5 cosas que no debes decir en una entrevista

1. Discúlpeme el retraso

Empezar con una excusa es empezar las cosas mal, es innecesariamente posicionarse en situación débil. Por supuesto que si llegas tarde debes disculparte pero la realidad es que salvo una catástrofe no existe una razón valida para llegar tarde a una entrevista. El trafico en las grandes metrópolis es difícil de predecir y es muy arriesgado pretender llegar justo a tiempo, si este es tu plan existe un riesgo importante de llegar tarde. Es mucho mejor planear llegar unos 10 o 15 minutos antes y buscarse un café donde sosegadamente puedas reflexionar sobre lo que quieres plantear en la entrevista. Si el área donde te han citado te es desconocida, es recomendable que con antelación hayas dado una vuelta por la zona para entender como llegar y donde estacionarse.

 2. Mi mayor debilidad es que trabajo demasiado.

Tratar de convertir una fortaleza en debilidad es un argumento muy trillado. Es mucho mas recomendable identificar algo que fue una debilidad en el pasado y mostrar como logré superarlo. Algunos ejemplos de debilidades pasadas superadas podrían ser: dominio del idioma ingles, habilidad para supervisar y manejar empleados, uso de la tecnología en el trabajo, manejo del estrés y mantener hábitos sanos a pesar de las presiones del trabajo.

 3. Cuanto paga esta posición?

Salvo que sospeches que la empresa y /o la posición no ameritan la compensación mínima que pretendes y no quieres perder el tiempo, sugiero que no seas tu el que abordes primero el tema del dinero. Es mucho mejor en términos de negociación el conocer la posición de la empresa y negociar a partir de ese punto. Si insisten en conocer tus expectativas sugiero que lo manejes dándoles información sobre tu remuneración actual, aclarando que tus expectativas se fijaran en base a información que aún no conoces tales como las responsabilidades del puesto y oportunidades de desarrollo profesional.

 4. No sé

Esta no debería ser la respuesta a ninguna pregunta. Si en realidad no sabes, contesta algo como: "Esa es una gran pregunta, déjeme pensar un momento sobre la respuesta" y haz tu mejor intento por contestar. Algunas de las preguntas que te hacen están pensadas para sacarte de tu zona de confort y juzgar tu capacidad de reacción. Un buen intento es mejor que nada.

 5. No, no tengo preguntas

No tener preguntas es demostrar falta de preparación y falta de interés. Es también desperdiciar una oportunidad para obtener información que podría ayudarte a entender la problemática de la empresa y la manera en que tus conocimientos y experiencia podrían resolver esos problemas. Finalmente de eso se trata una entrevista, de determinar si yo soy la persona adecuada para manejar ciertos problemas y funciones que aquejan a la empresa.

  Recibe un cordial saludo y deseos de mucho éxito.

 L. Ignacio Garrote

Director General

Phoenix Search y Coaching Company 

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