Se lo que siente tu equipo

La semana pasada comenzaba una conversación con una de las IAs que hay en el mercado. Le pedía que fuera más allá de una mera enumeración de ventajas para la gestión de equipos. Que se comportara de un modo más transgresor.

Esto dio lugar a una serie de contestaciones sobre el futuro de las relaciones IA/Gestión de equipos que iré liberando progresivamente. La primera sería esta:

Construir culturas organizativas basadas en datos emocionales

"La IA puede ir más allá de los datos operativos y ayudar a medir el «pulso emocional» de un equipo. Con análisis de sentimientos en comunicaciones internas o retroalimentaciones anónimas, podríamos identificar niveles de estrés, desmotivación o entusiasmo en tiempo real. Esto permitiría tomar medidas proactivas para mejorar el clima laboral y fomentar una cultura más empática y personalizada."

Vamos, que según ella misma, la inteligencia artificial está avanzando más allá de los números y los meros datos: será capaz de adentrarse en el mundo de las emociones. Sí, lo has leído bien, se ha tirado el pisto y me ha dicho -literalmente- esto. Tiene la sensación de que comienza a estar preparada (o ¿está?) para analizar el «pulso emocional» de un equipo gracias a herramientas de análisis de sentimientos.

Piensa en esto: correos internos, chats de trabajo, retroalimentaciones anónimas... todo traducido en niveles de estrés, desmotivación o incluso entusiasmo. Y todo, en tiempo real.

Como dirían mis hijos, «me estalla la cabeza». ¿Es posible que algo así sea una realidad en un futuro cercano? Yo diría que sí. De hecho, he hecho la prueba: le pasé un par de correos electrónicos a ChatGPT, y lo que me dijo... ¡lo clavó! según mi propia percepción del correo y la situación.

No se si todavía hemos llegado a este punto, pero tiene pinta de que acabará llegando. Ahora bien, ¿estamos listos para algo así?

Porque medir emociones está muy bien, pero la gestión emocional de tu equipo no puede delegarse. Es tu responsabilidad como líder. La IA puede ser una herramienta extraordinaria, pero no puede (ni debe) reemplazar tu empatía, tu intuición o tu capacidad de crear conexiones humanas reales.

Este es solo el principio de una serie de reflexiones sobre cómo la IA puede transformar nuestros equipos. Pero antes de seguir escribiendo, quiero preguntarte:

¿Crees que herramientas como estas podrían cambiar la forma en que gestionamos equipos? ¿Cómo lo usarías tú?

Déjame tu opinión en los comentarios, y no olvides que en los próximos días compartiré más ideas sobre este tema. ¡Nos leemos! 😊

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