Confía en ti, aunque sea mentira…

Aunque a veces la voz interna te susurre que no puedes, que no eres suficiente, que el camino es demasiado empinado.

Confía en ti, incluso cuando las dudas se ciernen sobre tu espíritu como nubes de tormenta, amenazando con desbordar el frágil equilibrio que has logrado mantener.

Confía en ti, aunque te parezca una mentira, porque hay días en los que esa mentira se convierte en verdad. Hay momentos en los que la fe en ti es todo lo que tienes, y esa fe, aunque sea pequeña, aunque sea frágil, tiene el poder de mover montañas.

El mundo a veces parece un lugar oscuro, lleno de desafíos que parecen insuperables.

Pero en lo más profundo de ti, hay una chispa, un fuego que arde incluso en las noches más frías. Es ese fuego el que debes alimentar, incluso cuando las llamas titubeen, incluso cuando parezca que están a punto de extinguirse.

Confía en ti, aunque parezca un acto de locura. Porque esa confianza, aunque nacida de la incertidumbre, es la que te llevará más allá de tus límites, es la que te empujará a descubrir lo que eres capaz de lograr. No necesitas tener todas las respuestas, no necesitas sentirte invencible. Solamente creer, aunque sea por un instante, que puedes dar un paso más, un esfuerzo más, un aliento más.

Es en esos momentos de duda cuando la confianza en ti se convierte en tu mayor aliada.

Es el hilo que te mantiene conectada a tus sueños, a tus deseos más profundos. Y aunque ese hilo pueda parecer delgado, casi invisible, es lo suficientemente fuerte para soportar el peso de todas tus esperanzas.

Hoy ya lo sabes, confía en ti, aunque sea una mentira que te susurras a ti. Porque esa mentira, repetida con suficiente convicción, se convierte en la verdad que necesitas para seguir adelante.

Cuando miras hacia atrás y ves todo lo que has superado, te darás cuenta de que esa confianza no era una mentira.

Confía en ti, porque dentro hay una fuerza que aún no has descubierto por completo. Y aunque no siempre puedas verla, está ahí, esperando a que la reclames, a que la hagas tuya.

Esa es la verdad que siempre ha estado escondida en lo más profundo de tu ser.

Confía en ti, aunque sea mentira, porque esa mentira es la semilla de la verdad más poderosa que jamás conocerás. Miguel Alemany