Cómo Ganar DINERO en la AGRICULTURA 🚜 (y CUÁNTO se Puede Ganar) 👨🌾

¿Sabías que a día de hoy te podrías ganar la vida en la agricultura pero más del 90% de los agricultores es incapaz de hacerlo? ¿Qué es lo que hace diferente el 10% restante? 

Pues atento al artículo/vídeo porque te voy a explicar los principales problemas que tienen los agricultores para obtener una buena rentabilidad, te desvelaré el modelo de negocio con el que puedes formar parte de ese 10% y cuál es la inversión necesaria para comenzar y su rentabilidad esperada, o lo que es lo mismo, cuánto dinero puedes sacar por tu inversión.

Lo primero, ¿Cuáles son los problemas que les impiden al 90% de los agricultores obtener una buena rentabilidad?

En primer lugar la competencia desleal que se permite desde Europa. Actualmente, un agricultor en España tiene limitados los productos que puede aplicar a su finca con el objetivo de crear un fruto de calidad, pero otros países de fuera de Europa no aplican estas limitaciones. Sin embargo, sí se permite importar desde allí, lo que supone un juego injusto para el agricultor ya que esto presiona los precios de venta hacia abajo.

Esto está directamente relacionado con el segundo problema, ya que cada vez hay más plagas pero se prohíben más y más productos para combatirlas. Por lo que esto termina afectando a la producción final.

Como de forma individual no podemos hacer mucho para solucionar estos problemas a corto plazo, vamos a ver el tercer problema que sí puede tener solución, pero sobretodo nos centraremos en la elección del modelo de negocio ganador que nos permita generar beneficios a pesar de todos estos inconvenientes.

¿Y cuál es el tercer problema del sistema agrario en España? Pues que básicamente predominan las fincas extremadamente pequeñas, y esto es muy difícil de rentabilizar. 

Lo veremos en detalle en otro vídeo, pero a modo de ejemplo, si comparamos una explotación de 10 hectáreas formado por una misma parcela, respecto a otra explotación de 10 hectáreas divididas en 30 parcelas diferentes, como te imaginarás, los costes de revisar las fincas, de aplicar los abonados, trabajos con el tractor, desplazamientos, etc. son mucho más elevados en la explotación de treinta parcelas, y por tanto mucho menos eficiente y rentable.

Esto no tiene una solución sencilla, pero debes tener siempre presente el objetivo de concentrar al máximo posible tus parcelas, y si es posible, hacer ventas, compras o alquilar parcelas enfocadas a esta estrategia de concentración.

Y ahora sí, descubramos el modelo de negocio ganador en la agricultura. 

Honestamente, debo decirte que existirá más de un modelo ganador, y yo no soy ni el más listo del sector, ni el que más experiencia tiene, pero sí me rodeo cada día de los mejores agricultores, y por eso yo no vengo a contarte la teoría de cómo se deberían hacer las cosas. Yo vengo a explicarte un modelo de negocio que te permitirá rentabilizar tu dinero no solo en la teoría, sino también en la práctica, ya que es el modelo de negocio de la Empresa Alcitres y que llevan aplicando sus fundadores desde hace más de treinta años.

El modelo consiste en comprar o alquilar una parcela, decidir qué cultivo plantar (aquí dependerá de la ubicación de la parcela y las condiciones climáticas), pero en nuestro caso alternamos entre cítricos (como pueden ser naranjas, mandarinas o pomelos), o bien almendros o caquis. 

Es fundamental que si te planteas la agricultura como inversión, el tamaño mínimo para estos cultivos sea de una hectárea. Podría decirte que puedes comenzar con unos pocos cientos de euros y una finca muy pequeñita para romper mano, pero la verdad es que te estaría mintiendo.  Con fincas inferiores a diez mil metros cuadrados será muy difícil obtener beneficio ya que como te explicaba en el vídeo anterior de “Cómo maximizar la rentabilidad de tus cultivos”, los costes fijos y de desplazamientos se comen tus beneficios en las pequeñas parcelas. 

