Gimnasios y Exceso De Oferta

Se había comentado anteriormente que la República Mexicana es la tercer nación con mayor número de gimnasios e instalaciones deportivas del mundo, siendo éste un buen dato...sin embargo, y, dada la cuarentena mundial, el sector en México tuvo un serio retroceso que sólo agravó una situación que venía creciendo con el tiempo, y, que, ante el declive económico, sólo se agravó.

A inicios del 2000, muchos gimnasios se integraron como cadenas, y, con un buen modelo de negocio, y, con el apoyo de inversionistas que apostaron por éste sector, comenzaron a expanderse en la República Mexicana, estableciendo sucursales en las principales ciudades de todo el país...en ésos momentos, sólo el 2% de la población mexicana estaba físicamente activa, y en el periodo 2000 a 2019, dicha muestra estuvo prácticamente igual.

Lo que llama la atención, es que de 2008 as 2009, siendo éste el año del colapso financiero mundial, el sector tuvo un incremento de ingresos cercano al 20%, pero, con la misma cifra de usuarios.

En los años subsecuentes, los gimnasios siguieron aumentando, pero, no así la cifra de participación deportiva; llegada la cuarentena y confinamientos, la muestra de personas activas deportivamente se desplomó, como es de esperarse, mermando los ingresos y facturación agregada de estas cadenas; por éste motivo, la actividad deportiva, en éste momento, está alrededor del 0.5% de la población, pero, el problema mayor, es que éstas instalaciones de primer nivel, tienen un alto costo operativo, que no está siendo cubierto por la actual demanda, que es mucho menor que la oferta, por lo que los precios tanto de inscripción como de mensualidad están en mínimos históricos, simplemente por el hecho de mantenerse a flote.

Muchas cadenas de gimnasios y cadenas deportivas están cerrando sucursales en cantidades récord, y, cuando si llegan a ser operativos, los encargados de ventas se dedican a cerrar ventas, desesperadamente, con tal de cubrir sus cuotas de facturación mensual, pero, sin tener en cuenta que el seguimiento a de los usuarios inscritos es más relevante que la misma venta; un usuario fidelizado, invierte, en promedio, un 33% más; el 80% de los ingresos de un gimnasio vendrá del 20% de los usuarios, y, por si fuera poco, es 9 veces más viable reconvertir a un usuario fidelizado que a uno que no.

La oportunidad de mercado fue tan tentadora, que los ofertantes se desmidieron con sus pretenciones y proyecciones de negocio, para que, al final, haya mayor oferta (gimnasios), que personas dispuestas a utilizar dichas instalaciones (insisto, sólo el 0.5% de la población).

Por si fuera poco, muchas de éstas cadenas siguen reacias a adaptar sus modelos de negocio y ambición desmedida ante la situación actual, situación que en el Siglo XXI, se ha demostrado, con numerosos ejemplos en una veintena de industrias, lo que sucede, y, si a eso se añade el letargo y desinterés de la población activa ante un exceso de tecnología, la situación no se ve bien para estas cadenas.