Nuestra capacidad de ser resilientes y salir adelante
Nuevamente les traigo contenido sobre una habilidad que es importante desarrollar en estos tiempos, se trata de la Resiliencia y Flexibilidad. Esta es una habilidad también presente en la lista del último reporte realizado por el Foro Económico Mundial llamado “The Future of Jobs Report, 2020”. Abajo está la lista de las 15 habilidades que este reporte identifica como los Core Skills clave de aquí al 2025:
- Pensamiento analítico e innovación
- Aprendizaje activo y estrategias de aprendizaje
- Resolución de problemas complejos
- Pensamiento crítico y análisis
- Creatividad, originalidad e iniciativa
- Liderazgo e influencia social
- Uso, seguimiento y control de la tecnología
- Diseño y programación de tecnología
- Resiliencia, tolerancia al estrés y flexibilidad
- Razonamiento y resolución de problemas
- Inteligencia emocional
- Solución de problemas y experiencia del usuario
- Orientación al servicio
- Análisis y evaluación de sistemas
- Persuasión y negociación
En anteriores entregas, ya comenté sobre el Pensamiento Crítico y la Inteligencia Emocional. Y ahora entraremos un poco más profundo al tema de la Resiliencia.
Algunos conceptos de Resiliencia:
“La resiliencia es la capacidad de recuperarse después de que la vida te derriba” - Christina G. Hibbert
“La resiliencia es la fuerza para continuar en el camino que sabes que es verdadero, a pesar de los desafíos y obstáculos” - Joyce Marter.
“Es tu capacidad para resistir la adversidad y recuperarse y crecer a pesar de las recesiones de la vida " - Amit Sood.
“La resiliencia es la capacidad del ser humano para hacer frente a las adversidades de la vida, aprender de ellas, superarlas e inclusive, ser transformados por estas” – Edith Henderson Grotberg
La resiliencia es la capacidad de resistir la adversidad y recuperarse de los eventos difíciles de la vida. Ser resiliente no significa que las personas no experimenten estrés, trastornos emocionales o pena. Algunas personas comparan la resiliencia con la tenacidad mental, pero demostrar resiliencia incluye superar el dolor y el sufrimiento emocional.
La razón por la que la resiliencia es deseable como cualidad es que nos ayuda a recuperarnos de la adversidad sin perder la moral o la confianza. Siempre tendremos situaciones complejas en nuestra vida personal que nos paralicen o nos hagan sentir mal, pero también pasa en el mundo del trabajo; muchas veces los proyectos salen según lo planeado y, en otras ocasiones, no salen de acuerdo con lo esperado y generan un impacto severo en nuestro desempeño. Sin la necesaria habilidad de resiliencia, es fácil dejar que estas cosas nos superen.
Por ejemplo, es común tener una espiral de pensamientos negativos. Quizás no cumplimos con una fecha límite en nuestro trabajo, y estamos ansiosos por saber cómo reaccionará nuestro cliente, esto puede escalar rápidamente a otros temores: "¿quizás perderé al cliente? ¿O incluso perderé el empleo?”, y el mayor estrés que esto conlleva puede afectar gravemente nuestra productividad y bienestar. Lamentablemente, es común pensar en estas situaciones “catastróficas”, dejando que nuestros pensamientos salten al peor escenario posible antes de saber el resultado.
Aquí es donde los psicólogos que han estudiado la resiliencia, como Carol Dweck, pueden marcar la diferencia. En el libro "Mindset" de Dweck, ella resume claramente las ventajas de una actitud resiliente en sus definiciones sobre la mentalidad de "crecimiento" versus la mentalidad "fija". Ella sostiene que una "mentalidad fija" limita el potencial: anima a un individuo a creer que no puede cambiar, que la crítica es, por tanto, un fiel reflejo de la realidad y que los desafíos son insuperables. Una persona con una "mentalidad de crecimiento", por otro lado, es aquella que acepta los desafíos, disfruta de las oportunidades para aprender y acepta la imprevisibilidad de la vida.
La resiliencia puede ser un arte, el arte supremo de vivir, pero recientemente ha sido sometida al escrutinio de la ciencia. Esto se sabe hasta ahora. En el corazón de la resiliencia está la creencia en uno mismo, pero también la creencia en algo más grande que uno mismo.
Las personas resilientes no se dejan definir por la adversidad.
Encuentran resiliencia moviéndose hacia una meta más allá de ellos mismos, trascendiendo el dolor, y al percibir los malos tiempos como una situación temporal.
¿Pero qué características podemos reconocer en personas con una alta resiliencia? ¿Qué tienen o cómo son las personas resilientes?
