Negocios y espiritualidad: una pareja destinada a entenderse.
¿Qué tipo de empresario hubiese sido Ghandi? ¿Y Martin Luther King? ¿Y Jesucristo?
El rol socio-profesional de una persona se nutre de su calidad humana, de sus valores y principios. En mi artículo ‘Disculpe me he dejado la ética en casa, ¿puedo pasar?’ puse sobre la mesa el tema de si una mala persona puede ser un buen profesional y lo mismo sirve para preguntarse si una mala persona puede ser un buen empresario.
Este post lo inspira la figura de KAZUO INAMORI (85 años), CEO de la corporación KYOCERA y exdirector de las Líneas Aéreas Japonesas. Aunque hace unos años que abandonó el consejo de dirección, sigue de cerca la Fundación Inamori que otorga el Premio de Kyoto, por la tecnología, la ciencia básica, las artes y la filosofía.
Se doctoró en varias universidades en los Estados Unidos, el Reino Unido y Japón y a los 27 años fundó Kyocera Corporation, una compañía de cerámicas que se convirtió en un conglomerado multinacional de alta tecnología que incorpora más de 184 empresas y emplea a más de 30.000 personas. Durante su dirección de Japan Airlines demostró cómo una empresa en estado delicado puede convertirse en puntera en su sector cambiando su estructura y forma de proceder. Kyocera empezó como una pequeña fábrica del extraradio, sin dinero ni credenciales. No tenían nada salvo confianza los unos en los otros (eran 28 profesionales) :
‘’Siempre me he esforzado para basar mis negocios en el corazón humano. Más específicamente, me he enfocado en formas de establecer y mantener relaciones firmes y confiables con todas las personas con las que trabajo’’ Kazuo Inamori
Aparte de multimillonario, es monje budista Zen: su nombre es Daiwa, que significa “gran armonía”. La sede de su compañía tiene vistas vistas a las hermosas colinas y templos de la antigua capital de Kioto
La primera vez que supe de él fue leyendo esta frase suya en Internet:
‘’No necesitan aislarse del mundo para hallar la iluminación, encuéntrenla en su trabajo. Dejen que su diligencia cultive su carácter y los ayude a obtener una vida maravillosa. Los aspectos financieros del trabajo son muy pocos si los comparamos con la capacidad real que este tiene de aumentar el valor de su alma. Mis esfuerzos para elevar mi mente y elevar mi filosofía durante cuarenta años en el negocio me han permitido comprender mi negocio desde un punto de vista más allá del beneficio inmediato. Mientras yo viva seguiré contribuyendo a la felicidad material y espiritual de la Humanidad y de la sociedad’’.
Desde ese día, leí todo lo que pude sobre él: y ahí empezó mi respeto y admiración por su modo de gestión empresarial.
La palabra felicidad aparece en la mayoría de artículos escritos sobre este hombre de negocios, sobre todo felicidad de sus empleados.
Voy a sintetizar algunos puntos de su filosofía, para entender mejor de dónde proviene el éxito de su liderazgo.
- Uno de sus lemas, ‘Hacer lo que nadie ha hecho antes’, impregnó siempre su ‘managment’.
- ‘Triple Sinergia Grupal’. Enfoque (como si de un mantra se tratara) que inculca a su capital humano en todo lo que hacen: fuerza de voluntad + acción del corazón + sincero deseo de servir al mundo. Sinergia de Corazones, Sinergia de Pensamientos y Sinergia de Voluntades.
- La felicidad de los empleados es lo primero. ''Los directivos y mandos intermedios de una empresa deberían buscar la felicidad de todos sus empleados, felicidad tanto material como intelectual. Ese debería ser su propósito, y no el de trabajar para los accionistas”
- Gestión ameba: dotar a los empleados de libertad para actuar potenciando el máximo rendimiento posible y la adaptación al entorno.
- Nuestra profesión es el mejor lugar para potenciar nuestro desarrollo personal, es decir, avanzar como persona debe ir incluido en el desarrollo profesional. Nuestro día a día laboral ha de usarse para convertirnos en mejores personas.
Inamori no sólo centró su actividad en Japón. Creó las Seiwa Juku, escuelas para empresarios de pequeñas y medianas empresas donde enriquecen su calidad humana y profesional. A ellas acuden CEOS de todo el mundo.
Para reconocer la labor de personas que mejoran la vida de otras personas y la sociedad creó los Premios Kyoto, que se otorgan en las áreas de tecnología avanzada, ciencias básicas y artes y filosofía.
Es autor de varios libros donde muestra cómo lograr un equilibrio de lo espiritual y lo físico y afirma que la comprensión de la sabiduría del Universo, es la clave para triunfar en la vida tanto personal como profesional.
Imparte charlas gratuitas a directivos interesados en conocer cómo se gestiona su corporación.
“Trabajen duro, nunca olviden la gratitud, piensen buenos pensamientos, hagan buenas acciones, contrólense con un honesto arrepentimiento, perfecciónense en sus actividades diarias y desarrollen su carácter. Y cuanto más diligentemente realicen estas simples tareas durante su esfuerzo diario, encontraran el significado de la vida y nunca hallaran un camino más glorioso o noble para guiarse en la misma"
En Kaizen Proyectos basamos nuestra gestión empresarial en dos filosofías:
el humanismo empresarial y la mejora continua. Por eso, nos sentimos atraídas e inspiradas por este tipo de ‘management’ y por estos CEOS visionarios que están abriendo camino hacia una Empresa del Siglo XXI más humana y sostenible.
Nos gusta pensar que estamos poniendo nuestro granito de arena para lograrlo.
‘Respeta lo divino, ama a las personas’
Ingeniero de Procesos e Instalaciones y Consultor en ARES Proyectos
7 añosUn ejemplo admirable....