Building-Integrated Photovoltaics es una solución innovadora para la generación de energía renovable en edificios,que combina funcionalidad y estética
En la actualidad, Europa domina el segmento de la energía fotovoltaica integrada en edificios (BIPV), y representa más de un tercio del mercado mundial, una tendencia que se espera que se consolide aún más en el futuro cercano con la introducción de políticas relacionadas con la BIPV en varias regiones.
Tanto Alemania como Francia han impuesto recientemente la energía solar para los nuevos proyectos de estacionamientos de vehículos, mientras que Italia y Suiza están considerando políticas similares, y muchos otros países europeos están fijando objetivos solares agresivos, lo que abre un nuevo mercado con un enorme potencial.
Los avances tecnológicos están permitiendo simultáneamente la instalación de energía solar en techos de baja capacidad de carga, abriendo nuevos distritos industriales para el desarrollo, mientras que los paneles solares plug-and-play junto con las reformas regulatorias en Europa han llevado a un "boom" de energía solar en los balcones en Alemania.
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¿Qué es BIPV?
Los sistemas fotovoltaicos integrados en edificios (BIPV) son productos o sistemas de generación de energía solar que se integran perfectamente en la envoltura del edificio y forman parte de los componentes del edificio, como fachadas, techos o ventanas. Con un doble propósito, un sistema BIPV es un componente integral de la piel del edificio que convierte simultáneamente la energía solar en electricidad y proporciona funciones de envoltura del edificio, como la protección contra la intemperie; aislación térmica; protección contra el ruido; iluminación natural; y/o seguridad.
Los sistemas BIPV se pueden instalar durante la fase de construcción de un edificio o implementarse durante la modernización de un edificio existente cuando es necesario reemplazar uno de los componentes de la envoltura. El entorno construido permite muchas formas de integrar BIPV. En general, existen tres áreas de aplicación principales para BIPV: estructuras de techos, fachadas a través de nuevos revestimientos, muros cortina y ventanas; y finalmente con sistemas integrados externamente como sistemas de sombreado.
Los beneficios de los sistemas BIPV son múltiples: no solo producen electricidad limpia in situ sin necesidad de una superficie adicional, sino que también pueden influir en el consumo energético de un edificio gracias al aprovechamiento de la luz natural y la reducción de las cargas de refrigeración. Por tanto, los sistemas BIPV pueden contribuir al desarrollo de edificios de consumo energético neto cero. Al convertir techos y fachadas en activos generadores de energía, los sistemas BIPV son el único material de construcción que ofrece un retorno de la inversión.
Además, el uso diverso de los sistemas BIPV abre muchas oportunidades para que los arquitectos y los diseñadores de edificios mejoren el aspecto visual de los edificios. Por último, pero no por ello menos importante, los propietarios de los edificios se benefician de unas facturas de electricidad reducidas y de la imagen positiva de ser reconocidos como "ecológicos" e "innovadores".