Presupuesto maestro
El mes de abril 2022 no fue bueno. Los ingresos esperados no se cumplieron, provocando serios problemas para cumplir con nuestros gastos de operación: retrasos en el pago a proveedores, incumplimiento en el pago de impuestos y desfases en el pago de la nómina.
Por supuesto que, tampoco pudimos cumplir con nuestras obligaciones personales (pagos de rentas, servicios, colegiaturas, etc.) y mucho menos, disponer de recursos para el entretenimiento.
No tener un colchón financiero, ni fuentes alternas de financiamiento (bancos, tarjetas de crédito o algún familiar con recursos) lo hace un poco más difícil.
Imagina el estrés y la presión que esto provoca.
Sin duda, es el precio del ser empresario. Las cosas no siempre son sencillas, la inestabilidad es algo de todos los días y la incertidumbre puede matarte. No digo que todo sea malo, al contrario, ser empresario tiene cosas muy buenas.
Es una realidad que estará presente siempre. Habrá momentos de “vacas gordas” y otros de “vacas flacas”. Hoy nos tocó vivir la parte complicada. Tampoco te digo qué es la primera vez que lo vivo y sé que, tampoco será la última.
¿Qué podríamos hacer para minimizar el impacto?
Pues bien, los gurús de la administración dicen que tener un...