LA NUEVA LEY CONCURSAL
José Antonio García Albi Gil de Biedma
OVB Allfinanz España / Carrington Asesores
El pasado 26 de septiembre, hace poco mas de dos meses, entró en vigor la nueva Ley Concursal. Se trata de una transposición de una directiva comunitaria al derecho interno, ampliada con nuevos aspectos dentro de la libre aportación de cada uno de los estados miembros.
Dada la coyuntura económica que nos toca vivir, merece la pena acercarse a la nueva Ley. Frente a una única definición de la insolvencia, esta norma contempla tres distintos estadios de insolvencia. La probabilidad de insolvencia, la inminente y la actual. Cada una puede tener su trato diferenciado y, desde luego, afectan de forma directa a la responsabilidades de los administradores, que responden personalmente en caso de no actuar de acuerdo a esta nueva norma jurídica
Los antiguos "Acuerdos de refinanciación" y "acuerdos extrajudiciales de pago" se sustituyen por los denominados PLANES DE REESTRUCTURACION. Estos tienen una ambición y contenidos más amplios que las dos figuras sustituidas. Debido a que se configuran y definen de una manera diferente las distintas clases de créditos, se modifican también los arrastres de los acreedores disidentes. En las nuevas clases de créditos encontramos novedades interesantes tanto para el caso de la concursada como de la PYME afectada por un concurso.
Debido a la concentración del mapa bancario, no nos vamos a encontrar con concursos en los que la negociación se lleva a cabo con un "pool" bancario amplio y heterogéneo. Al contrario; ello va a provocar que las negociaciones sean más duras y la figura del Plan de Reestructuración pese mucho y se precise un plan muy sólido y contundente
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La nueva ley establece tres tipos de procedimiento concursal diferentes según sea la empresa que concursa. Hay un procedimiento general al que se suman dos procedimientos específicos. Uno para PYMES y otro muy simplificado para microempresas.
También se establece una nueva figura. La del "experto en reestructuración" Pero no se alegren demasiado, esta figura no es lo que parece o lo que a ustedes les gustaría que fuese. Va a ser de mayor ayuda para el juez que para el empresario.
Si quieren saber algo más sobre la nueva ley no duden en preguntar. Merece la pena.