Toda acción tiene un impacto
No importa si hablamos del medio ambiente, de una relación con nuestra pareja o seres cercanos, de nuestro trabajo o de nuestra salud física o mental.
Toda acción tiene un impacto.
Desde que concienticé respecto a esto, cambió mucho mi manera de tomar decisiones. El tema es que en la mayoría de los casos, una simple acción no parece afectar. Hacer flexiones por un día o tomarte un café en un vaso descartable no va a generar algo que te haga notar la diferencia en ese momento. Pero si hace una diferencia por más mínima que sea y es la repetición de las mismas acciones, que van a generar un impacto más grande tanto en nosotros, como en otros y en el planeta.
Para mí, lo difícil está en incorporar esos hábitos saludables y sustentables, y mantenerlos. Porque nos rendimos rápido y nos juzgamos sin perdón. Pero en mi experiencia me di cuenta que a pesar de tropezar varias veces, algo hizo click y la siguiente vez se hizo más fácil.
Si querés empezar a cambiar algo de tu estilo de vida quizás te sirva incorporar esta frase y ser consciente de tus acciones, porque toda acción tiene un impacto.