Innovar una tarea difícil para las empresas.
La dinámica del trabajo está cambiando para todos, es evidente, y por tanto, necesario que en los negocios, las empresas deban de manera imperativa tomar la iniciativa y apostar por desarrollar y fortalecer el pensamiento creativo, y abrirse al trabajo colaborativo, con más fuerza que nunca.
Lo anterior, incrementará las destrezas y habilidades del talento humano corporativo, dando importancia a sus ideas y opiniones para la creación de productos y servicios competitivos e innovadores propios de la compañía.
Para implementar esta dinámica, se requiere ante todo, que la mente que lidere esté dispuesta a reinventarse desde lo personal, bajar la guardia e interactuar con otros profesionales a fin de cuestionar permanentemente una mejor forma de hacer las cosas y darse cuenta que para la solución, casi todo es válido: Aprender y salir avante es la premisa.
Por consiguiente, lo más relevante de las innovaciones organizativas radica en la mejora continua de los resultados, a través de hallar óptimas maneras de vivir el desafío por el cambio en hábitos de los consumidores, interesarse con autenticidad por los colaboradores y sus espacios. Esto se logra modificando las rutinas organizativas, procesos de mejora del aprendizaje, la continua formación profesional y humana, generar experiencias fuera de la organización que lo acerquen a sus aspectos emocionales, es un plus si se incluyen políticas medioambientales y sociales, cada vez más valoradas por el mercado, entre otras.
Es por esto que crear un proceso formal de innovación, es decir, implementar métodos y técnicas para medir los resultados, permitirse errar y crear disciplina sobre la innovación, son indispensables para la supervivencia de la empresa y de su carrera.
Bien dicen por allí que la innovación es un asunto de persistencia.
¿Porque es tan Difícil la innovación en las empresas?
En este orden de ideas, es muy probable que la innovación no funcione de la manera correcta dentro de la empresa en la que trabajas y que posiblemente seas el Gerente General, un mando medio, o un colaborador de base, en una organización en la que los servicios o productos ya no estén siendo competitivos para el mercado.
Sin embargo, esto pasa porque muchos de los líderes empresariales no ven la diferencia entre innovar y su trabajo cotidiano, están cómodos con sus hábitos, sus lealtades profesionales, su manera de entender la innovación o no la crean necesaria, y tal vez lo más recurrente que sucede, no saben cómo aplicarlo o temen fracasar en el intento.
En resumen, las empresas deben buscar ser competitivas y eso se logra involucrando a todos los colaboradores con la intención de llevarlos a una dinámica en la que se creen competencias para la solución a problemas internos y por defecto, externos, en los que el trabajo colaborativo permite que las diferentes líneas de conocimiento, decisión, aprendizaje y pertenencia, hagan que los procesos internos de la empresa, impacten en cada uno de los usuarios, consumidores y comunidad, generando ideas creativas e innovadoras creando expectativas positivas.
Por ello, a fin de estimular la innovación al interior de las empresas es necesario que el alto nivel ejecutivo, deje el miedo y se lance a tomar decisiones, unas más arriesgadas que otras, romper algunas de sus propias reglas para estimular el desarrollo de ideas (productos y servicios) de largo plazo, incluso, puede ser que no estén directamente relacionados con el actual negocio, pero que podrían convertirse de manera disruptiva en el negocio del futuro.
Además, el área de I+D+I debe tener estructuras flexibles, con capacidad de las mentes abiertas y ser muy eficientes en el trabajo colaborativo, por ejemplo.
En otras palabras, los modelos de innovación utilizados actualmente, están basados en “Innovación Abierta”, deben ser optimizados y adaptados rigurosamente a la realidad de cada empresa.
¿Cuales deberían ser los focos de la innovación dentro de las empresas?
Innovación de rutina: Su base es la vigilancia competitiva, es decir, realizar mejoras del producto cada cierto tiempo para adaptarse a las necesidades de los clientes.
Es finalmente la tarea periódica observar la competencia de productos y servicios, además de estar al tanto de hábitos de consumo para crear o mantener su valor diferencial en lo propio.
Innovación radical: Se trata de modelos de negocios diferentes, que son cambios significativos a la empresa.
Innovación transformacional: Es la manera de cómo se sugiere efectuar cambios a través del tiempo, transformando lo que ya existe en algo completamente diferente.
Para concluir, creo que la innovación se puede resumir de la siguiente manera:
Innovación = Problema x Creatividad x Nicho de mercado
Fortaleciendo Ideas crea metodologías que se adaptan a las empresas MiPymes, desarrollando competencias en innovación.
Juan Mauricio Prieto. Mentoring de Base Humana y Tecnológica