Notas personales del Covid19 relacionadas a negocios

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Segunda parte

Encuentra la luz

¡Muchas personas vieron cambiar sus vidas en 24 horas! No hablamos de meses o semanas, en tan solo 24 horas. A partir que los gobiernos dictaron un cierre y confinamiento, negocios altamente lucrativos y que parecían seguros tuvieron que cerrar, y muchos posiblemente nunca vuelvan a abrir.

Muchos dueños de empresas están pasando los peores momentos de su vida ahora, con el negocio cerrado, las deudas acumulándose y no tener una luz al final del túnel.

Si este es tú caso, mi experiencia en las buenas y las malas en negocios me hacen dar los siguientes comentarios.

¡La vida no es justa, es simple! No hay que buscar un por qué, son negocios y la vida no es justa. Así que si ya sucedió es momento de salir de la depresión y tomar acciones que definan el futuro.

Si estas metido en un circulo negativo no te permitirá tomar las mejores decisiones para tú negocio y la gente que depende de él, por lo que es imperativo que aterrices en que esto ya sucedió y ahora el negocio necesita de tú cabeza fría para tomar las mejores decisiones.

 

¡Piensa fuera de la caja! Para muchos dueños de negocios, principalmente si el negocio tiene varios años, les cuesta pensar en cambios estructurales para iniciar una variación del mismo. En los restaurantes por ejemplo, que son una de las industrias más golpeadas, si no ofrecías servicio a domicilio quizás (si el tipo de comida lo permite) sea el momento de implementarlo, cuidando la calidad y servicio para que tú nombre siga siempre haciendo brillar tu marca. Pero en general, hay que explorar hasta las ideas más locas, que a veces dan resultado por más locas que parezcan.

Acabo de ver una noticia que me pareció increíble: un zoológico europeo estaba ofreciendo video chat con sus animales. Aunque no me lo crean, lo hicieron para que la gente pudiera ver a los animales ¡y hablarles! Descabellado, pero está funcionando, la gente paga por tener una video llamada con una cebra. Ya sea por apoyar al zoológico que está pasando un bache económico por la falta de ingresos, o porque hay niños aburridos en las casas que los papás no saben cómo entretener, el punto es que pensaron fuera de la caja y les está funcionando. Haz una lluvia de ideas donde participen tus empleados y familia, que mencionen todo lo que se les pueda ocurrir y luego hay que analizarlas financiera y operativamente, para encontrar las que mejor se acoplen al negocio y al mercado.

¡Negocie! Afuera la pena, estos son momento en los que se requiere de dar la cara y hablar abiertamente con sus proveedores, acreedores y empleados. Si el negocio pasa por malos momentos es necesario que hable con todos y les exprese abiertamente cómo están las cosas. Con esto se puede buscar el re negociar una deuda, reducir salarios durante el tiempo que esto dure o que se obtengan reducciones de costos, tales como rentas, que de seguro se logra, ya que el dueño del local sabe que le será difícil rentar en estos momentos.

¡Ponga a la venta sus fortalezas o capacidades holgadas! En estos momentos hay industrias o comercios que no deben pensar en utilidades, sino en subsistencia. Como parte de esa subsistencia revise si su negocio tiene áreas o capacidades holgadas que pueda ofrecer a otras industrias o comercios. Por ejemplo, si usted tiene un solido servicio a domicilio con un equipo de motoristas, pero la demanda de su producto o servicio ha caído, puede ofrecer parte de ese servicio incluso a su competencia, para que ellos le paguen por su fortaleza. Esto puede aplicar a todo, bodegas con espacios disponibles, cuartos fríos, servicios de recepción de llamadas, departamentos de ventas o telemercadeo. Si tiene recursos disponibles trate de venderlos. Con esto mantiene a su personal trabajando y percibiendo un salario y le ayuda a cubrir sus costos hasta salir de la época en la que vivimos.

¡Huya de los costos fijos! Trate de flexibilizar su empresa al buscar alternativas que le permita cambiar costos fijos por variables. La tercerización o outsourcing es una de ellas, ya que le permite rentar espacios en bodegas por ejemplo pagando solo por el espacio usado, así como contratar personal solo por el tiempo necesario. Revise cada área de su negocio para tratar de encontrar áreas que le permitan ahorrar a través del cambio de modelo de costos fijos a variables.

La dura realidad: los latinoamericanos tendemos a creer que los negocios son como nuestros hijos, hay que luchar por ellos hasta la muerte, pero la realidad es otra. No es nuestro hijo, es un negocio, el cual fue formado para dar dinero, no hay otra explicación. Si el negocio NO da dinero ya no es negocio, es simple y cruel. Debemos sentarnos y decidir cerrar si es inviable mantenerlo en este momento, ya que la posibilidad de perder dinero por mantenerlo con la esperanza de abrir pronto nos puede hacer que se acumulen rentas por pagar o pasivos por pagar. Si usted no es el dueño de una gran fortuna en el banco, que le pueda permitir seguir pagando rentas (aunque sea reducidas), acumulando pasivos (si el personal está suspendido), cierre, venda lo que pueda y espere tiempos mejores. Es duro, lo sé, pero es peor el aferrarse a un negocio que posiblemente pueda arrancar en 3 o 6 meses y que para ese momento el nivel de deuda sea imposible de pagar.

Siempre he pensado que nuestro sistema educativo está mal formado, se nos enseña a que si uno se equivoca y pierde puntos es malo, que la formula correcta es no equivocarse y ganar con sobresaliente, pero en negocios esto no es real. No hay mejor escuela que el cometer errores, equivocarse y aprender es la mejor escuela de negocios de la vida, así que si tiene que cerrar ahora no se desanime, aprenda de los éxitos y fracasos, y vuelva a iniciar.

 

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