Lo que no se mide, no se puede mejorar

Lo que no se mide, no se puede mejorar

¡Saludos, detective de los datos estratégicos!

En esta edición, trataremos las métricas de desempeño o Indicadores Clave de Rendimiento, comúnmente conocidos como KPIs por sus siglas en inglés (Key Performance Indicators), herramientas fundamentales en el ámbito empresarial y organizacional que permiten medir y evaluar el desempeño de una variedad de áreas y procesos, proporcionando una visión clara y objetiva de los resultados obtenidos.

La famosa frase "Lo que no se mide, no se puede mejorar" resume la importancia de los KPIs en la búsqueda constante de la excelencia y el crecimiento. Aunque a menudo es atribuida al reconocido gurú de la gestión, Peter Drucker, en realidad corresponde a Lord Kelvin, también conocido como William Thomson Kelvin, un reconocido físico y matemático británico del siglo XIX (1824-1907) quien formuló la siguiente afirmación: "Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre".

Los KPIs se seleccionan cuidadosamente para cada organización, proyecto o proceso en particular, y se definen de acuerdo con los objetivos estratégicos y las áreas clave que se desean evaluar. Estos indicadores pueden abarcar diferentes aspectos, como la productividad, la eficiencia, la calidad, la satisfacción del cliente, entre otros.

La verdadera magia de los KPIs radica en su capacidad para proporcionar información objetiva y basada en datos concretos. Al tener una medida cuantificable del rendimiento, se pueden tomar decisiones informadas, identificar áreas de mejora y establecer estrategias efectivas para optimizar los resultados.

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Esta semana también quiero hablaros de la etiqueta linerless un tipo de etiqueta que no tiene papel parafinado o liner, se componen de adhesivo y un frontal térmico tratado, de modo, que al ir bobinado impide que se ancle el adhesivo sobre sí mismo. Esto ofrece varias ventajas, como mayor metraje por rollo, reducción importante de residuos, para acercarnos a la sostenibilidad, y una aplicación más eficiente y cómoda. Algunos ejemplos donde podría utilizar la etiqueta linerless:

  • En el etiquetado de productos alimenticios, las etiquetas linerless son ideales para el etiquetado de las órdenes “takeaway y delivery” como se conoce popularmente en restauración la comida para llevar. Pueden contener información nutricional, instrucciones de almacenamiento, códigos de barras y otros datos relevantes, como los datos del ordenante.
  • Etiquetado logístico para imprimir etiquetas de código de barras y o ubicación y de seguimiento, con una finalidad temporal, o bien de envío, para poner las direcciones u otros datos que requiere este proceso, al no llevar liner, se pueden obtener más cantidad de impresiones con un solo rollo, lo que aumenta la eficiencia y reduce los cambios de consumible, detalle importante cuando las impresoras son portátiles, puesto que estas tienen menos espacio para sus rollos de etiquetas.
  • Etiquetado de precios y promociones comunes en tiendas minoristas y supermercados para el etiquetado de precios y promociones en productos. La falta de liner facilita la aplicación rápida en los estantes de la tienda.
  • En la industria de la salud, las etiquetas linerless se utilizan en hospitales para el etiquetado de medicamentos personalizados del paciente, con datos sobre la dosificación, instrucciones de uso y fechas de caducidad. Tambien para la identificación de muestras de laboratorio, o las entregas de los fármacos a las farmacias.

Estas son solo algunas de las aplicaciones comunes donde se utiliza la etiqueta linerless. Su versatilidad y ventajas en términos de eficiencia y reducción de residuos hacen que sean una opción popular en varios sectores industriales. Los fabricantes de impresoras tienen soluciones para imprimir linerles, tanto equipos de sobre mesa como impresoras portátiles.

¿Qué indicadores o KPIs podríamos analizar para, por ejemplo, elegir etiquetas linerless en lugar de las liner convencionales? Aquí va una lista con algunas propuestas:

  • Eficiencia de etiquetado: Medir la cantidad de etiquetas linerless aplicadas correctamente en un período de tiempo determinado, para poder compararlo con valores de procesos de impresión sobre etiquetas liner.
  • Sostenibilidad: Evaluar el impacto ambiental de las etiquetas linerless, incluyendo la reducción de residuos y el uso de materiales más sostenibles. Se pueden medir indicadores como la cantidad de papel o material de respaldo eliminado y el ahorro de recursos naturales.
  • Costos de producción y almacenamiento: Monitorizar los costos asociados a la producción y almacenamiento de las etiquetas linerless, incluyendo el costo de los rollos de etiquetas, los equipos de etiquetado, el espacio de almacenamiento requerido y los tiempos de cambio de rollo.
  • Calidad de impresión de las etiquetas: Evaluar la calidad de impresión de las etiquetas linerless, incluyendo la claridad de la información impresa, la legibilidad de los códigos de barras u otros elementos, y la durabilidad de la impresión a lo largo del tiempo.
  • Productividad del equipo de etiquetado: Evaluar el rendimiento del equipo encargado del etiquetado en términos de la cantidad de etiquetas linerless aplicadas por hora o por turno.

Aprovecho para recordaros el enlace que apunta a todos los boletines que he publicado.

Hasta la próxima semana,

Esther Santiago

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