Comunicación Corporativa: la evolución del sector periodístico
La comunicación corporativa: una opción real
La APM (Asociación de la Prensa de Madrid) acude puntualmente cada año a su cita con su informe estrella, el Informe Anual de la Profesión Periodística, que analiza la situación del sector. El último documento presentado, que alude a 2016, arroja un dato llamativo: un 40% de los profesionales del periodismo desarrolla su trabajo en comunicación corporativa o institucional. El dato es importante, porque pone de manifiesto una tendencia al alza dentro del sector, la migración desde los medios informativos (prensa, televisión, radio) hacia las agencias de comunicación y los departamentos de comunicación internos de empresas e instituciones.
La realidad que refleja esta cifra, es que la profesión periodística está migrando hacia la comunicación empresarial. La ineludible necesidad de instituciones públicas y del sector privado de establecer relaciones con sus audiencias, necesita un apoyo estratégico, no sólo como una táctica de promoción y branding, sino como un área de conocimiento para la gestión integral de la comunicación empresarial en todas sus facetas: interna, de crisis, etc. Es decir, necesitan gestionar de manera óptima la imagen que proyectan fuera y dentro de la empresa. De este modo, las empresas e instituciones, y las agencias de comunicación y relaciones públicas ven en el talento, y la experiencia de los profesionales, formados en los medios, la mejor cantera de conocimiento para comunicar, de manera veraz y profesional, los mensajes clave y el espíritu de la marca en torno a sus productos y servicios. La labor de los profesionales de las relaciones públicas que vienen del sector del periodismo confiere a las marcas un valor añadido insustituible, que dota a las distintas comunicaciones de un tono de y cercanía, muy difícilmente alcanzable con la publicidad convencional.
Pensar que esta migración laboral supone una transformación negativa que perjudica la labor periodística, supone no ver toda la realidad del asunto. No es ningún secreto que la demanda de estos perfiles por parte de las agencias, empresas privadas, e instituciones públicas, está en constante aumento, por lo que no se puede ignorar que la comunicación corporativa o empresarial, y la institucional, representan actualmente un contexto de nuevas oportunidades laborales y una opción de adaptación y crecimiento personal y laboral para los periodistas. La comunicación corporativa se ha ido consolidando en los últimos años como una salida profesional ya habitual, muy a tener en cuenta para cualquier profesional del periodismo que quiera ejercer en una época de profundo cambio en el sector.
El perfil del periodista evoluciona
Una consecuencia lógica dentro de este proceso de transformación natural es la evolución de las labores de un profesional de la comunicación, pasando del tradicional gabinete de prensa que se limitaba a la relación con medios y publicación de notas de prensa, a la inclusión de otras tareas vinculadas con el mundo digital, que incluyen web, redes sociales, blogs y posicionamiento en buscadores. Ahora el trabajo del periodista debe englobarse dentro de un plan de marketing y comunicación más amplio y ambicioso, donde lo digital adquiere una importancia fundamental. De ahí que los perfiles que se demanden hoy en día sean cada vez más polivalentes y multitarea, siendo especialmente deseados aquellos que cuenten con una sólida base digital, lo que naturalmente exige una mayor especialización y habilidades multitasking.
De hecho, el trabajo de Relaciones Públicas, es actualmente clave, para el posicionamiento SEO en buscadores y un pilar básico dentro de las estrategias de marketing online de las empresas, ya que otorga credibilidad y autoridad a los mensajes corporativos de las marcas, con contenidos informativos de utilidad y de actualidad, muy bien valorados por los distintos medios y audiencias.
Dentro de este nuevo contexto que amplía el tradicional concepto de gabinete de prensa, el profesional de la comunicación puede cubrir otros ámbitos que van desde la comunicación de crisis, muy útil en escenarios comprometidos para las empresas y/o instituciones, hasta por ejemplo labores de protocolo o comunicación interna, cuya relevancia es muy apreciada últimamente sobre todo por las grandes compañías, que ven en esa rama una buena inversión en cuanto a mejorar las relaciones con sus trabajadores, incrementar su sentimiento de pertenencia, convertirlos en embajadores de la marca, y por ende, mejorar la productividad, y la presencia de la marca entre sus audiencias.
En un contexto de cambio, no sólo del sector del periodismo, sino de la economía en general, la transformación digital obliga a los profesionales de la comunicación a adaptarse a las nuevas necesidades, pero además, ofrece nuevas opciones y alternativas a la profesión dentro de un ámbito cada vez más demandado y que proyecta un futuro muy prometedor.