesante cuando el chef suizo Otto Müller entra en escena. 👨🏻🍳
Otto, empezó a coquetear con una gastronomía más allá del "pescaito frito" y los "calamares de chiringuito mal"; y comenzó a trabajar recetas más elaboradas, y el restaurante fue in crescendo.
Después llegó el chef Jean-Louis Neichel con nuevas ideas, sabores y ambiciones que desembocaron en 1976 con la concesión de una primera estrella Michelin. ⭐
Más tarde apareció Juli Soler, copropietario del local, y se enteró de que habían desaparecido de la guía Michelin.
Esto no le sentó muy bien a Soler, y juntos y de la mano con los Schilling se fueron directos a París a buscar una explicación.
No consiguieron recuperarla, hasta que llegó Ferran Adrià en 1983.
Venía de Hospitalet de Llobregat, donde prestaba su servicio militar desde mediados del año anterior en Cartagena, en la armada, y siguiendo la sugerencia de un compañero de filas quiso aprovechar su mes de permiso realizando unas prácticas en un restaurante, para él, desconocido: ElBulli.
Por suerte, decidió dejar las filas y quedarse en la gastronomía.
Porque la cocina no sería lo mismo sin la innovación que nació desde este local.
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Y es que allí no solamente se convirtió en uno de los chefs de mayor prestigio, sino que se hizo científico e investigó la química detrás de cada alimento.
Años después se quedó a cargo del restaurante (con 4 estrellas Michelin a esta altura) y en 2010 anunció el cierre de sus puertas.
Pero no para darle punto final... sino para comenzar un nuevo proyecto.
ElBulli1846, es ahora un museo y una fundación dedicada a la "cocina molecular".
No es un restaurante; tampoco un nuevo Bulli, como el de antes;
Será un espacio donde se comerá a placer.
Si se cumplen los anuncios hechos hace más de dos años, durante veinte días al año se servirán cenas, siempre como una parte del trabajo de experimentación.
Un renacimiento de aquella gran casa, con su esencia llevada al límite.
“Mucha gente pequeña, en muchos lugares pequeños, harán cosas pequeñas que transformarán al mundo” .
Leo Buscaglia
¿Qué nos enseña la historia de El Bulli?
1. ⚡ Empieza de cualquier manera, solo empieza. Nunca sabes en qué se va a transformar.
2. 💪 Existen colaboradores que pondrán las mismas ganas e ilusión que tú en el proyecto.
3. 😝 Puedes perder la estrella Michelin, pero nunca tu capacidad de alcanzarla.
4. 🔮Todos los finales son posibles.
5. 🐶 En tu vida cotidiana, quizás encuentres tu mayor fuente de inspiración.
Si buscas encontrar tu musa inspiradora, tu bulldog francés de la vida... o simplemente quieres darle a tu establecimiento un toque innovador digno de hacer sentir orgullo al mismísimo Ferrán Adrià, puedes hacerlo aquí.