La acción mata ese perfeccionismo que sientes y a cualquier impostor

La acción mata ese perfeccionismo que sientes y a cualquier impostor

¿Alguna vez has soñado con dejar tu trabajo habitual y emprender en aquello que te apasiona?

¿Sientes ese llamado de “hacer algo que te llene”?

Aunque considero que muchas veces la pasión puede ser una trampa. También puede ser el impulso hacia una vida plena, un viaje desafiante pero gratificante.

En esta oportunidad, quiero compartirte la historia de Ana, una profesional con más de 15 años de experiencia corporativa, como especialista y líder del área de gestión de personas. 

Era -lo sigue siendo- una mujer muy aplicada; siempre en búsqueda de nuevos desafíos. Después de concluir un postgrado y certificarse como life coach, sintió la necesidad de hacer un cambio en su vida.

A pesar de su éxito profesional, sentía que le faltaba algo fundamental: la oportunidad de ayudar a otros a encontrar su camino en el mundo académico, profesional o laboral.  

Fue entonces cuando decidió independizarse. Se organizó, logró reunir un fondo de supervivencia por si los ingresos tardaban en llegar (tenía para mantenerse durante seis meses).

Se llenó de valentía, redactó su carta de renuncia, se la entregó al director general de su compañía, quien intentó persuadirla, pero no logró retenerla.

Ya en su nuevo rol, el de emprendedora, armó su modelo de negocio propio, como orientadora vocacional y consultora/coach para personas que buscaban desarrollar un plan de carrera.

Tenía algunos potenciales clientes en la mira; sin embargo, no les terminaba de ofrecer nada, porque luego de varias semanas trabajando, sentía que sus servicios no estaban perfectos, pasaba lo mismo con la comunicación de su marca personal.


La nostalgia y arrepentimiento

Pasaron dos meses desde que dejó su empleo. Se sentía atascada, impostora y arrepentida, porque “hubiese sido mejor seguir en mi trabajo, donde tanto me valoraban. Estaba segura y tranquila”.

Fue cuando me llamó para vernos.

En mi sesión de mentoría, le conté como se ha transformado mi modelo de negocio personal desde que decidí anunciarlo al mundo. En 10 años no ha dejado de cambiar. Si hubiese sido tan perfeccionista aún estaría dándole vueltas a lo que quería hacer. Lo mismo pasa con la comunicación y marketing personal.

Estoy seguro de que este proceso sería distinto en cuanto a resultados, si lo hubiese enfrentado aun trabajando; no tendría tanta presión y capaz contara con más disposición a exponerse y probar.

Cuando se está 100% dedicado a un negocio propio, se quieren ver los resultados pronto, por necesidad o motivación.

Como parte de un plan, acordamos afrontar dos desafíos para las siguientes dos semanas: comunicarle a su red de contactos de primer nivel (familiares, amigos y conocidos) en lo que estaba. Atreverse a contarle al mundo su nuevo proyecto.

A quienes tenían hijos próximos a entrar a la universidad les ofreció el programa vocacional y a los interesados en hacer un cambio en su faceta laboral les habló de su programa de “transformación profesional”.

El segundo, fue aplicar su modelo de coaching/consultoría como lo tenía, a pesar de que no terminaba de convencerle.

En esos días logró cerrar sus primeros ocho clientes. Entonces quedamos en vernos en un mes, luego de concluir esos procesos.

Al realizar la siguiente sesión. La ansiedad y las preocupaciones que sentía antes, dieron paso a una gran satisfacción y sentimiento de realización.


Hacer es mágico

Accionar permite entender muchas cosas individuales y del modelo de negocio propio. Es posible identificar qué sobra y qué hace falta; mientras los demás te enseñan que lo que para ti no está bien y está imperfecto, para ellos es lo que necesitaban para avanzar y tomar decisiones.

Ana hizo con sus primeros clientes, lo que yo hice con ella. apoyarlos con su experiencia, conocimiento y talento.

Enfrentó su tendencia al perfeccionismo. Se dio cuenta de que estaba perdiendo tiempo valioso. Como le dije: “solo necesitas empezar para llegar a donde quieres."

Ella entendió la importancia de probar su idea de negocio pronto. En lugar de esperar a tener todos los detalles alineados, comenzó a trabajar con sus primeros clientes, aunque sentía que su enfoque no estaba a 100%. A medida que interactuaba con ellos, lo adaptó, confirmó y cambió ciertos aspectos.

La mejor decisión que tomó fue buscar personas que la cuestionaran y desafiaran, no admiradores o aduladores.

A la par que hablamos, lo hizo con su primo, quien emprendió con su escuela de defensa personal hace algún tiempo; también con una de sus mejores amigas que lleva ejerciendo de manera independiente como terapeuta holística, desde hace más de cinco años.

“Aunque fue difícil recibir críticas; fue duro identificar que mi mentalidad en ese momento no era la adecuada. Ustedes me ayudaron a crecer, a mejorar la oferta y sobre todo a confirmar que mi decisión de hacer lo que quería era la correcta”, me dijo en la tercera sesión que tuvimos, donde además cerramos el proceso.

Si te identificaste con esta historia. Te invito a romper con el perfeccionismo ¿Cómo? ¡HAZ! busca opiniones críticas, mantén la disciplina y abraza la transformación.

El resultado de ese proceso no siempre será la confirmación de que vas bien, puede ser lo contrario, pero te llevará a tomar decisiones, cambiar el plan y continuar.

Si sueñas con vivir y monetizar eso que tanto te mueve, sigue el ejemplo de Ana y prepárate para un emocionante viaje. Eso que te hace sentir el hombre o la mujer más realizada merece ser tu camino. ¡VAMOS! 

Si llegaste hasta acá: ¡Gracias por valorar!

Te comento que si estás en la ciudad de Santiago y eres coach, consultor o ejerces de manera independiente tu profesión, este Bootcamp te puede interesar.

Será un mes de trabajo intenso, con poca teoría y mucha práctica, para que validez tu modelo de negocio, desarrolles tu propuesta de valor y aprendas a ganar más visibilidad con el objetivo de mejorar tu comunicación y ventas como marca personal.

Cierra el 2023 con agradecimiento y comienza el año 2024 ¡CON TODO!

Eros Castillo

Yo escribo un email cada día para tu lista de suscriptores, tú vendes sin tener que recurrir a lanzamientos. Y el tiempo que ahorras, lo dedicas a tus clientes | Email marketing specialist | Gestor de newsletters

1 año

Me encanta lo de «Hacer es mágico». Bien ahí por impulsar el cambio de la creencia que solo con pensar es suficiente para lograr lo que queremos.

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