"Pensar el Futuro"
Transcribo un fragmento de la nota de la periodista Mariela Lanza en Página12 en el que el Ing Agr Guillermo Montero, Decano de la Facultad de Cs. Agrarias - UNR, habla de Sistemas agropecuarios sustentables: Desde hace unos años, en Argentina se promueve el estudio de carreras consideradas prioritarias para el desarrollo nacional, no sólo por su función estratégica de cara al futuro, sino por la demanda insatisfecha de profesionales ligados a ellas. La ciencia y la tecnología son las áreas que más se pretende fomentar entre los estudiantes que inician sus estudios de educación superior.
Una gran cantidad de la población mundial sufre hambre pese a que existen unos 7.400 millones de habitantes en el planeta y se produce alimento para 12.000 millones aproximadamente. La ecuación es sencilla: enormes porcentajes de lo que se produce se desperdician, al tiempo que se realiza una distribución injusta.
Frente a este panorama poco favorable, existe, a su vez, una tendencia a la alimentación saludable y la protección del medioambiente. Ante este complejo escenario, las carreras ligadas a la actividad agropecuaria se convierten en una opción clave para satisfacer las necesidades actuales y futuras.
Así lo entiende Guillermo Montero, decano de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), al afirmar que la carrera de Ingeniería Agronómica “construye conocimiento acerca de los sistemas agropecuarios y agroalimentarios regionales, y persigue el objetivo de lograr mayor calidad y cantidad de producción agroalimentaria, atendiendo a la conservación de los recursos naturales y a la construcción de un desarrollo equitativo e inclusivo”.
A su vez, Montero hace hincapié en la importancia de esta oferta educativa para el desarrollo del país: “Tiene la misión de pensar y construir una nueva agricultura nacional (…), que se anime a afrontar el desafío de crear sistemas agrícolas menos dependientes de los insumos externos, que minimice la aplicación de agroquímicos preservando el ambiente y la salud de las personas, que promueva mayor biodiversidad en los agroecosistemas, que se diseñe para cada ambiente y pueda alcanzar altos niveles de resiliencia ante los cambios ambientales manteniendo los niveles de producción.”
El decano de la UNR establece, además, que “el modelo de agricultura industrial, de base genética estrecha y altamente dependiente de insumos externos al agroecosistema, está agotado porque, en poco tiempo más, no habrá forma de afrontar sus externalidades ambientales y sociales negativas.” Y augura que “la agricultura del futuro cercano será más dependiente del asesoramiento técnico integral de los profesionales (…) que del consumo indiscriminado -en muchos casos innecesario- de productos ofrecidos por diversos vendedores a los productores agropecuarios.”