Validar tu idea debería ser gratis
Cuando me reuno con clientes que están buscando crear nuevas ideas de negocios, casi siempre encuentro un problema recurrente:
Necesito x,y o z recursos para validar mi negocio.
Esto no está bien.
Esta creencia casi siempre nos lleva a cometer errores costosos en tiempo y en dinero.
No quiero crear un malentendido. Es siempre de vital importancia entregar el valor que le prometimos a nuestros clientes.
Una de las máximas de cualquier negocio exitoso es que debemos cumplir lo que prometemos.
Lo que no está bien entendido es que las ideas no son negocios exitosos.
Creer que necesitamos gastar millones, o invertir en infraestructura, maquinaria, procesos y gente para ver si nuestra idea funciona es simplemente ridículo.
Tenemos que tomar las ideas por lo que son
Las ideas son ideas. Y lo mejor de todo: Las ideas son gratis. Por lo tanto validarlas debería ser gratis también.
Ahora bien, este es un concepto aterrador. ¿Cómo voy a vender algo que no existe? ¿Que va a pasar si me compran?
No te preocupes. Si te compran, ya tienes una razón para construirlo. Y esa es la forma más segura de avanzar.
Tradicionalmente, el dicho del emprendedor rezaba: Constrúyelo y vendrán. Mi apuesta hacia el futuro es:
Véndelo y ya que vengan, constrúyelo.