Juego de Tronos

Se acerca el invierno...
En los últimos tiempos se están produciendo importantes cambios en el entorno que me hacen reflexionar, como empleada de banca comercial, sobre como adaptarse para seguir en el mercado como un actor principal.
Algunos de estos cambios, que nos afectan de forma muy significativa son:
-Entorno macro-económico: crecimientos muy ajustados en economías desarrolladas ó maduras con políticas expansivas de reducción de tipos de interés que hacen que los márgenes de negocio tradicional sean cada vez más estrechos
-Cambios en el cliente actual y en las nuevas generaciones (millennials): crecimiento del uso de nuevas tecnologías y smartphones. Clientes más exigentes, más informados, que comparan precios On-Line, que tienen más voz gracias a la difusión de sus opiniones en las redes sociales, que perciben ausencia de valor añadido en las operativas transaccionales y que esperan productos que se adapten a sus preferencias y demandas
-Incremento regulación mercados: regulaciones y exigencias cada vez más costosas que hacen que las entidades tengan que ser cada vez más eficientes
-Competencia: aparición de nuevos competidores tecnológicos con menores costes de estructura y que pueden ofrecer ya algunos productos con mejores precios y con un posicionamiento de marca más actual
Con estos cambios en el mercado es necesario que las entidades financieras adapten rápidamente sus estructuras y formas de hacer, para ello veo necesarias medidas estratégicas como las que siguen:
-Adelgazar estructuras tanto verticalmente como en las propias oficinas, con el fin de reducir costes. Estructuras menos jerarquizadas son más flexibles y pueden adaptarse con mayor agilidad a los rapidísimos cambios. La Banca Comercial española, aún con los ajustes de los últimos años, sigue en mi opinión sobredimensionada y hay todavía un exceso de capacidad instalada no eficiente ni verdaderamente productiva. Son necesarias menos oficinas y oficinas más grandes y bien dotadas, con profesionales expertos que presten un servicio y asesoramiento de calidad, para que ir a la oficina aporte valor
-Innovación. Seguir invirtiendo en tecnología para mejorar la experiencia digital de los clientes y que estos canales favorezcan la relación integral omnicanal, bien sea con el desarrollo de tecnologías propias o en la inversión/integración de empresas del sector digital. Mejoras en las aplicaciones digitales dotándolas de mayor rapidez y sencillez, para que los clientes realicen las transacciones operativas y tambien de contratación de productos, que en oficina aportan poco valor y permiten además reducir costes. Aprovechar la ventaja competitiva que tiene la banca española frente a potenciales agentes en el mercado, por disponer de la información- Big Data, para ofrecer productos financieros y no financieros, adaptados a las preferencias de los clientes
-Internacionalización. Crecimientos dispares a nivel mundial así como cambios demográficos con población española y europea cada vez más envejecidas, hacen que las entidades que sigan creciendo en mercados con menores porcentajes de bancarización de la sociedad, como latinoamérica, o con elevados crecimientos como los paises asiáticos, tendrán riesgos más diversificados
¿Y cómo veo las oficinas de banca comercial?
No sé lo que tardará en llegar, porque como hemos podido ver en los últimos tiempos con la digitalización de muchos mercados los cambios son extraordinariamente rápidos. Tal vez sean 3 años ó 5 ó tal vez menos, la regulación del sector frenará pero no parará los cambios, y es necesario que las redes de banca comercial se adapten con estructuras más flexibles y oficinas más grandes, con equipos de profesionales más especializados que aporten un servicio de asesoramiento y cercanía que proporcione un valor diferencial al cliente y que a su vez sea un modelo más eficiente que disminuya costes, para satisfacer a clientes cada vez más exigentes.
Se acerca el "Juego de Tronos" de la Banca española..., ¿quién se quedará con el trono de hierro?. La oportunidad es nuestra!