RECLUTADORES VS CANDIDATOS


Espera espera…que esto no es una competencia, nos necesitamos los unos a los otros, el título de este artículo es debido a que he visto muchos posts de reclutadores poniendo en evidencia a candidatos que contestan de X manera o peor aún, candidatos que evidencian a compañeros míos porque no obtuvieron el trabajo y su mejor manera de “vengarse” (que infantil, ¿cierto?), es publicar la respuesta o correo del reclutador en redes sociales. ¿Qué está pasando?

Lo cierto, es que mis estimados candidatos,  nosotros los necesitamos para hacer nuestro trabajo, (y no… no es llenar vacantes, sino traer talento a la Empresa), y ustedes nos necesitan a nosotros para poder ingresar a una Empresa,  pero hay un proceso para llevar todo esto a cabo, vamos revisándolo paso a paso, va?:

Comienza por el primer contacto, personalmente, no soy de las que llama y empiezo una entrevista en frío, me presento, digo el nombre de la Empresa para la cual trabajo y menciono la vacante para la cual te estoy llamando, después especifico que la llamada es de contacto, ahí es cuando escucho si estás interesado y disponible. Convenida la entrevista, marco a la hora especificada y hago un pre filtro, mi trabajo no termina ahí, porque tengo que dar el seguimiento oportuno al resto del proceso de reclutamiento y selección (entrevistas técnicas, entrevistas con clientes, etc). El proceso culmina de dos maneras, de una manera favorable o no favorable para ti candidato. Si es favorable, viene el proceso de oferta y escucharás campanitas, y hasta la canción de I Believe I can fly de R. Kelly cuando te marque para decirte que la Empresa te quiere contratar, es lo mejor, tanto para ti como para mí.

Si es desfavorable, te llegará un correo que te mencionará que para este proceso no has sido seleccionado, pero vienen más proyectos y oportunidades a futuro. Esta parte tanto para el candidato como para el reclutador es difícil, ya que no es fácil cerrar una puerta a alguien que está buscando mejorar su vida a través de una oportunidad laboral, los reclutadores somos humanos y en muchas ocasiones me ha pesado mucho tener que mandar ese tipo de correos.  Lo cierto es que lo que pongo en mis correos, me lo tomo muy en serio, porque aparte de que una de mis fortalezas es que tengo muy buena memoria, la otra es que me gusta cumplir lo que digo, por eso comento que si para este proyecto no eres considerado, probablemente para otro puedes serlo, y me ha tocado retomar procesos de hasta 1 año de antigüedad y contratar candidatos que con gusto me han dicho, Karen que padre que te acordaste de mí, y eso mis estimados candidatos es una de las mejores recompensas que tengo, ya que me dice que estoy haciendo las cosas bien.

Alguna vez, alguien me preguntó que si es lo que me gusta de ser Reclutador, mi respuesta fue y es a la fecha: poder ser herramienta para mejorar una vida a través de una oportunidad laboral.

Esto desde la perspectiva del reclutador, y desde la perspectiva del candidato, ¿qué pasa?

Comienza el día, es hora de mandar el CV a “n” número de Empresas, sigue el día, y esperas una llamada, un correo, una respuesta, algo que te diga que esos correos que enviaste fueron leídos o tomados en cuenta. Checas el correo, checas la carpeta de SPAM, checas si tienes llamadas perdidas…nada.

Te preguntas si mañana alguien te llamará, si alguien te mandará ese correo, si alguien te contactará para una entrevista, y este es un ciclo, a veces por días o semanas.

Pero la llamada llega, el correo también, de alguna u otra forma una Empresa quiere saber de ti, y comienza esa preparación para tu entrevista, si es presencial, repasas la ruta de cómo llegar, si es por conference call, te cercioras de que tengas buena conexión y no haya ruido a esa hora.

La entrevista fluye, los nervios también, y si eres como yo, saliendo de la entrevista comienzas a repasarla toda y empiezas con los pensamientos de: “hubiera contestado….”….. “no le dije que ……”, no pasa nada, no tiene valor curricular el Rally del Conocimiento que ganaste en 4to año de la primaria.

Los días transcurren y puede haber dos opciones para ti: una respuesta favorable o una respuesta desfavorable.

¿Ves mi estimado candidato las dos caras de la moneda?

He aquí unos pequeños consejos para que esa respuesta favorable llegue de la Empresa indicada, de esa empresa que te merece, de esa Empresa que merece tu esfuerzo, tu conocimiento, tu entrega, no de esa primera Empresa que te llama, sino de la que vas a invertir lo más preciado que tienes…tu tiempo:

1.      Mantén actualizado tu CV.

2.      No tengas un CV mayor a dos hojas.

3.      No te refieras a ti mismo en 3ra persona.

4.      Si sabes inglés (lo cual te abrirá muchísimas puertas), mantén tu CV actualizado en inglés.

5.      Mantén la información académica a partir de la carrera profesional, si esta es trunca, específica hasta que semestre estudiaste.

6.      Se sincero sobre lo que sabes, no inventes sobre lo que no sabes.

7.      Prepárate para la entrevista, conoce sobre la Empresa, que hacen, un poco de su historia, número de personas que ahí trabajan, etc.

8.      En la entrevista, se tú mismo. Porque al final de cuentas a ti se te va a contratar.


Espero poder haber esclarecido un poco el rol de cada uno de los implicados en el título del artículo. Soy Karen, soy reclutador, amo lo que hago, y espero poder tenerte en proceso algún día. 


Gabriel Cruz

Coordinador de selección de personal

7 años

Excelente artículo. Identificado en mas de un punto. La interacción reclutador/aspirante está actuamente muy viciada. Es necesaria la adopción del punto de vista opuesto como se plantea aquí para llegar al punto de encuentro.

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