Hay que bajar gastos

Cuando llega esta época del año se nos viene el apretón del cinturón, el momento en que el área Financiera saca cifras y dependiendo de como esté la cosa solicitará ajustes en el gasto.

Vivimos un año difícil para varios sectores como construcción, vehículos o retail. Y entonces le pasan la "pelota a Compras" para que haga la magia de bajar el gasto.

¿Qué se puede hacer?

1. Renegociar costo vs ampliación de plazo. Es una estrategia utilizada en algunos tipos de contrato en dónde se busca bajar el valor mensual a pagar, ampliando la duración del contrato, logrando asú una reducción al hoy pero compensando al proveedor con extensión de contrato.

Por ejemplo en contratos de arriendo se puede aplicar esta medida o en algunos honorarios, o en temas de licenciamiento.

2. Reducción de alcance. Es muy común en momentos de austeridad, buscar reducción de alcance para minimizar el gasto o costo, impactando seguramente la cadena, teniendo que planificar distinto o reasignando recursos para repartirse las tareas que se reducen del alcance.

Por ejemplo usar menos personal si es el caso o cambio de especificación en algún producto, sin impactar la calidad o desempeño.

3. Pedir descuento. Es la más predecible y de seguro la que más se use, pero impacta la utilidad del proveedor, quien tendrá que analizar hasta dónde puede ajustarse para ayudar a su cliente y definir por cuanto tiempo será esta condición. Lo delicado es que pueda convertirse en arma de doble filo porque si no conoce a detalle la negociación, a futuro terminen cobrandote de alguna forma el "descuento" que te dieron.

4. Cambio de proveedor. En épocas complicadas se recurre a buscar en el mercado nuevos proveedores que brinden eficiencias en el suministro o prestación del servicio, aunque es delicado cuando solo es el precio lo que lidera el cambio porque lo barato puede salir caro.

Por ejemplo proveedores más cercanos, que no exijan mínimo de pedido,que puedan proveer bienes o servicios que hoy te implica usar a varios, son medidas válidas para bajar gastos sin comprometer tu calidad.

5. Eliminación del bien o servicio. Habrá momentos en que la pregunta será ¿de qué podemos prescindir en este momento? Seguro habrá herramientas, servicios, beneficios, insumos, que en épocas difíciles toca decidir no poder seguir con ellos, para retomar más adelante.

Muchas veces en el día a día nadie piensa en ello, pero la crisis es la que incentiva a pensar fuera de la caja. Habrá casos en donde algo se implementó en algún momento pero ya no se requiere pero se mantuvo porque nadie cuestionó.

6. Buscar valores agregados. Tal vez una forma sea negociar revisando según monto, duración, antigüedad de la relación comercial, explorar con los proveedores algunos valores agregados que redunden en reducción de costos, no del contrato en sí pero sí que el valor agregado se traduzca en reducción de otros gastos.

Un proveedor que te brinde el uso de una solución informática que hoy vienes pagando por fuera, la custodia de un inventario que hoy te demanda gastos por hacerlo tú mismo, son valores agregados que puedes negociar.

7. Negociar volúmenes. Podría decirse que en épocas de crisis no es buena idea aumentar consumos, pero se puede pensar en un escenario donde se renegocie un mejor precio pensando en un mayor volumen de compra, que no necesariamente implique un impacto en gasto, sino que se puede revisar qué se está comprando de forma fraccionada, qué se puede estandarizar para unificar productos o servicios que representen un volumen que permita un mejor precio.

8. Disposición final. ¿Nos hemos preguntado si tal vez en nuestra empresa botamos algo que otro está dispuesto a pagar? Pensemos por ejemplo en la disposición final de algunos productos de tecnología, en los que hay un proveedor dispuesto a pagarte por ellos, algo que implique recuperación de dinero.

9. Tercerización. Una opción puede ser tercerizar porque es evidente que podemos estar dedicando tiempo y recursos a algo que no es el core del negocio, o porque el tercero al dedicarse a eso como su core, puede trasladarte beneficios que redunden en reducción de costos y liberación de tiempo para actividades más estratégicas.

10. Cultura de ahorro. Finalmente creo es importante desarrollar una cultura de ahorro liderada por Compras en cuanto a ciertos consumos por ejemplo en temas de consumo energético, de agua, de papel, etc. Apuntar a la sostenibilidad es importante, ver qué se puede reciclar y así contribuir también a bajar gasto. Compras debe ser un área 360° diseñada para impactar toda la organización.

Espero estás acciones te ayuden en tu estrategia de bajar el gasto.