¿Pan para hoy, hambre para mañana?
Estimados miembros de esta red.
Lunes 6 de abril de 2020, un día más que libramos una fuerte batalla contra un virus que no vemos con nuestros ojos, no podemos combatirlo eficientemente, quita vidas, y amenaza con quitarnos la nuestra, y aunque la razón principal de esta amenaza sea el contagio y la exposición al riesgo de muerte, no podemos dejar de lado lo que significa para el mundo entero encerrarse en una cuarentena forzada en cada uno de sus hogares.
En Latinoamérica cargamos a cuestas una lucha histórica con el subdesarrollo y con ella la carencia de oportunidades laborales, la cual subyuga a la mayor parte de su población a aceptar una vida sin libertad económica, principal secuela de la falta de trabajo adecuado, lo que obliga a muchos de los que conforman la población económicamente activa y también a menores de edad, a buscar el sustento diario en la calles, sí, las mismas que hoy no pueden ser transitadas por nadie porque deben quedarse en casa.
Habrán leído o revisado que las bolsas de valores de las principales economías del mundo han caído, ya se proyectan perdidas de billones de billones de euros en economías tan sólidas como la Alemana, Reino Unido, USA, incluso China porque su producción se reactiva paulatinamente luego del agresivo golpe mortal del CoVid 19, eso quiere decir que las grandes empresas del mundo se deprecian. o lo que es lo mismo sus activos, su inventario, su capital invertido baja de precio ante las expectativas racionales del mundo, y la forma simple de explicarlo es, lo que antes se cotizaba como una empresa de economía global por ejemplo en el mercado de la explotación hidrocarburífera como el petróleo, ya no se ve como el mejor negocio, porque lamentablemente el mundo tienen volcado sus ojos en sobrevivir, son entonces, los servicios de sector salud, industria farmacéutica, alimentos, y el transporte que mueve estos productos y servicios, los sectores que lograrán sostenerse, potencializarse, y en el “mejor de los casos”, crecer al ritmo de la pandemia. Es una pena que su crecimiento no sea por una mejora del ciclo económico, sino por la sobre demanda de sus productos que en ciertos items causa desabastecimiento.
El mundo está inmerso en un compás de espera, la respuesta de una cura puede tardar y no conocemos cuánto, el Gobierno no tiene claridad sobre el horizonte de tiempo que puede necesitar para controlar el crecimiento de la curva de contagios. En el Ecuador, el teletrabajo circunscribe un minúsculo grupo de trabajadores contratados formalmente, nuestro principal ingreso fiscal viene del petróleo y de la agricultura exportable, aunque importantes, la pesca, el camarón y los servicios están muy por debajo de los 2 rubros principales, y las empresas de servicios ecuatorianas sólo sirven a ecuatorianos, no exportamos servicios. Muchas familias viven del comercio formal e informal, pero hoy no están vendiendo. Descartemos el petróleo por un momento, nos queda la agricultura, y de allí, junto con la producción ganadera y acuícola domésticas, nos alimentamos. Estas son actividades que pudieren incrementar sus ingresos de manera exponencial, ¿pero acaso también crecerá su beneficio? Es incierto.
La banca debe abrir sus puertas todos los días, es una actividad prioritaria, no puede detener el flujo de dinero a sus clientes y usuarios, porque son sus pasivos, sus deudas que tiene que corresponder y brindar una respuesta inmediata que se traduce en la mayoría de los casos en la entrega de dinero, sería una hecatombe si se cerraran los bancos, el gobierno del Ecuador ha diagramado nuevas coordenadas sobre la recuperación de sus créditos, sean de consumo, a pequeñas empresas, de consumo, créditos vivienda, pero sólo se verá su aplicación una vez superada esta fase de la pandemia, la que nos mantiene en casa. Reconozcamos tempranamente que la banca no puede refinanciar el 100% de sus créditos otorgados, eso es una utopía, pero el gobierno que es el promotor de la idea, sí puede y debe gobernar, parte de ello es emitir decretos y promover reformas a las leyes que rigen el sistema económico y financiero establecido, posiblemente las nuevas reglas presionen los precios y comisiones del negocio bancario y con ello su margen de contribución, es la manera estimular a estos refinanciamientos masivos que pueden surgir luego de este compás de espera.