En el único caso en el que podría tener sentido una inversión en una parcela más pequeña sería para cosechar hortalizas o verduras, pero es un modelo de negocio más intensivo en tiempo y bastante demandante, así que por lo general no es algo que me convenza demasiado. Como mucho, lo emplearía como vía para incrementar mis ingresos a corto plazo y así invertirlo en fincas más grandes a largo plazo. Por ejemplo, sí te podría interesar si quieres dedicarte a hacer trabajos agrícolas, ya que tendrás más horas como “asalariado” del negocio, al mismo tiempo que no requiere una inversión tan elevada en superficie cultivada como sí lo requieren los frutales.

Otro aspecto muy importante es que el cultivo sea de regadío, es decir, que tenga acceso a agua para poder regar por goteo. Quizá haya agricultores que consigan ser rentables en fincas de secano, pero como yo no lo sé hacer, tampoco te lo voy a recomendar.

Así que ya tenemos claro que necesitamos alquilar o comprar una finca de al menos una hectárea, con acceso a agua para poder regar, elegir bien el cultivo y la variedad a plantar, y hacer crecer los árboles hasta poder comenzar a producir a partir de los próximos tres o cuatro años para vender la cosecha a un comercio que se encargará de recolectar tus naranjas, caquis o almendras al precio que acordéis.

Y tú dirás, bueno Salva, pues menuda mierda de negocio, no? Si no hago más que meter dinero y me dices que comenzaré a ganar pasta dentro de como mínimo tres o cuatro años, ¿De verdad me estás diciendo que esto es rentable?

Rotundamente, sí. 

Pero te aviso, si lo que estás buscando es pegar el pelotazo y forrarte de la noche a la mañana sin mover ni un dedo, te has equivocado de canal, aquí hablamos de cómo emprender un negocio en la agricultura, y si quieres saber cuál es la inversión necesaria para comenzar y cuál es la rentabilidad que podemos esperar, atento:

¿Cuáles son los costes iniciales para iniciar una plantación de una hectárea desde cero?

Si vamos a comprar una finca, dependerá de las condiciones en las que se encuentre, su clima, si está en producción o no lo está, etc. Pero para hacernos una idea, el coste de adquirir una finca de una hectárea que no esté en producción pero tenga acceso a regadío, puede estar en torno a los 24.000€ por hectárea, es decir, unos 2.000€ por hanegada.

Si preferimos alquilarla, una parcela en condiciones similares podría suponer unos costes aproximados de 700€ anuales. Pero como te digo, esto depende de varios factores y podremos encontrar desde 500€ a 1200€.

Como se trata de una inversión a largo plazo, yo nunca alquilaría a menos de 20 años, ya que si vamos a hacer todo el trabajo de convertir una finca abandonada en una de plena producción, a partir del año 10 hasta el 20 o incluso 25 o 30 son clave para rentabilizarla.

Por tanto, 700€ anuales por veinte años, son 14.000€ de inversión. Es un coste inferior al de la compra de una finca aunque en este caso una vez termine el contrato, si no se renueva, obviamente perdemos el derecho a explotar esa finca.

Imaginemos que vamos a plantar un campo de naranjos, así que veamos cuáles serían los gastos totales de esos 20 años de alquiler:

Alquiler de la parcela: 14.000€ (el alquiler de los 5 primeros años serían 3500€)

Instalación de riego y plantación: 7000€ (inicial)

Gastos de trabajos y productos: aquí tendríamos que invertir 8000€ los primeros 5 años. Unos 9000€ los siguientes 3 años. Y a partir del año 9 ya serían unos gastos de 6.000€ anuales. Es decir, 66.000€ de gastos para los últimos 11 años. En total, durante los 20 años los costes de trabajos y productos serían unos 83.000€.

Y en concreto, la inversión a realizar durante los primeros 5 años serían 18.500€ entre alquiler, plantación, instalación de riego, trabajos y productos.

