MÁQUINAS INTELIGENTES: Potencial infinito (Parte 1)
MÁQUINAS BEBES Y DE QUE SON CAPACES

MÁQUINAS INTELIGENTES: Potencial infinito (Parte 1)

MÁQUINAS BEBES Y DE QUE SON CAPACES

La idea de los posibles escenarios futuros de la humanidad debe entrar en debate pronto, y el tiempo apremia.

Una nueva era de civilización ha comenzado y avanza más rápido de lo que podemos controlar. Esto debido a las máquinas y algoritmos que están naciendo con capacidad de cómputo aún sin límites y que requieren progresivamente de menos trabajo humano para su configuración, ejecución y crecimiento.

Las startups y empresas innovadoras estamos ideando y produciendo a gran velocidad y escala, nuevas generaciones de robots y algoritmos autómatas. Estamos creando máquinas y algoritmos que hace tiempo son más poderosas que nosotros mismos, sin los limites biológicos inherentes a nuestra naturaleza humana.

 En donde su enorme capacidad de recolección, cruza y análisis de datos e información de cientos de miles de fuentes distintas y en tiempos inasequiblemente breves para un ser humano, permiten a estas máquinas ser Capaces de entender el lenguaje natural, verbalizar mensajes, desplazarse de manera independiente, recomendar productos, gestionar agendas, controlar pautas de inversión en los mercados de finanzas, e incluso los algoritmos están preparados para reaccionar y tomar acciones frente a situaciones no programadas.

Si bien, las máquinas aún no son los personajes que imaginamos en nuestros sueños o vemos en películas de ciencia ficción, estos robots que hoy tienen la autonomía y las capacidades de un niño de pocos años de vida, pronto empiezan a dejar ver sus primeros pasos, y sí que son pasos firmes.

Algunas máquinas difícilmente se dejan ver, pues son, sobre todo, capacidad de cómputo y algoritmos que ejecutan sus tareas programadas en silencio, sin recurrir a maquinas físicas que les personifiquen. Si hablamos de máquinas, estamos hablando de lo que va dentro de ellas, sus poderosos softwares.

Hoy, se plantea clasificar estas máquinas en escala de 6 niveles según su nivel de autonomía, de manera de ir situando el termómetro e ir conociendo en todo momento en donde nos encontramos.

Actualmente, la mayoría de los sistemas más avanzados estarían en el nivel 3, en donde por ejemplo un auto se conduce solo, pero necesitan de un humano que les diga dónde ir o los saques de ciertos aprietos. Los robots cirujanos por otro lado, por ejemplo, están en el nivel 2, capaces de realizar tareas solos, pero requieren siempre de la supervisión de un humano.

Es probable que hayamos acabado acostumbrándonos a estas noticias sin mayor sorpresa, sin embargo, en menos tiempo del que imaginamos, estas máquinas bebes de pocos días serán pronto adolescentes o adultos formados, en donde las maquinas autómatas clasificadas hoy en día en nivel 2 y 3, estarán en los niveles máximos de autonomía, convirtiéndose así en una nueva realidad sin fase de transición aparente en lo que parecerá apenas un instante.

Solo piénsenlo, al día de hoy, un día cualquiera, puedo salir de mi casa, sacar dinero de una máquina, cargar mi tarjeta de metro en una maquina automática de autoservicio, ir al supermercado y pagar en una caja de autoservicio. Podemos haber comprado un ticket para el cine desde el computador y reservado nuestros asientos en un viaje de vacaciones sin movernos de la silla, el mismo que el pc me recomendó y que era justo donde estaba pensando ir. Camino al cine, puedo comprar una bebida en una máquina expendedora y recargo de bencina mi auto en una caja de auto pago. Pero es además probable que hayamos consultado a un médico virtual de Google, aceptado recomendaciones de películas, series, libros, destinos de viajes, en un motor de búsqueda de internet. Todo esto, mientras en mi casa la aspiradora está haciendo su trabajo de manera autónoma y mi refrigerador está analizando que es lo que me falta para agregarlo a la lista de supermercado.

