El sector Fitness seguirá creciendo a buen ritmo… ¿quién conseguirá el mejor trozo del pastel?
El sector del Fitness facturó en España en 2017 un 6% más que en el ejercicio anterior y se espera que durante 2018 siga creciendo. De hecho, las perspectivas hablan de que en 2019 el sector alcanzará los mil millones de facturación, una cifra que no se logra desde 2008. Buenas noticias, sin duda, tras los durísimos años de la crisis.
Las cifras son elocuentes: 3.950 centros deportivos funcionando (un 1% más que en 2016) pero, sobre todo, la sensación de que la industria del Fitness va a más. El 8% de los gimnasios y clubes de la UE están en España. Y si hablamos en términos de usuarios, el porcentaje es aún mejor: el 18% del total de clientes de gimnasios de Europa están en España. España es el país mediterráneo con la penetración más alta de inscritos en centros deportivos. El 10% de la población está abonada a alguna de estas instalaciones, por encima del 7% de media en Europa. Y eso en un país donde es posible hacer deporte al aire libre prácticamente todo el año, al contrario que en otras zonas del norte de Europa.
En este escenario, no es de extrañar casos como el de Thomas Wellness Group, que acaba de anunciar un incremento en la cifra de negocio del 34%, lo que evidencia que el Fitness crece a buen ritmo y que, si se hacen las cosas bien, ese crecimiento puede llegar a ser espectacular. Se abren más instalaciones de todo tipo y se demanda más material y, por supuesto, más personal: el descenso del paro en el sector fue durante el año pasado del 4,7%.
Hay nuevas boutiques, nuevos clubes deportivos, nuevos centros low cost… Pero eso sí, que haya espacio para todos no quiere decir que todas las apuestas sean ganadoras. Que la tarta sea cada vez mayor no significa que todo el mundo se llevará un buen trozo. Aquellas apuestas que mejor comprendan las nuevas necesidades del cliente serán las que triunfen. ¿Y cuáles son esas nuevas necesidades? Atención personalizada, tecnología, máxima comunicación y uso de redes sociales, equipo cualificado, instalaciones de última generación… los centros que mejor cubran todos estos puntos estarán en primera línea, sin olvidar además el papel cada vez más protagonista de las plataformas digitales.
Sin duda, nos esperan años apasionantes en el sector del Fitness, con cifras en constante crecimiento, clientes con nuevas necesidades y los ojos de grandes inversores cada vez más centrados en el negocio de la salud y el ejercicio físico. Tanto es así que en septiembre ya comenzó hablarse de la ‘burbuja del Fitness’ y hoy mismo Rafael Cecilio, fundador de Dreamfit, advierte sobre el inicio de una burbuja en el sector.
¿Realidad? ¿Exageración? ¿Existe una burbuja del Fitness? ¿Podría llegar a existir? ¿Cómo debería autoprotegerse el sector para hacerle frente? ¿O es que, desde que estallara la burbuja inmobiliaria, todo el mundo está buscando la nueva burbuja, ya sea financiera, del sector del alquiler o de las criptomonedas?
Lo dicho, los próximos años van a ser apasionantes.