Pensar rápido, pensar despacio
Cuando nuestro cerebro interpreta las señales electromagnéticas que lo acribillan, solemos llamar a esa interpretación «la realidad consciente»; cuando tomamos una decisión supuestamente racional, creemos actuar conscientemente. La psicología moderna habla de que un noventa por ciento de las decisiones diarias se toman proyectadas por la fuerza del inconsciente. Ambos tipos de experiencia son fructíferos a la hora de ponerse a escribir. Poco importa lo que tu ego le diga a tu raciocinio. Si has leído el libro del premio Nobel de economía Daniel Kahneman Pensar rápido, pensar despacio, sabrás que el noventa por ciento de las decisiones que tomamos se deciden motivadas por lo emocional, lo que llamamos el instinto, y después nuestro cerebro, que como explicó Jung trabaja para crear una sensación (irreal) de homogeneidad te convencerá de que elegiste racionalmente comprar una casa en ruinas.
Kahneman habla de sistema uno y sistema dos para referirse a lo implementado instintivamente y a lo meditado racionalmente. En un estudio de campo de miles de individuos de todas las extracciones sociales, se llegó a una conclusión presumible y otra inquietante: no tomamos decisiones racionales, sino emocionales. Lo inquietante fue que un porcentaje significativo de individuos que no se decantaban por ninguna toma de decisión racional o emocional, se comportaba así por haber sufrido un percance no en el córtex prefrontal, sino en la zona límbica dañada, la que corresponde a las emociones, y los sujetos se veían incapaces de generar expectativas, hacer predicciones sencillas y tomar decisiones. Lo veremos más detenidamente en el capítulo del copywriter: los publicistas están al tanto de los descubrimientos neurológicos y los utilizan con (o contra) nosotros. Igual que Matt Groening lo estaba y lo utilizaba en Los Simpsons o Futurama.
Profesor de gramática y narrativa | Corrector | Escritor | Copywriter | Redactor Web | Maquetador de libro impreso y electrónico | Programador junior backend y frontend
4 añosGracias, buen día para todos.