Hábitos comunes en las familias empresarias
Hábitos comunes en las familias empresarias
¿Qué estas construyendo; una empresa familiar o una familia empresaria?
Hay que entender que crear un patrimonio separado de la empresa familiar, es prioritario resolverlo por cada emprendedor.
¿Has pensado si lo que trabajas todos tus días será un legado que permitan la continuidad del negocio en armonía familiar? ¿y si lo que dejaras cuando mueras, es la principal razón para separar o fracturar a tu familia?
Probablemente has leído antes sobre construir un gobierno corporativo adecuado para garantizar la continuidad de tu empresa familiar, representado en tres consejos …
En esta ocasión, quiero compartir 4 puntos clave que debe procurar el Consejo Familiar para facilitar la sucesión generacional en las empresas familiares.
GRUPO DE PERSONAS MIEMBROS DE:
LA EMPRESA , LA PROPIEDAD y LA FAMILIA
GOBIERNO CORPORATIVO QUE LO REGULA:
CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN, JUNTA DE ACCIONISTAS Y CONSEJO FAMILIAR
1. EDUCACIÓN FINANCIERA
80% de las empresas familiares no pasan a la tercera generación y te has preguntado; ¿cómo le han hecho el 20% que si lo logra?
Un reto común que enfrentan los padres con sus hijos es relacionado a la calidad de educación que reciben y en muchas ocasiones creemos que una licenciatura o una maestría es suficiente para que la siguiente generación se encuentre preparada para continuar con el crecimiento de la empresa familiar. Sin embargo, poco aprendemos en la escuela sobre finanzas personales o educación financiera.
El papa constructor, desea que su hijo estudie arquitectura o civil; el papa médico, desea que su hija siga sus pasos en el sector de salud. Una mama emprendedora, está esperando la hora en que sus hijos salgan de la escuela para que le ayuden con el negocio. Y así como estos ejemplos, podemos señalar muchos. Pero, ¿te has preguntado si la siguiente generación llegará más preparada que tú para administrar, crecer y cuidar las finanzas familiares?
La falta de esta educación, genera malos administradores que pueden acabar en pocos años, meses o días, lo que con mucho esfuerzo se construye en una generación completa. No es suficiente saber el oficio o conocer la operación de alguna industria, sino todavía más importante es saber hacer negocio con ello.
2. HISTORIA FAMILIAR
¿Alguna vez has hecho el árbol genealógico de tu familia con tus hijos?
Así como en las empresas un empleado puede mostrar falta de compromiso y renuncia con facilidad a su trabajo porque no encuentra sentido, reconocimiento e identidad hacia la organización que lo ha contratado, así mismo, un familiar empleado vive esta situación y puede ser que no renuncie, pero sus resultados serán mediocres.
Los resultados mediocres, pueden estar relacionados a la falta de pasión e identidad que necesita el empleado familiar para crecer el legado que le espera.
Si no conoces tu historia familiar y lo que generaciones atrás de ti han luchado y trabajado, difícilmente encontraran los familiares jóvenes alguna razón para cuidar y mantener la continuidad de ese negocio familiar.
3. CREENCIAS FAMILIARES
¿Has leído las historias de otras familias empresarias y como han logrado con éxito superar sus diferencias?
En las familias, y desde muy pequeños, se empieza a formar nuestras creencias basadas en el lenguaje y diálogos que escuchamos día a día.
Hay frases comunes que generan creencias limitadoras en las personas como, por ejemplo:
“En esta vida se tiene que trabajar muy duro para lograr tener dinero”
“Nacimos pobres y tienes que aceptar tu realidad, deja de soñar en esas riquezas que no puedes tener”
“Nunca fuiste bueno para los números, por eso no puedes aspirar a ser el administrador de la empresa familiar”
¿Alguna de esas frases te suena conocida? ¿recuerdas alguna otra frase que haya creado una creencia limitadora en tu forma de ser?
¿Te has preguntado que efecto causaría en ti, si en lugar de esas afirmaciones te dijeras en voz alta algo así? :
“En esta vida, el éxito se logra trabajando de manera inteligente”
“Tu puedes cambiar tu realidad, solo necesitas trabajar en tus creencias para sumar habilidades y capacidades que te hagan un mejor empresario”
“Saber leer los números es indispensable para todo empresario. Tu puedes desarrollar esa habilidad mediante lectura, capacitación y práctica”
Desde el Consejo Familiar, se puede fomentar en las nuevas generaciones, creencias formadoras y de crecimiento. Los retos nos mueven de nuestra zona de confort, los fracasos nos dejan aprendizajes muy valiosos y la persistencia los mantiene caminando hacia nuestras metas. Promueve en familia las creencias positivas, identifica las limitadoras y cámbialas empezando por un dialogo motivador.
4. HABITOS Y DISCIPLINA
Una excelente práctica que realizan algunas empresas familiares que superan más de 15 generaciones de historia, es realizar un evento o más al año donde se invita a las nuevas generaciones a vivir la experiencia de trabajo en la empresa.
Esa acción, además de fomentar la pasión y el deseo por formar parte de la empresa familiar en un futuro; empieza a generar hábitos valiosos en la nueva generación.
Otros ejemplos que ayudan a fomentar hábitos valiosos están relacionados con la lectura, las obras de labor social, el deporte, el arte, aprender a tocar un instrumento musical, capacitaciones para desarrollar nuevas habilidades, entre otros.
Un error común que se puede cometer es que los padres consientan en sus hijos que dejen cada curso, libro o entrenamiento a la mitad, o sin concluir con frecuencia. Es entendible que por diferentes razones no completes tu curso de guitarra, o hayas dejado un libro a la mitad, o te hayas quedado dormido cuando era momento de levantarse temprano para ir a entrenar con el equipo de futbol, etc. A veces por temas de salud o porque descubriste que no te gustaba lo que elegiste, se renuncia a un proyecto o idea que inicias. Pero cuando esta situación sucede con frecuencia, el resultado es que esa persona no está construyendo hábitos y disciplina en su vida. Y en consecuencia, al primer momento que las cosas se pongan difíciles o complicadas, seguramente renunciará.
La falta de buenos hábitos y disciplina, son la principal razón por la que muchos empresarios cierran sus negocios o pierden el enfoque en el camino. ¿Por qué esperar hasta que sea un adulto y tome la responsabilidad de la empresa familiar para querer fomentar buenos hábitos y disciplina en las generaciones venideras?
Ahora; ¿puedes visualizar con mayor claridad lo que poco se habla en familia y que puede generar mucho valor para formar desde niños lo necesario para preparar la sucesión familiar en tu empresa? ¿Estás dispuesto a construir una familia empresaria?