REDES SOCIALES, ¡ME REGALAS UN LIKE!

Que duro es mantenerse ajenos a las redes sociales, quién más, quién menos, jóvenes, adultos, profesionales o no, estamos viviendo en un entorno virtual / digital, de esto depende “la cara y muchas de las veces el cuerpo”, que mostramos en el mundo del Internet.

¿Qué tan distintos somos de la vida real y de la virtual? ¿Te lo has preguntado? Yo sí, todos los días. Para mi punto de vista en general en la vida virtual y en la vida real somos muy distintos, así mismo en cada red social en la que somos usuarios les damos un giro y una interacción muy diferente. Para este artículo quiero pedirles me ayuden con sus comentarios de cómo llevan su vida en redes sociales. Tomando en cuenta Linkedin, Facebook, Twitter e Instagram.

Quiero hacer un pequeño análisis general, recalco, este es desde mi punto de vista. Muchos usuarios intentan mostrar en las redes sociales su mejor versión: Fotos exóticas de vacaciones, comida saludable, amores de película, cenas románticas, haciendo deporte, nuevos títulos profesionales o académicos, etc. No obstante, crear una visión idealizada de uno mismo podría ser perjudicial para nuestra salud mental, si no contamos con una buena diferenciación de lo real y de lo virtual.

Para muchos usuarios toda esta interacción puede llegar a ser un verdadero baile de disfraces, en donde uno elige cual prefiere ponerse y así “vender” lo que se intenta trasmitir. También hay casos en los cuales no quieren ponerse un disfraz, sino sacárselo y exponerse un poco más, sin dejar de lado el objetivo de llamar la atención.  

Debes tener en cuenta que las líneas de publicación en tus redes sociales,  deben llevar el mismo estilo, respeto y proyección, que quieres lograr frente a ese público al cual te estás dirigiendo, ya sean estos amigos, familiares, compañeros de trabajo, etc. Varios colegas consideran que las redes sociales deben llevarse de manera independiente, entre ellas y de la vida personal. Pero en mi punto de vista no debes dejar de lado la correlación que deba existir entre estas, somos lo que mostramos, lo que decimos y lo que hacemos, no solo es ser sino parecer.

Muchas de las veces como usuarios en redes sociales, tenemos una gran tensión, “presentarnos de manera auténtica o de una manera idealizada”. ¿Hasta qué punto de exposición crees que debes llegar para conseguir un like? ¿Qué más debes mostrar para conseguir aceptación y ganar más seguidores? ¿Crees que el generar conflictos ideológicos o políticos te llevan a tener una mayor credibilidad como profesional? Y la pregunta que la he realizado con más frecuencia ¿Estás dispuesto a sacrificar tu integridad personal o profesional por el simple hecho de querer tener más notoriedad en redes sociales?

Varias de las veces me he dado cuenta que en redes sociales lo que más “vende” es la pena, la denudes y la pelea. ¿Dejaste de importarles a tú familia y amigos, para que debas exponer tus problemas emocionales en una vida virtual? ¿Quién nos regula los estándares de belleza y de cuerpos perfectos? ¿Qué hace que sientas que tienes una verdad absoluta sobre determinado tema? Cómo se dan cuenta son solo interrogantes, cada respuesta la tienes tú, en tu accionar y en tú criterio.

Muchos me verán como un enemigo de redes sociales, ¡no lo soy!, solo un poco sarcástico en Facebook,  pero siento que son grandes aliadas en varios aspectos de la vida. Se han utilizado para campañas de concientización, trabajos sociales y humanitarios, fuentes de capacitaciones y enriquecimiento profesional, son un potencial nicho para realizar encuestas empresariales, una herramienta de primera mano para los nuevos emprendedores, y así, sigo sumando sus beneficios, ¡hay más cosas buenas, cuando empiezas a ver lo bueno! Solo que vengo de una vieja escuela donde nada virtual puede asemejarse a lo real.

Siempre he tenido conflictos en mi poca importancia a redes sociales, creo que a la única que le doy mi “real atención” es a Linkedin. Mi autenticidad no se ve limitada por los likes, los seguidores o interacciones. Creo firmemente que las redes sociales llegaron para quedarse, pero no para interferir de manera negativa en nuestros días.

La mejor red social es la vida,  te invito a que abras los ojos y por un momento apagues tu Smartphone y mira lo que tienes a tu alrededor, lo que puedes abrazar, lo que puedes sentir, es algo que un like no te lo dará.         

Patricio A. Romero Espinosa

Especialista Administrativo y Talento Humano