Y ahora viene lo bueno, ya sabemos los gastos, pero…

¿Cuánto dinero vamos a ganar con un campo de naranjos de una hectárea?

Como te decía, aquí tienes que asumir que durante los 3 primeros años no vas a ingresar nada, porque el árbol todavía no produce fruta. El cuarto año ya puede comenzar a producir muy poco, y de forma progresiva irá produciendo más y más hasta alcanzar la madurez plena en torno al año 9.

Para que te hagas una idea, a partir del año 5 o 6, los ingresos por la venta de la fruta ya sobrepasarán los costes anuales que hayamos tenido. Pero mientras un árbol puede estar produciendo entre 30 y 50 kilos en ese año 5 o 6, todavía crecerá hasta producir unos 100 o 120 kilos por árbol en su madurez.

Por tanto, sabemos que los tres primeros años no se ingresa nada. Entre los 3 y 8 primeros años podemos esperar ingresar unos 12.000€ en total, donde el año 7 y 8 ingresaríamos unos 4000€ y el resto de años menos debido al tamaño del árbol.

Y a partir del año 9 ya podremos ganar unos 11.000€ al año, lo que supone un total de 121.000€ para los últimos 11 años, a los que sumando los ingresos de los años 3 al 8, nos da unos ingresos totales de 133.000€.

Todo esto, asumiendo que uno mismo no va a hacer el trabajo del campo,  es decir, ni se encarga de hacer la poda, ni los tratamientos con el tractor, ni triturar la leña, ni nada. Todo este trabajo se asume que se externaliza y se paga a otra persona o empresa para realizarlo. En caso de querer hacerlo uno mismo, a nivel de contabilidad tendríamos los mismos gastos, lo que sí sucedería es que el coste que se asume por pagar a una empresa por hacer el trabajo, lo ingresaríamos nosotros mismos.

Pero bueno, al final, lo que realmente interesa,

¿Cuánto dinero se gana y cuál es la rentabilidad que obtenemos por la inversión?

Hemos visto que como costes, tenemos un total de 83.000€ durante 20 años, de los cuáles 18.500€ se invierten durante los 5 primeros años.

Y como ingresos, tenemos un total de 133.000€, lo que supone un beneficio de 50.000€ al restar los costes. Esto nos da una rentabilidad total por nuestra inversión del 60%. Además, lo bueno es que si conseguimos prorrogar el alquiler o hacer los cálculos para 25 o 30 años en lugar de 20, cada uno de esos años nos va generar un beneficio neto de 5.000€, ya que como habrá unos ingresos de unos 11.000€ y unos costes de 6.000€, nos supondrá una rentabilidad aproximada para ese año de un 80% dado que ya tenemos la finca en producción.

Todo esto es una aproximación haciendo la media tanto de costes como sobre todo de ingresos, ya que los precios de la venta de naranjas pueden oscilar entre los 15 céntimos el kilo a los 60 céntimos. 

Pero al final, el objetivo no es otro que poder ver de forma clara cuánto se necesita para invertir en la agricultura y qué rentabilidades se pueden obtener. Además, podemos ver como la compra de una parcela beneficia a la rentabilidad a muy largo plazo, pero el alquiler te permite iniciar un negocio con menores costes.

Y como comentaba en el anterior vídeo de “Cómo maximizar la rentabilidad de tus cultivos”, también entran en juego otras variables como la gestión misma de la parcela y la calidad de la fruta obtenida, o también el tamaño de la finca. Ya que si adquirimos una explotación de tamaño superior, la rentabilidad también será superior al poder ser más eficientes en los costes.

Pero en resumen, si hacemos las cosas bien, la inversión en agricultura no solo servirá para dar de comer a un mundo que cada vez necesita más alimentos (ya que se prevé que la demanda crezca entre un 40 y un 80 por ciento durante los próximos 25 años), sino que también conseguiremos ganar dinero en la agricultura y mantener un negocio rentable a lo largo de los años.