Humanizar la Organización:   Desvelar el alma y el éxito                     organizacional
                Sección I
                 Parte I

Humanizar la Organización: Desvelar el alma y el éxito organizacional Sección I Parte I

Un sincero agradecimiento a todos los que participaron en "Redefinir las organizaciones: La transformación a través del marco bidimensional". Soy consciente de que el contenido era bastante denso y académico, pero era esencial sentar las bases para comprender la crisis que las organizaciones enfrentan hoy día. En adelante, me complace guiarles a través de una serie de artículos, más cortos, diseñada para explorar cada faceta de nuestro innovador marco.

 

Empezaremos con la primera sección, que se centra en desentrañar el concepto de la dimensión humana dentro de las organizaciones. Exploraremos los aspectos emocionales y racionales que colectivamente forjan el alma de una organización. Esta sección se desarrollará en una serie de partes, cada una dedicada a examinar a fondo los elementos y componentes individuales que constituyen la dimensión humana.


Introducción

En el dinámico ámbito del desarrollo organizativo, surge una perspectiva transformadora centrada en la relación entre las dimensiones humana e institucional de las organizaciones. Este enfoque innovador subraya que tanto si una entidad es una nueva empresa como una institución de renombre, su éxito está profundamente ligado a su capacidad para satisfacer necesidades y crear valor. No se trata únicamente de generar beneficios o recaudar fondos. Como afirmó elocuentemente Peter Drucker, "El beneficio no es la explicación, la causa o el fundamento del comportamiento empresarial o de las decisiones empresariales, sino la prueba de su validez". Esta afirmación no resta importancia al beneficio; al igual que el oxígeno es esencial para la supervivencia humana, los beneficios o la financiación son vitales para cualquier institución. Sin embargo, al igual que el oxígeno no es el propósito de nuestras vidas, el beneficio no es el propósito de una empresa. Es una condición necesaria para su existencia y una medida de su éxito, no su razón de ser. En cambio, el verdadero propósito reside en satisfacer necesidades y crear valor de forma innovadora y significativa. Las organizaciones prosperan atendiendo a estas necesidades y adaptándose continuamente para servir y contribuir más eficazmente, alineando sus operaciones con objetivos humanos, sociales y medioambientales más amplios. Este enfoque garantiza la longevidad y la pertinencia, manteniendo la vitalidad y el propósito de la organización en tiempos de cambio.

 

En el centro de esta perspectiva está la idea de que las organizaciones no son meras entidades estructurales, sino ecosistemas vibrantes animados por la creatividad humana, las aspiraciones y la búsqueda incesante de sentido. Este artículo se aventura en las profundidades de este enfoque humanista, explorando cómo la dimensión humana -que abarca el propósito, la visión, los valores, la cultura y la racionalidad de estructuras y estrategias- se fusiona para formar la identidad única de una organización y su excelencia operativa. Además, integramos el concepto estratégico de la propuesta de valor, atribuyendo la relevancia y el éxito sostenidos de la organización a su capacidad para articular y cumplir las promesas hechas a sus clientes y partes interesadas. Esta exploración trata de comprender en profundidad cómo la interacción de los aspectos humanos e institucionales, unida a la creación estratégica de valor, constituye la base fundamental que sustenta el éxito y la longevidad de las organizaciones.

 

Toda organización, ya sea una empresa, una organización sin ánimo de lucro, una institución educativa, un gobierno o un organismo internacional, existe fundamentalmente para servir, satisfaciendo necesidades concretas o prestando servicios específicos. Surgen como respuestas para colmar lagunas individuales, sociales, comunitarias o de mercado, con el objetivo de ofrecer soluciones, añadir valor o abordar distintos retos y perspectivas.

 

Aunque los principales motores de estas entidades giran en torno al servicio y la atención de las necesidades, a menudo entran en juego otras motivaciones. Por ejemplo, la búsqueda de beneficios, el deseo de innovar, ejercer influencia, influir positivamente en las comunidades o catalizar el cambio social. Sin embargo, estos factores adicionales están vinculados en última instancia a la creación de valor para el público objetivo con capacidad o voluntad de pagar o apoyar esta satisfacción. Esta interacción de motivaciones y respuestas subraya las polifacéticas razones que subyacen a la formación de cualquier organización, arraigadas en el principio de satisfacer necesidades y crear valor percibido.

