Articulo en Revista PyM - Una posición frente a los premios.

@XAVIER SERRANO
Profesor/Conferencista Innovación & Creatividad (CESA)
CEO Geometry Global

And the Grammy goes to…

Algunas personas consideran que los premios son claves para “auto medirse” en la escena mundial. Otros piensan que no son necesarios y además se refieren a ellos de forma despectiva. Otros los ven como un tema de egos y relaciones públicas. Inclusive algunos asumen que los que ganan en publicidad son por hacer “truchos” o algún otro tipo de trampa. Y por demás, es probable que algunos efectivamente hagan “truchos”. Viendo esos múltiples puntos de vista y reconociendo que nos hemos gastado un pocotón de dinero y tiempo en el tema, mínimo quedan aprendizajes para compartir…

Parte 1: la mala leche.

De una parte, es común que los que se refieren mal a los premios son aquellos que concidencialmente no han ganado. No falta el “post” de Facebook mentiroso o sencillamente “mala sangre”. De otra parte, haber sido jurado en Wave, Ojo y algunos otros me han mostrado que no es fácil. No solamente ser jurado, no es fácil juzgar tantos trabajos sobresalientes que hacen el cambio en el mundo de la publicidad y algunos de ellos en todo el mundo. No es fácil ganar, no es fácil figurar. Por eso mismo adquieren validez. 2/3 partes de cada votación son el mínimo requerido para subir a Bronce, Plata y Oro en Cannes. Es decir, quienes dicen que es un tema de rosca, la verdad es que Ud. tendría que ser amigo de 14/20 jurados en una categoría para que pueda pasar esto. Y eso es poco probable.

Parte 2: El jardín del vecino siempre tiene flores más lindas.

Los premios si han generado que algunos clientes quieran creatividad entendiendo que se están arriesgando, pues algo creativo en sí mismo es nuevo y no hay garantía de “éxito” ni parcial ni total. En cambio la zona segura puede que no sea extraordinaria pero al menos hay un resultado esperado más claro. Ellos, al ver los premios de otros clientes, al ver sus casos y admirarlos pues se animan, se arriesgan y valoran su agencia en proceso.

Parte 3: Sacar pecho no es malo.

De otra parte, sube el autoreconocimiento de la agencia. Y con la humildad necesaria, es chévere. Es decir, todos los equipos ven que sus trabajos pueden ser valorados mundial o regionalmente. Eso reduce un poco la rotación de la agencia, pone metas en cada una de las cuentas y periódicamente logra sorprender a clientes con una idea que les guste tanto que consideren “arriesgarse”.
Por demás, siempre he buscado que tengamos claro que la disciplina es absolutamente necesaria para la innovación y la creatividad. Y por eso mismo, los premios son un reconocimiento clave para aquellos que deben esforzarse en tener disciplina. (¡Y esos son hartos en el país de los festivos!)

Parte 4: ¿Y el número?

Si, al final el número siempre es el tema central. ¿Vendió más el cliente? ¿Vale la pena la inversión? ¿Si le va bien, tiene claro el billetal que viene en 5 o 6 festivales mundiales? (¡Y como no viaja!); Si ganamos mucho, ¿será que eso distrae a la gente del “día a día”?; dado el caso de no ganar nada, ¿Cuándo cuesta esa “decepción”? ¿Si un equipo gana nos va a costar más en salarios y beneficios? ¿Será que "mal-acostumbramos" al cliente? ¿Cómo controlar el triunfalismo?...

La verdad es que hay muchos números que tienen muchas respuestas. Y ninguna. Pero en el fondo hay un número que no he podido calcular pero sé en mi corazón que existe:

Y si no lo intentamos, ¿Cuánto nos va a costar?