¿Qué pueden hacer las personas, las familias, las empresas de servicios, los constructores, promotores inmobiliarios con proyectos en marcha, los importadores de suministros, de ferretería, de automóviles, de equipos camineros, los fabricantes de artículos suntuarios y de cualquier actividad que no sea alimentos, farmacéuticas, servicios médicos, transporte y relacionados o todo aquel que tiene efectivo en su cuenta bancaria, qué hacer mientras tanto?.., Guardar, ahorrar en instrumentos altamente líquidos, como los fondos de inversión administrados por las administradoras de Fondos. Son alternativas de ahorro que sin ser emitidos por los Bancos, llegan a ellos y son custodiados en una cuenta bancaria de propiedad de todos los partícipes de este fondo. Las administradoras de fondos contribuyen a que los agentes económicos, como las instituciones del sector financiero, permanezcan líquidas y en atención constante a sus clientes, dinamizamos la inversión realizada por las mayores empresas del país a través del canal de negocios bolsa de valores, grupos económicos de productos alimenticios, farmacéuticas, instituciones de servicios médicos privadas cotizan en este mercado. Las AD. FON. Administradoras de fondos son empresas con estructuras livianas, con pocos empleados, no tienen redes de agencias porque no las necesita, sus operaciones se concretan de manera desmaterializada, sin papeles, a través de la Bolsa de Valores de Quito o Guayaquil, su patrimonio autónomo no está invertido en créditos que recuperar por lo tanto no costean empresas de cobranzas, el costo fijo es mínimo, por ello las administradoras de fondos pueden rentabilizar mejor los márgenes de contribución de cada fondo administrado.
Mi consejo profesional, no es diferente a la óptica de los mayores inversionistas del país, vemos el accionar de algunos Banqueros solidarios y seguramente preocupados por el ingreso no recaudado en este trimestre, invitan a donar en un fondo de inversión el cual nace con una aportación inicial millonaria, cuya cuenta obviamente está abierta en su Banco, gana la comunidad con la ayuda y esto se agradece muchísimo, gana la Administradora de Fondos y Fideicomisos pues se aprecia el patrimonio de su fondo, se incrementa el valor de la unidad de participación por adherente, ese fondo administrado al convertirse en el repositorio de fondos líquidos que se destinarán a compras de suministros crecerá sostenidamente, hasta llegar a su maduración y retiro para la adquisición de equipos y pruebas diagnósticas del Covid, y por último, claro que sí, gana el mercado que se dinamiza. Excelente manejo de las posibilidades en “Tiempos de Pandemia”.
Por lo referido, mi trabajo es asesorar financieramente sobre mecanismos de ahorro, y promuevo los fondos de inversión como el producto menos sensible a la pandemia, y de mejor retorno en estos días de cuarentena.
Consúltenme estoy trabajando desde casa y siempre atenta a responder cualquier duda que tengan Ustedes. Mis datos de contacto están en esta publicación.
ACBIR Guayas, Licencia Profesional No. 822 G
4 añosMuy buena explicación de la situación y si estoy de acuerdo que los fondos de inversión son la mejor opción en momentos de crisis, lo que falta es cultura financiera en la población para tener siempre un contingente en escenarios menos favorables...
Experta en Mejora de Procesos y Sistemas de Gestión || Implementación de Sistemas de Gestión de Calidad ISO 9001- 37001 -30001 para PYMES || Gestión de Procesos y Riesgos || Consultora en Calidad y Proyectos ||
4 añosMalena. Estoy interesada. ¿Me ayudas por favor?