Definición de la dimensión humana en las organizaciones

 

Dimensión humana: Las organizaciones son inherentemente humanas, construcciones vivas fundadas en propósitos compartidos e impulsadas por las diversas necesidades, aspiraciones, creatividad e intelecto de las personas. La dimensión humana de las organizaciones es una mezcla de componentes emocionales y racionales, establecidos inicialmente por los fundadores y perseguidos por las generaciones siguientes. Emocionalmente, se define por las aspiraciones colectivas, el propósito, la visión, la misión, los valores, la cultura y la marca que forman el núcleo de su identidad e impulsan la motivación colectiva. Racionalmente, se manifiesta a través de estatutos estructurados, planificación estratégica, procesos de toma de decisiones y enfoques sistemáticos que dirigen la organización hacia sus objetivos. La dimensión humana es el aspecto "blando" de la organización, que conecta a los individuos con la institución en su conjunto y representa la esencia de la propuesta de valor. Muestra cómo los atributos humanos profundamente arraigados dan forma y articulan el valor único que se ofrece a las partes interesadas y guían la trayectoria estratégica de la organización. Al igual que los seres humanos, esta dimensión garantiza que las organizaciones se caractericen por la diversidad y sean capaces de evolucionar, adaptarse y crecer en un mundo en constante cambio.

 

Definición de la dimensión humana:

Para comprender en profundidad el papel de la Dimensión Humana en el éxito organizativo, la diseccionaremos en "componentes" y "elementos".  Los componentes son específicos y tangibles; sin embargo, los elementos son temas amplios y estratégicos. Comprendiendo tanto las grandes líneas como los pequeños detalles, podemos aprovechar eficazmente la dimensión humana para impulsar un cambio y un impacto organizativos significativos.

 

Componentes de la dimensión humana

Los componentes son los aspectos operativos o funcionales específicos que manifiestan los elementos más amplios. Son los aspectos tangibles que, combinados, crean el sistema completo o contribuyen a la plena expresión de un elemento:

 

  1. Propósito - La estrella guía: El propósito es la brújula de la organización, que responde al "¿Para qué?". Trasciende el mero "¿Por qué?" De la existencia, centrándose, en cambio, en la intención última que hay detrás de cada acción y decisión. El propósito es más que una declaración inspiradora; es la motivación fundacional que impulsa a la organización, influyendo en su trayectoria estratégica y operativa para servir e impactar significativamente en la vida de las personas.
  2. Visión y Misión - Trazar el futuro: La visión es el horizonte al que se aspira, una imagen vívida de lo que la organización aspira a llegar a ser. Establece un objetivo orgulloso e inspirador que orienta la planificación a largo plazo. La misión la complementa detallando la hoja de ruta práctica: los caminos y enfoques concretos que la organización empleará para alcanzar su visión. Juntos, proporcionan una dirección clara y orientada al futuro.
  3. Valores - La brújula moral: Los valores son el latido ético de la organización y guían la conducta interna y las interacciones externas. Los principios básicos conforman el carácter de la organización, influyendo en cada acción y decisión. Como brújula moral, los valores ayudan a afrontar los retos y las decisiones, garantizando la integridad y la coherencia.
  4. Estatutos - El proyecto fundacional: Los estatutos sirven de marco estructural, ofrecen estabilidad y guían las operaciones y el gobierno de la organización. Son las normas y directrices escritas que dictan cómo se gestiona la organización y ayudan a mantener el orden, la integridad y la concentración en el propósito, la visión y la misión.
  5. Cultura - La manifestación humana de la identidad: La cultura encarna los valores y creencias de la organización a través de comportamientos, hábitos y actitudes. Es un aspecto activo y envolvente que puede moldearse y dirigirse para alinearse con los objetivos de la organización. La cultura influye en todos los aspectos de la organización, desde la toma de decisiones hasta las operaciones diarias, y desempeña un papel crucial en el fomento de un entorno positivo y cohesionado.
  6. Marca - La bandera bien alta: La marca es la cara de la organización ante el mundo, y engloba su identidad visual, sus mensajes y la percepción general del mercado. La forma en que los clientes, socios y competidores perciben la organización es crucial. Una marca fuerte comunica los valores, el propósito y la singularidad de la organización, atrayendo y reteniendo clientes y talento.

