Puertas al campo
Vamos a analizar los vientos recientes de proteccionismo y cierre de fronteras en el plano económico, documentando el lado negativo del aislacionismo comercial y el peaje que supone para las economías. El tema viene a colación por la relación de México con Estados Unidos y las noticias recurrentes sobre la imposición de aranceles a las importaciones que realiza Estados Unidos de productos mexicanos. Pongamos solamente un par de puntos sobre la mesa y a partir de ahí saquemos cada uno nuestras propias conclusiones, para eso primero veamos los mayores déficits comerciales, solo en bienes por lo que nos falta el factor de servicios que puede compensar o desviar más el análisis, que tiene Estados Unidos.
Fuente: U.S. Census
Tanto para México como Canadá que participan en el TLC, las principales exportaciones están situadas en el sector automotriz y otra parte con cierta relevancia en productos petroleros. Sin embargo los números son menores comparados con China, y México representa en cuarto lugar en las relaciones de mayores déficits en bienes.
¿Tiene lógica para México? La economía de Estados Unidos es líder en desarrollo a nivel mundial, por lo tanto está orientada a los servicios, en donde casualmente, tiene un superávit en su balance y es que, mientras que los sectores primarios y secundarios en México mantienen su influencia dentro del PIB, en Estados Unidos no parece razonable competir por ensamblar vehículos cuando lo pueden hacer más barato en USD 4,000 dólares y los porcentajes de desempleo en 4.7% los cuales son mínimos. Impresionantes son los datos comparativos de lo que representa el sector terciario para Estados Unidos frente al peso específico que tiene en México.
Una de las principales lacras que genera el levantamiento de barreras al comercio es la falta de innovación, reducir la competencia tiene un efecto directo en sesgar la capacidad de los países para producir bienes de forma más eficiente y el avance tecnológico. Al castigar la entrada de otros productos, conceptualmente el primer afectado es el proceso innovador de cualquier economía que se ve relegado en las prioridades de cualquiera que no debe competir para mejorar y que redunda en el consumidor y en la economía propia. Léase los coches que se fabricaban en Europa del Este o España hace 50 años y que se habían quedado anclados en el tiempo.
En resumen, podemos considerar que beneficia de una forma u otra a todos los países el libre comercio y el intercambio de bienes y servicios generando riqueza e innovación.