LA ESPECULACION DE LA SEGUNDA MANO

Sorprende la velocidad que ha tomado el incremento en el precio de la obra nueva y más aún, la facilidad en sumarse a ella, los criterios de valoración del mercado particular.

Basta con detenerse a analizar los anuncios en cualquier portal, donde se ha convertido en algo normal, el ver unos valores que sobrepasan con creces la sobrevaloración, y aunque suene a perogrullada, me resulta el modo mas sencillo de explicar el desfase de la vivienda de segunda transmisión.

Desde la llegada a nuestras costas de los fenicios y con ellos su dominio marítimo y comercial, debimos adquirir parte de esa esencia negociante y especuladora, que nos impregna de desconocimiento y falsas espectativas. A diario, hablamos con propietarios (casi siempre españoles), que tienen un concepto equivocado de los extranjeros que llegan a España a comprar. Piensan que son ignorantes y vienen dispuestos a pagar un sobreprecio porque "en su país, las viviendas son mas caras y tienen mayor poder adquisitivo".

Puede que en parte, tengan algo de razón, si bién, de lo que no se dan cuenta, es que ese PLUS en el precio, debe ir acompañado de algo más, de algo que las haga distintas y atractivas y en esto, es en lo que las promotoras están centrando sus esfuerzos invirtiendo una parte importante de sus presupuestos en ZONAS COMUNES, urbanizaciones muy modernas, con zonas deportivas, ludotecas, zonas verdes, piscinas etc.

Hoy 1 de septiembre ya casi ha pasado el verano y muy pronto comenzará el otoño. Aquellos particulares que confiaban en venderse ellos mismos sin ayuda de profesionales sus codiciadas propiedades, comenzarán a ponerse nerviosos y a rebajar sus precios con el ánimo de deshacerse de ellas antes de final del ejercicio.

Como decía antes, ayer echando un vistazo a los anuncios, nos encontramos con una frase que lo dice todo..."VUELVE A ESTAR A LA VENTA", era la recurrente frase de un particular, como consecuencia de una frustrada venta.        

¿Alguien puede pensar que alcanzar con éxito la venta de una propiedad, está a la altura de cualquiera?. Para que fuese relativamente fácil, tendría que coincidir los siguientes puntos:

1.- La casa debería hallarse libre de cargas y no sostener ningun tipo de garantía.

2.-La valoración fuese objetiva por parte del vendedor.

3.-Que el comprador lo considerase igualmente objetiva.

4.-Que el comprador no requiriese financiación externa.

5.- Que ambos tuviesen la formación y conocimientos necesarios para tal fin.

Y aún así, seguro que de no ser por la preparación de muchisimos profesionales, existirian operaciones que no saldrían adelante, por el simple hecho de cualquier frase dicha que pueda ofender a algunas de las partes, de ahí la clara importancia (siempre desde mi punto de vista) de no permitir que la parte vendedora esté presente en el momento de la primera visita por el potencial comprador.