El Vínculo Entre el Arte y la Innovación
Leslie Araiza
Founder AFTR Lab | Ayudo a equipos a tener más claridad, a innovar a través de la creatividad y tomar mejores decisiones para el futuro | Data Partnerships Manager | Customer Success Manager | Ex - PepsiCo
En el marco de la semana del arte en la Ciudad de México, es necesario hablar de como se vinculan el arte y la innovación.
La "innovación" ha dejado de ser simplemente una palabra de moda en el mundo empresarial. Empresas de todos los tamaños y formas buscan incansablemente la próxima gran idea que optimice operaciones o un nuevo producto o servicio que pueda soprender al mercado.
La relación entre el arte y la innovación
En el panel "Innovación a través del Arte: Aprovechando la Disrupción para un Ecosistema Sostenible" en la conferencia global G1 de 2019, Takashi Mitachi, asesor senior en el Boston Consulting Group, propuso una perspectiva diferente. Mitachi sugirió que es el arte el que impulsa la innovación más allá de la lógica y los datos.
Pero, ¿qué es el arte?
Esta interrogante, lejos de tener una única respuesta, se aborda a menudo desde la premisa de que el arte está en todas partes. Si el arte va más allá de las pinturas, esculturas y fotografías, surge la pregunta: ¿cuál es su límite? Tal vez, en última instancia, no tiene uno claro; quizás el arte y la innovación comparten esa misma ausencia de límites.
Impulsados por una misma fuerza: la creatividad
El arte es alimentado por la misma fuerza que impulsa la innovación, la creatividad. Para liberar nuestro potencial innovador, es imperativo deshacernos de dos ideas erróneas arraigadas, planteadass por el mismo Mitachi:
Limitar cuándo y cómo se desencadena la innovación puede llevar a las empresas a perder de vista su esencia: un ejercicio creativo y compartido destinado a generar ideas novedosas de manera libre. Esta realidad puede resultar fácil de pasar por alto en entornos laborales jerárquicos, donde la presión de los presupuestos y las fechas límite se vuelve abrumadora.
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Aun si se democratizara el acceso al arte y la innovación, persistiría un segundo desafío: la suposición de que algunas personas son más capaces de ser creativas y de innovar que otras. Esta última es una misma suposición que se da dentro de las empresas, comparandose con aquellas más grandes, aquellas veteranas o más nuevas.
En su libro "The Creative Act", Rick Rubin sostiene que la creatividad no es un don reservado para quienes practican el arte, sino que puede fomentarse en todos. Además, enfatiza que es una práctica de nuestro día a día, desde reorganizar los muebles de casa hasta resolver un problema.
El ingrediente clave de la innovación: la creatividad
Los líderes empresariales más astutos han sabido durante mucho tiempo la importancia de la creatividad para impulsar la innovación. Una encuesta de IBM a más de 1,500 directores ejecutivos clasificó la creatividad como el factor número uno para el éxito futuro. Mientras tanto, el Foro Económico Mundial posiciona a la creatividad como una de las 10 principales habilidades laborales del futuro.
La creatividad humana implica valores, intenciones, juicios estéticos, emociones sociales y conciencia personal. En una época donde la Inteligencia Artificial está en ascenso, debemos seguir nutriendo las fuentes de nuestra creatividad. Eso es lo que aportamos al escenario de la innovación, una dimensión única que ninguna máquina puede replicar.