¿Qué le espera a la publicidad y el marketing luego del COVID-19?

Debo confesar que el titular es muy esperanzador, porque en verdad debí colocar:

“¿Qué le espera a la publicidad y el marketing luego de la cuarentena?”.

Quizás en algunas semanas más volvamos a las calles de manera progresiva, pero esto tiene para largo y nos está golpeando como nunca. Pudimos antes haber pasado crisis sectorizadas por países o regiones o incluso de manera global, pero teníamos la posibilidad de trabajar libremente y así buscar darle la vuelta a la situación. 

Que yo recuerde, jamás 3,900 millones de personas al mismo tiempo, estuvimos encerradas en nuestras casas sin la posibilidad de producir al cien por ciento.

¿Qué lecciones nos está trayendo todo esto?

Digitalización.

Las empresas que invirtieron en digital se anotaron un gol de campeonato, sin embargo no son muchas, porque a la mayoría el momento los tomó desprevenidos. Imagino pensando en agendar la reunión para recién comenzar el proyecto o ya montados en el proceso pero aún haciendo pruebas y ajustes al sistema. Han saltado muchas deficiencias con las páginas, los datos, el proceso, el tiempo de entrega y se están ajustando sobre la marcha. 

Está claro que las empresas tienen que ubicar la pata digital en un sitio relevante y privilegiado dentro de la experiencia del consumidor. 

Solidaridad.

Aunque no conozco a todos mis vecinos, nos hablamos a diario por chat, reportando la limpieza y las rondas de seguridad del edificio. Y seguramente lo mismo sucede en el tuyo. La crisis nos cambió, nos acercó, no somos inmunes y nos preocupa el país, los emprendedores, los que están viviendo de sus ahorros.

Hay muchas empresas que han puesto a disposición de quien lo desee su experiencia y conocimiento: cursos gratuitos, asesorías, etc.

Reinvención.

Nada va a ser igual, eso es un hecho. Muchas empresas y negocios lamentablemente van a desaparecer y también muchas empresas se van reinventar para volver más fuertes y acorde a los nuevos tiempos. 

Si me pongo extremista, hoy ha quedado claro que la ropa no importa tanto porque tenemos el clóset empolvado; nos va a dar miedo viajar hacia cualquier destino, vamos a pensar más la solicitud de créditos para nuevas casas y autos. Y así una lista interminable que involucra rubro por rubro.

"La incertidumbre es total, pero la fe tiene que ganar".

Las marcas tienen que acercarse más a los consumidores y hacernos sentir que todo va a estar bien y que estamos juntos en esto.