Tienen conciencia de sí mismos
La conciencia de sí mismo es esencial porque nos ayuda a vernos a nosotros mismos con claridad y profundidad. Cuando somos conscientes, podemos ser más responsables de nuestras acciones. Con la conciencia de sí mismo, podemos estar preparados para ir más profundo en nuestro desarrollo personal.
Son Realistas
Ser capaz de ver el mundo y las situaciones de una manera realista tiene un gran impacto en nuestra capacidad de ser resilientes. Al combatir una situación difícil, ser realista nos ayuda a abordar la situación y a tomar decisiones claras y concisas sobre cómo afrontarla. Aunque ser realista es beneficioso, debe equilibrarse con optimismo y, a veces, con un poco de pesimismo.
Mantienen la calma en situaciones de estrés
La capacidad de mantener la calma en circunstancias difíciles es invaluable. Mantener la calma nos permite enfrentar cualquier obstáculo y aun así tomar decisiones meditadas sobre cómo combatirlo. Calma y resiliencia van de la mano porque ante la adversidad, ambas características son necesarias para superarla de manera positiva.
Son empáticos
La empatía es la capacidad de comprender y compartir los sentimientos de los demás. Cuando una persona es resiliente también puede mostrar empatía con quienes le rodean, tendrá la capacidad de comprender mejor la situación y cómo está afectando a otras personas. Con esta habilidad, podrá evaluar mejor cómo avanzar y combatir la situación teniendo en cuenta a los demás.
Poseen Autocontrol
Cuando eres resiliente, el autocontrol te ayuda a tomar control sobre ti mismo y tus acciones. Un aspecto importante de la resiliencia es ser responsable de sí mismo y de cómo combatimos los problemas. El autocontrol se manifiesta más en momentos difíciles y ahí es también donde más se ve nuestra resiliencia.
Son Motivados
Estar motivado nos permite buscar y luchar por las cosas difíciles de la vida. Cuando la resiliencia y la motivación trabajan juntas, estaremos listos para luchar por nuestro objetivo y superar los obstáculos en el camino.
Son Optimistas
Cuando surgen obstáculos, un optimista primero pensará, '¿cómo puedo superar esto?' En lugar de '¿por qué me pasó esto a mí?' Con su energía enfocada en lo positivo, los optimistas tienen la energía y el espacio para ser resilientes y salir adelante.
La verdad es que hoy más que nunca tenemos la necesidad de desarrollar y utilizar la resiliencia en nuestra vida cotidiana, nuestro trabajo, nuestra vida personal y en lo familiar. Es posible desarrollar resiliencia en cualquier situación que nos provoque estrés o cualquier situación que sea para nosotros una adversidad. Con esto, no significa que la resiliencia nos proteja del peligro, o de situaciones estresantes; eso no es lo que hace. Pero la resiliencia no solo significa apoyo, fortaleza, capacidades, sino también acciones para afrontar las adversidades que nos presenta la vida.
Para Ron Breazeale, Ph.D, y psicólogo clínico que se ha especializado en resiliencia, existen 11 habilidades y actitudes que pueden ayudarnos a aumentar nuestra flexibilidad y resiliencia:
- Construir relaciones positivas con los demás. Las relaciones que pueden brindar apoyo y afecto son uno de los factores principales de la resiliencia. Construir estas relaciones, dentro o fuera de la familia, que nos ofrezcan amor, aliento y tranquilidad, nos ayuda a construir resiliencia.
- Ser flexible. Por definición, es un componente clave de la resiliencia y uno de los factores principales en el ajuste emocional y la madurez. Esto requiere que seamos flexibles en pensamiento y en acción.
- Ser capaz de hacer planes realistas y actuar para llevarlos a cabo. Ser capaz de ver lo que es, en lugar de lo que te gustaría que fuera, es parte de esta habilidad. Ser proactivo en lugar de reactivo y asertivo en lugar de agresivo o pasivo son componentes de esta habilidad.
- Ser capaz de comunicarse bien con los demás y resolver problemas tanto individualmente como con los demás. Esto incluye habilidades básicas de comunicación, escucha y resolución de problemas.
- Ser capaz de manejar sentimientos fuertes. Esto requiere poder actuar sin ser impulsivo y responder por emoción. También abarca la capacidad de dejar de lado las emociones cuando se requieren acciones y pensamientos claros. Ser capaz de utilizar el pensamiento como una forma de gestionar las propias emociones es un componente clave de esta habilidad.
- Tener confianza en tí mismo. Tener una imagen positiva de sí mismo es fundamental para que una persona pueda enfrentar y manejar el miedo y la ansiedad en su vida, por ejemplo, ayudando a otra persona.