 

Los componentes de la Dimensión Humana actúan como facetas tangibles y operativas que dan vida a los elementos más amplios de una organización. Cada componente -desde el Propósito, la estrella que guía, hasta la Marca, la cara pública de la organización- desempeña un papel crucial en la configuración y definición de la identidad y la trayectoria de la organización. El Propósito y la Visión proporcionan dirección y motivación, los Valores y la Cultura incorporan normas éticas y de comportamiento, y los Estatutos y la Marca solidifican y comunican al mundo la esencia de la organización. Colectivamente, estos componentes forman la columna vertebral de la identidad de una organización, impulsando sus decisiones estratégicas y operaciones diarias y, en última instancia, influyendo en su éxito e impacto en el mundo.

 

Elementos (aspectos generales y fundamentales)

Cada elemento de la parte humana y racional de la organización representa un ámbito crucial dentro de la dimensión humana, que refleja el funcionamiento interno de la organización y sus interacciones con el mundo en general. Son dinámicos, influyen continuamente en los diversos componentes de la vida de la organización y se ven influidos por ellos:

 

7.     Construir Vida - La naturaleza dinámica de las organizaciones: El elemento "Construir Vida" reconoce que las organizaciones son entidades dinámicas concebidas a partir de una idea nacida en un proceso de puesta en marcha que crece, se adapta y evoluciona. Las organizaciones pueden incluso reproducirse en otras organizaciones. Al igual que los organismos vivos, responden a su entorno, aprenden y cambian, también lo hacen las organizaciones. Este elemento refleja la adaptabilidad, resistencia y desarrollo continuo de las organizaciones de éxito. Es importante destacar que esta naturaleza dinámica también incluye la cruda realidad de que las organizaciones pueden declinar y, en última instancia, dejar de existir, al igual que los seres vivos. Este aspecto subraya la importancia de la vigilancia, la adaptación continua y la innovación para garantizar la longevidad y la salud de las organizaciones. Reconocer el potencial de mortalidad organizativa fomenta la gestión proactiva, la evolución estratégica y el cultivo de una cultura organizativa resistente y receptiva.

8.     La conexión - Unir las aspiraciones individuales y colectivas: Este elemento se refiere a la relación dinámica y simbiótica entre los individuos de una organización y la propia institución. Se trata de cómo las metas, motivaciones y valores personales se alinean con la misión, la cultura y los objetivos colectivos de la organización y se ven amplificados por ellos. Esta Conexión polifacética implica una resonancia emocional con el propósito de la organización, una alineación intelectual con sus valores y visión, y un compromiso práctico con su misión y objetivos. Es el sentido de pertenencia y responsabilidad que sienten los individuos y que les impulsa a contribuir con sus mejores esfuerzos e ideas. Esta Conexión se fomenta mediante una comunicación eficaz, un liderazgo empático, experiencias compartidas y una cultura que valora y celebra las contribuciones individuales al tiempo que las orienta hacia un propósito común.

9.      Propuesta de valor - El punto de partida para articular el valor es la promesa de una organización a sus clientes y partes interesadas sobre su valor único. Es una articulación clara y convincente de cómo los productos, servicios o presencia en el mercado de la organización resuelven problemas, satisfacen necesidades o proporcionan beneficios que son distintos de lo que ofrecen los competidores. Esta propuesta está profundamente arraigada en la dimensión humana: refleja el propósito, los valores, la cultura y la marca de la organización. Una propuesta de valor bien definida nace de estos componentes para garantizar que las cualidades humanas de la organización se traducen en beneficios tangibles e intangibles, diferenciándola en el mercado y forjando fuertes conexiones con clientes, empleados y otras partes interesadas. Es el punto de partida de las estrategias de marketing, captación de clientes y desarrollo de productos, y orienta la forma en que la organización comunica y ofrece su valor único.

10.   Pensamiento crítico: toma de decisiones eficaz basada en la claridad organizativa: Cuando la dimensión humana de una organización está ampliamente definida, abarcando su propósito, valores, misión, visión, estatutos y cultura, se agiliza intrínsecamente el proceso de toma de decisiones. En tales contextos, los componentes fundamentales de la dimensión humana ya han sido objeto de una deliberación exhaustiva, lo que integra el pensamiento crítico en el tejido de la organización. Esta claridad actúa como marco orientador, permitiendo una toma de decisiones rápida y alineada. Así, una dimensión humana bien articulada facilita y acelera la toma de decisiones, reflejando los principios básicos de la organización en cada acción emprendida.

