¿A quién perjudica la piratería?

Puedes encontrar las versiones tanto en audio como en video de este contenido en sus respectivas ligas.

La piratería es un tema que, dependiendo a quién le preguntes, puede provocar reacciones muy distintas. Si eres alguien que vive de los ingresos generados por la venta de su obra, sabes que eso de tener el derecho a recibir un pago no debería ser cuestionado. Por otro lado, a muchas personas no les gusta pagar por productos o servicios, y si pudieran, no lo harían, debido a causas tan variadas como que no tienen el dinero, o simplemente no quieren pagar.

 El caso del cierre de AnimeFénix es uno más en el cierre de distintas plataformas y sitios que enlazaban a la distribución ilegal de contenido sobre el que no tenían ni pagaban derechos. El comunicado lanzado por el equipo solo es un reflejo del poco entendimiento que algunos sectores todavía tienen sobre la propiedad intelectual y el derecho de autor, y es una consecuencia terciaria de que, con el auge del internet en los noventas y dos miles, muchos consumidores creían que todo lo que se encontraba en este maravilloso lugar era gratuito y que podían utilizarlo como quisieran. Si eres consumidor, qué maravilloso, pero si eres alguien cuyos ingresos dependen de la venta legítima de tu obra, el que alguien más lucre con ella, no es algo que te favorece.

 Volviendo al comunicado del equipo detrás de la popular plataforma se buscan culpables. Sony, al comprar Funimation, y al estar en proceso de la adquisición de Kadokawa, es acusada de monopolio, y eso que en el comunicado no se menciona tampoco a Aniplex, también propiedad de Sony. Se busca incitar al público sobre los males corporativos y cómo estos no tienen derecho a proteger “el arte que tanto nos ha dado y que ahora está en peligro de ser cada vez más inaccesible por suscripciones”. Este comentario es absurdo porque critica la ilegalidad desde la ilegalidad, y aprovecha para meter las prácticas abusivas en algunos estudios de animación con las cargas de trabajo. Seguro los animadores tendrían mejores condiciones laborales si su trabajo se disfrutara sin ninguna remuneración, ya que no creo que los ingresos generados por ligas o publicidad en los sitios ilegales se fuera al fondo de ahorro de estas personas.

 “La piratería nunca desaparecerá mientras haya compañías con más avaricia que corazón” también alega el comunicado. El pretender defender el malentendido derecho del consumidor por encima del derecho del creador es práctica común por los avatares de la piratería que creen que tienen una función como repositorios absolutos que preservan la cultura para futuras generaciones, cuando nunca promovieron la producción o distribución de esta. Si no hay un interés financiero para comercializar un producto, es más difícil que este se pueda lanzar, y los fondos culturales solo pueden llegar hasta cierto punto. Si tu manejaras los presupuestos, ¿preferirías otorgarlo a clases de pintura o a mantener un servidor con contenido ilegal para que lo consuman comunidades en internet?

 El control del acceso tiene distintas funciones. Sony ha hecho adquisiciones por varios años que lo ponen como uno de los mayores distribuidores de Animé. Su plataforma es fácil de usar y cuenta con distintos niveles de membresías. Si quieres ver su contenido, un mes de renta te cuesta lo mismo que una comida, y puedes cancelarlo. Como consumidor tienes el control, recibes tu contenido, y apoyas a los sectores que dependen de su comercialización, que van desde quienes hacen trabajo de doblaje, dirección artística, manejo de derechos y finanzas, que son quienes merecen recibir ingresos por su trabajo. Y Sony no es el único lugar en donde puedes consumir Animé. Max y Netflix tienen catálogos considerables, por lo que hablar de un monopolio empresarial es igual de desinformado que acusar al neoliberalismo y al capitalismo por todos los males del mundo. Son villanos fáciles ante los que pocos objetarán, pero eso refleja que no saben de lo que están hablando y reaccionan más ante un sentimiento, y muestran no ser consciente de las implicaciones de lo que dicen.

 Seguro estos comentarios no serán del agrado de muchos, los cuales seguirán alegando preservación cultural o alguna otra maroma filosófica para justificar que la descarga de contenido protegido hecha de manera ilegal tiene una razón de ser. Muy bien por ustedes, no es mi intención cambiar sus perspectivas. Si quieres entender las implicaciones desde distintas perspectivas y sectores, que incluyen tanto a creativos, consumidores o productores, te recomiendo que te eches una vuelta a mi canal de Churros y Palomitas, en donde hace tiempo publicamos una de las mejores y más extensas investigaciones sobre el tema, con datos duros y concretos que ayudan a entender los efectos de la distribución y consumo de piratería.

 Si quieres revisar nuestro especial sobre piratería y sus efectos, pasa al canal de Churros y Palomitas, en donde encontrarás más información