- Ser capaz de encontrar un propósito y un significado. Ser capaz de encontrarle sentido a lo que está sucediendo y encontrarle sentido es fundamental para poder manejar los sentimientos que se despiertan en una crisis. Las prácticas espirituales y religiosas son a menudo un componente de este factor, incluida la actuación sobre los valores propios.
- Poder ver el panorama completo. Los optimistas en general son más capaces de ver el panorama general que los pesimistas. Es más probable que vean que los eventos buenos y malos que ocurren en su vida son temporales en lugar de permanentes. Esto también pasará. También es más probable que vean que los eventos tienen un impacto específico en ciertas áreas de su vida en lugar de tener un impacto generalizado en toda su vida o su futuro. Por último, es menos probable que se culpen a sí mismos o a otra persona por los tiempos difíciles. Los optimistas evitan el juego de la culpa. Se responsabilizan a sí mismos y a los demás sin la dosis emocional de culpa.
- Ser capaz de apreciar y utilizar el humor de forma adecuada. Si el humor es "enfermizo" o "oscuro" a menudo depende del entorno. La risa puede tener poderes curativos. Por ejemplo, si no te sientes bien, mira una película divertida.
- Ser capaz de cuidarse a sí mismo, por ejemplo, dieta, ejercicio, salud financiera, etc. Tener un buen balance entre vida personal y trabajo. Tener espacio para el ocio y compartir con los demás, es parte de tener una vida sana.
- Ser capaz de cuidar a los demás física y emocionalmente. Las ocupaciones y las actividades de voluntariado que implican el cuidado de los demás a menudo pueden desarrollar resiliencia.
La psicóloga Edith Grotberg, Ph.D., cree que todos necesitan recordatorios de las fortalezas que tenemos. Ella insta a las personas a cultivar la resiliencia pensando en tres líneas:
Tengo: relaciones sólidas, amistades y familia, modelos a seguir; estos son apoyos externos que nos brindan apoyo y soporte;
Soy: una persona que tiene esperanza y fe, me preocupo por los demás, estoy orgulloso de mí mismo; estas son fortalezas internas que todos podemos desarrollar;
Puedo: comunicarme, resolver problemas, medir el temperamento de los demás, busco tener relaciones positivas; todas las habilidades interpersonales y de resolución de problemas que se adquieren.
La atención al buen desarrollo de estos 3 factores, favorecen la resiliencia.
Espero que estas reflexiones les sean de utilidad como punto de partida para pensar y tomar acciones en función de trabajar nuestra capacidad de ser resilientes y flexibles.
¡Nos vemos en la próxima entrega! Muchas gracias por leer!
Sobre la autora:
Soy Karina Pérez Galindo, actualmente Associate Director de Robert Half. Tengo el honor de haber sido nombrada LinkedIn Top Voices Latinoamérica. He estado toda mi carrera en consultoría en temas de personas y organizaciones. Hoy día soy una apasionada de todo lo relacionado con el Futuro del Trabajo, entender y promover lo que serán las habilidades del futuro para los profesionales. Cómo la transformación digital, la incorporación de la tecnología y la disrupción en los modelos de negocio están cambiando el lugar de trabajo y cómo esto afecta las competencias que necesitan los profesionales en este nuevo contexto.
Coordinador de Gestión De Riesgos de Seguridad Pool MLP, Gerencia SSO MLP en Mutual de Seguridad Asesorías
3 añosExcelente articulo!
Gerente Administrativo en DHISVE
3 añosFelicitaciones Karina, me encantó, gracias por compartir, para mí palabras claves conocerte, empatía, cambio, flexibilidad, temporal, la capacidad de adaptarse a los cambios con un entendimiento pero con planificación ayuda en la resiliencia, se debería enseñar en las escuelas a los niños y adolescentes.
Chief Product Officer en Sysde | MBA Gerencial Internacional
3 añosExcelente lectura, gracias por compartirlo, hoy día la resiliencia es el skill más poderoso que puede tener el ser humano.
Ayudo a líderes y equipos a fortalecer comunicación, crecer en confianza y mejorar resultados │ Coaching, mentoring y programas que transforman conversaciones en acción │ +20 años creando resultados tangibles en LATAM
3 añosEs curioso cómo nos podemos "olvidar" de algunas cosas que ya hay, o que nos constituyen. Como especie, somos testarudamente resilientes, hemos sido, por lo mismo, podemos reconectar con tal atributo. Me he disfrutado la nota
Director de Innovación y Sostenibilidad en Aware
3 añosbuenísimo Karina Perez Galindo, como complemento y modelo a seguir en resiliencia, sugiero a todos leer sobre la vida de Ernest Shackleton. El libro "Endurance: Shackleton's Incredible Voyage" lo retrata en forma excelente. Saludos!