Sos el promedio

Una amiga me citó en un bar. Me dijo que necesitaba hablar conmigo cara a cara. Llegamos al bar y antes de saludarme pregunté "¿Qué pasó de tu promedio?". Siendo sincero, no sabía de qué me hablaba. En ese momento me pasó un cuento que los quiero contar.

Al promedio al que se refería mi amiga es al de Jim Rohn, un personaje que dijo que sos el promedio de las 5 personas que te rodean. La miré, no por no estar de acuerdo con ella en que mi promedio dentro de su teoría esté mejor a lo que ella ve, porque la verdad no es que me cierre del todo ese tema. Pero si me hizo reflexionar sobre las personas de las que me rodeo.

Sea o no cierto, la verdad es que hay personas que te rodean y que no aportan, ni vos aportás a ellas. Después del paseo por el bar y de reencontrarme con una amiga que no veía desde hace tiempo encaré mi idea a casa pensando en los grupos o personas de los que me rodeo y si hay algo que siempre fui, fue un hijo de puta para decir las cosas.

Hice filtros. No voy a comentar los grupos muy personales que dejé, pero si los espacios de los que me filtré, lo que potencié, los que dejé en reposo y a los que no les recomiendo entrar porque le toxicidad es tremenda.

Vale destacar que esto es un opinión personal, experiencia personal y de pura aplicación personal, puede que no funcione para otro o afecte lo que diga a terceros, pero que le vamos a hacer, es algo personal y de mi experiencia, si etiqueto algo como bueno es con base en mi vivencia, si etiqueto algo como una mierda es mi vivencia. Si tenemos claro eso, podemos continuar, si no, igual voy a continuar.

Hace muy poco escribí para Ñañe‘e Digital de como seleccionar comunidades. En ese artículo me centré en temas digitales, hoy amplío el panorama al momento “en vivo“ y no digital solamente. Partir el filtro donde el tema de la comunidad no iba relacionado a mis intereses era la primera barrera que puse.

Con esta barrera logré salir de decenas de grupos de Whatsapp y Telegram que no me sumaban, ya no fui a reuniones de grupos donde no aportaba o no me gustaba estar porque me parecía una perdida de tiempo, donde los temas que se tocan no eran de mi interés o no me ayuda a crecer a o b proyecto con eso.

Empecé a filtrar mis conversaciones en redes. Ya no me metía a grupos en Facebook que no me interesaba, ya no comentaba en post que me parecían una perdida de tiempo o simplemente no contestaba mensajes. En Twitter dejé que hablen de lo que decía o de mis posturas sin drama, sin entrar a confrontar, porque adivinen, sí, en Twitter nunca se debate, uno se plaguea, se indigna pero al final de cuentas al salir a la calle sigue todo igual.

Pero la parte linda es que encontré de vuelta personas o grupos que te me hacen bien y de las cuales creo que puedo aprender mucho. Sin entrar a volver a profundizar en comunidades como Platzi, Reddit, Quora, Hipertextual, quiero mostrarles otras comunidades que transcienden lo digital.

Creo que la primera comunidad que tenemos por intereses en común es la facultad. En ella se hacen amigos, contactos o conocidos más que ir a aprender, es una opinión que viene desde un comunicador, no creo que sirva mucho a un médico, ya que si vas solo a hacer amigo y no a aprende medicina, no creo que vayas a ser buen médico, si un buen amigo. Ese es otro tema.

Hay grupos como los de la universidad que no deben dejarse de contactar. Ya sea por diversión o aprecio, por lo general hay temas interesantes por tratar. Selecciona bien esos amigos, en mi caso hice un buen grupo, una buena junta de la cual estoy bastante contento.

Otro gran grupo es el laboral. Si por algo me caracterizo es de no salir mal de una empresa o de un proyecto. Hacerme cercano a las personas con las que trabajo es algo que como jefe es importante, pero como persona es clave. Si tienes gente a tu cargo, es clave tu buen relacionamiento y saber que las estructuras jerárquicas se pueden y deben romper.

La comunidad que se está gestando en HQ, el grupo del que forma parte Minimal, mi agencia de marketing es un ejemplo claro de como crecer no solo en lo económico, sino también en el sentido de pertenencia a un grupo de personas ligadas de alguna manera.

La familia es un grupo delicado. Un grupo forzado. Pero hay momentos en los que puede ser negativo juntarte con ciertos familiares. Selecciona los que sean importantes en tu vida, ignora a quienes no, sin importar lo cercano que sean, si no te hace bien, chau. Duro, si. Difícil, si. Pero liberador.

Después están las comunidades que uno busca. En mi caso muchas están ligadas a lo digital, pero que se potencian al estar en modo presencial. Dos de estas comunidades a las cuales fui y quedé porque me gusta son la de Teletón Digital y PTF. Aunque de la primera dije desvincularme, no creo que lo haga por un tweet, otra historia. Lo cierto es que estar ahí me hace bien, aprendo, aprendo y aprendo. Así de simple.

La comunidad de ÑD es una de las pocas que encara lo digital y los encuentros “en vivo“ de una forma genial. Donde los temas son siempre el inicio de mini proyectos internos como el #BlogDeÑD, #BirraEnMano, #PodcastDeÑD, #BotDeÑD o #ÑDnews. Charlas que aparte de tener risas, debates sanos y demás, sacan proyectos que pueden o no perdurar, pero que motivan a actuar.

Tener comunidades en redes también pueden ser algo genial. Yo amo mis seguidores en Twitter, sobre todo en esta red. También adoro la de Instagram y Facebook. Admiro la de Pinterest, quiero a los de SoundCloud, Spreaker o iTunes y no entiendo a la que tengo en Spotify, no soy un experto en música, pero hay gente a la que le gusta mis playlist.

Dentro de todas estas comunidades que te hacen bien, encuentra la forma de hacer cosas con personas específicas a las que quieres decir cosas o solo pasar el tiempo, sea esto ir a comprar café porque se duerme, ir al Agroshopping, comer comida española, regalar alguna entrada al cine o ir a tomar café porque te dicen que se duermen en medio de su trabajo si no lo hacen.

Resumiendo: selecciona tus batallas, decide cómo enfrentarlas y no te alejes de la gente te da fuerza para lidiar con dichas batallas.

Se puede disfrutar del DailyMil 43 en tres plataformas por el momento: Spreaker, SoundCloud y iTunes .

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