Me equivoqué, esto no es lo mío.
Después de varios negocios hosteleros y otros relacionados con la hostelería, nunca me daba por vencido y quería seguir dentro del sector, sí o sí. Pero me equivoqué de enfoque y realmente me di cuenta de que mi rol en el sector era de ser un mentor experiencial.
Durante mucho tiempo, me esforcé por mantenerme en el ámbito de la hostelería, tratando de encontrar mi lugar y mi camino. Sin embargo, llegó un momento en el que comprendí que mi verdadera pasión no estaba en la gestión directa de un negocio hostelero, sino en compartir mis experiencias y conocimientos con otros empresarios del sector.
Todas las vivencias, los éxitos y los fracasos, me llevaron a comprender que mi verdadera vocación era la de ser un mentor para aquellos que, al igual que yo en su momento, se encontraban buscando su lugar en la industria hostelera. Aprendí que mi papel no era el de dirigir un establecimiento, sino el de guiar y apoyar a otros en su camino hacia el éxito.
Hoy en día, puedo decir con orgullo que todas esas experiencias no fueron en vano. Cada obstáculo superado, cada lección aprendida, me ha brindado las herramientas necesarias para poder ayudar a otros empresarios hosteleros a alcanzar sus metas y superar los desafíos que se presentan en el camino.
No me arrepiento de nada de lo vivido, al contrario, agradezco cada experiencia que me ha permitido crecer y convertirme en el mentor que soy hoy. Comprendí que mi verdadera pasión radica en compartir mis conocimientos y ayudar a otros a alcanzar el éxito en el competitivo mundo de la hostelería.
Convertirme en un mentor experiencial me ha brindado una satisfacción que va más allá del éxito personal. Ver a otros empresarios crecer, aprender de mis consejos y alcanzar sus metas, es una recompensa inigualable. Saber que mi experiencia puede ser de utilidad para otros colegas del sector, me llena de alegría y me motiva a seguir adelante en esta nueva etapa de mi vida profesional.
Ahora, mi objetivo es seguir creciendo como mentor experiencial, ampliando mi red de contactos y llegando a más empresarios hosteleros que puedan beneficiarse de mis conocimientos y experiencia. Quiero ser un apoyo para aquellos que están dando sus primeros pasos en la industria, así como para aquellos que buscan mejorar y expandir sus negocios.
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Si algo he aprendido en este camino es que todos cometemos errores, pero lo importante es saber reconocerlos y convertirlos en aprendizaje. Mi equivocación al intentar seguir un camino que no era el mío me llevó a descubrir mi verdadera pasión: ser un mentor experiencial para otros empresarios hosteleros.
Así que si te sientes perdido o desorientado en el mundo de la hostelería, recuerda que siempre hay alguien dispuesto a brindarte su apoyo y compartir su experiencia contigo. No tengas miedo de buscar orientación y consejo, porque a veces, como en mi caso, encontrarás tu verdadera vocación en el camino.
En resumen, aunque al principio pensé que la hostelería era mi destino, descubrí que mi verdadera misión era la de ser un mentor experiencial. Y hoy, con humildad y gratitud, me dedico a ayudar a otros empresarios hosteleros a alcanzar el éxito que merecen.
Carmelo Martín
Fundador & Mentor
Comensalogía Lab
impulsofood@gmail.com