11. Estrategia - Proceso de toma de decisiones y vía de navegación: La estrategia es un área conceptual amplia que abarca diversos componentes de los procesos de planificación y toma de decisiones. Es el plan factible que tiende un puente entre las dimensiones humana e institucional. Traduce las aspiraciones, la cultura y los valores de la dimensión humana en planes operativos concretos y promueve acciones dentro del marco institucional. La estrategia garantiza que la organización avance con determinación, coherencia y eficacia hacia sus objetivos, alineando sus aspiraciones humanas con la ejecución práctica.

12.   Diversidad y Evolución - El camino hacia la resiliencia y la adaptación: La diversidad y la evolución representan la capacidad de la organización para crecer, innovar y responder a los cambios. La diversidad incluye e integra diversos talentos, perspectivas, experiencias e ideas. Enriquece la organización, impulsa la creatividad, mejora la resolución de problemas y potencia la toma de decisiones. La evolución se refiere a la capacidad de la organización para adaptarse, transformarse y progresar en respuesta a la cambiante dinámica interna, las condiciones externas del mercado y los cambios sociales. La diversidad y la evolución implican aceptar y gestionar el cambio, no solamente reaccionar ante él, sino anticiparlo y liderarlo. Implican, reevaluar y rea linear la cultura, las estrategias y las operaciones de la organización con las nuevas tendencias, retos y oportunidades. Esto garantiza que la organización siga siendo relevante, resistente y capaz de mantener el éxito y el impacto.

 

Los elementos de la dimensión humana en las organizaciones -Constructo Vivo, La Conexión, Propuesta de Valor, Pensamiento Crítico, Estrategia, y Diversidad y Evolución- representan aspectos fundamentales que impregnan de vida a las organizaciones. Encarnan la naturaleza dinámica de las organizaciones, la relación simbiótica entre los individuos y el colectivo, la importancia de articular un valor único, la necesidad de planificación y ejecución estratégicas, y el papel crítico de abrazar la diversidad y adaptarse al cambio. Juntos, estos elementos forman la columna vertebral de la capacidad de una organización para prosperar, adaptarse y mantener su relevancia en un panorama empresarial en constante evolución, como cualquier organización viva en su hábitat. Subrayan la necesidad de que las organizaciones sean ágiles, receptivas y estén profundamente conectadas con su núcleo humano, garantizando que sigan siendo vibrantes y eficaces en el cumplimiento de su propósito y la consecución de sus objetivos.

 

Esta sección ha sido concebida para sentar las bases de un análisis exhaustivo. Hemos profundizado en los aspectos del elemento humano en las organizaciones, no como un punto final, sino como un peldaño crucial hacia una comprensión más profunda. Los conceptos e ideas que aquí se presentan son los cimientos en los que se apoyará nuestra exploración ulterior en las siguientes partes y secciones de esta serie. Es esencial asimilar y reflexionar sobre estas ideas fundamentales antes de avanzar. Una comprensión profunda y matizada de estos conceptos es vital, ya que constituirán la base para explorar aspectos más complejos y aplicados de la dinámica organizativa en futuros debates.

 

Así que, al terminar esta parte, tómese un momento para reflexionar sobre las ideas y teorías presentadas. Piense en cómo encajan con sus experiencias y observaciones dentro de las organizaciones. Esta reflexión es una parte fundamental del proceso de aprendizaje. Le preparará para los próximos segmentos de nuestro viaje, en los que seguiremos desentrañando la naturaleza polifacética de las organizaciones.

 

A lo largo de los próximos capítulos iremos ampliando nuestros conocimientos y avanzando hacia una visión holística de las organizaciones. El viaje que tenemos por delante promete ser esclarecedor, ofrecer una perspectiva más detallada y aplicada y, finalmente, llevarnos a un punto en el que puedan tomarse acciones y decisiones con conocimiento de causa. Manténganse curiosos y abiertos de mente mientras navegamos por el intrincado mundo de la dinámica organizativa.


Gabrielle van Reekum

Vernieuwend design proces voor jouw illustratie of content... Een luisterend oor en samen kijken we naar de juiste kleuren voor jouw branding.

11 meses

Amen

  • No hay descripción de texto alternativo para esta imagen

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Otros usuarios han visto

Ver temas