Hasta hace solo pocos años atrás, estos actos requerían, la interacción con personas de carne y hueso. Hoy las estimaciones apuntan a que al final de la década, en torno al 85% de las interacciones de los clientes con las empresas serán sostenidas por máquinas y sus algoritmos.

En donde, a la hora de ámbitos que a los humanos nos parecen complejos; La capacidad que tienen las máquinas de analizar en decimas de segundos (vale decir en tiempo real) y sin pausas, nuevas ideas, productos, alternativas, hace demasiado tentador el uso de ellas para las economías de la eficiencia.

Sólo como dato, a principios de esta década, un computador con Inteligencia artificial tiene capacidad para procesar en línea unos 500 Gigabytes de datos por segundo, esto, para que se hagan una idea, es equivalente a consumir información de 1 millón de libros por segundo. No hay humano en el mundo que pueda competir con eso.

Creamos o no en el crecimiento exponencial de la tecnología, este siglo nos promete sacudidas únicas en nuestras formas de vida, incluso si mantuviésemos únicamente el ritmo de progreso ya experimentado en las últimas décadas.

PALABRAS CIERRE

Para mi es apasionante ver como en ZeroQ estamos siendo parte de esto. Transformamos lo que antes era un simple pedazo de fierro en una inmensa fuente de data, de inagotables posibilidades de consumo para diversas derivadas.

En donde antes las empresas de gestores de fila (turnomáticos) estaban pensando en fierros y kilogramos de acero, nosotros fuimos capaces de hacer que estos dispositivos inventados hace décadas fueran reinventados. Los hicimos volver a nacer con incontables nuevas funciones en su interior, aprovechando el potencial disponible en estas nuevas tecnologías del siglo XXI.

Con la tecnología actual, utilizamos todos los puntos de interacción de las sucursales para generar data, recolectarla, guardarla, trabajarla, analizarla y disponibilizarla. Como si fuera poco, tenemos la capacidad de predecir flujos futuros de manera de tomar decisiones y ejecutar acciones en pro de optimización de recursos, tiempo y personal.

Hoy día la palabra “rápido” ya no es opcional. Es esencial para sobrevivir y prosperar.

Es desafiante ver como avanzamos un paso y te das cuenta de que se abren 10 nuevos caminos por el cual puedes avanzar y estos 10 abren nuevos 10, o 20 o 100. Las posibilidades de acción cuando estas siendo apoyada por maquinas inteligentes, son infinitas.

Me encanta leer, escuchar, saber lo que se está haciendo y saber que somos parte de esto. Tenemos la posibilidad de facilitar tantas tareas a los gerentes tomadores de decisiones, tenemos la posibilidad de darles en cosa de segundos una respuesta que le podría haber tomado semanas o meses si quiera intentar pensar en cómo resolver.

Tenemos la posibilidad de sugerirles ideas que quizás jamás habría imaginado, y por último podemos trabajar y cruzar cientos de miles de datos, encontrando una respuesta en cosas de minutos, y ejecutando una acción para la eficiencia en sucursales. Una cosa imposible si quiera para el humano más experimentado.

Realmente el mundo nos necesita, el mundo está a la espera de consumir estos productos. YA estamos atrasados, el potencial es infinito y necesitamos seguir trabajando. Necesitamos poder hacernos cargo de todas las ramas que abrimos por cada paso que damos.

Nos dirigimos hacia un mundo con alta densidad de problemas complejos, debemos prepararnos para debates complejos.

Estoy feliz de ser parte de esta era, de pertenecer a quienes no solo vimos el cambio y el potencial, sino que lo estamos construyendo, necesitamos gente, cada vez más gente que quiera crear, conocer, trabajar, hacer cosas en grande y a enfocarse en lo que importa: construir grandes cosas y no esperar grandes cosas para construir.

¡Muchas gracias!

Inspirado en libro "Un mundo Robot" - Javier Serrano

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