Consciencia Artificial

Viernes, 21 de abril 2023, publicado en Diario La Rioja (Opinión, Tribuna)

Los últimos meses han sido muy intensos en cuanto a noticias de máquinas que parecen mostrar consciencia de se refiere. El pasado verano saltó a los medios la información de que un ingeniero de Google creyó haber encontrado autoconsciencia propia en un modelo de lenguaje neuronal conversacional (LaMDA) de la empresa para la que entonces trabajaba. La computadora le había sorprendido con lo que él consideraba una conversación consciente sobre religión, emociones y temores. Esto era algo para lo que los desarrolladores no la habían preparado.

Más recientemente, ChatGPT, el robot conversacional de la empresa OpenAI, se ha convertido en la plataforma dentro de Internet que más rápido crecimiento ha experimentado en la historia. En dos meses suma cien millones de usuarios. Este chatbot parece ser capaz de pasar el popular Test de Turing mostrando un comportamiento que en seres humanos implica inteligencia fundamentada en capacidad de pensamiento y raciocinio y, por lo tanto, ¿demostrando albergar consciencia?

Una conclusión sustentada en datos no es lo mismo que una opinión personal. Las fuentes han de ser contrastadas, los argumentos fundamentados en hechos y mediciones, y los planteamientos sistemáticamente revisados si queremos que nuestro enunciado cumpla con unos estándares en cuanto a rigor y validez. El estado del arte en el desarrollo de la Consciencia Artificial (CA) llama a debate y, sin embargo, más allá de opiniones que con mayor o menor rigor se argumentan y sustentan, la CA constituye a día de hoy toda una disciplina emergente de la Inteligencia Artificial (IA). Grosso modo, la IA dota a una máquina de la capacidad para resolver problemas y la CA complementa esa capacidad insuflando iniciativa dentro un contexto una vez marcado un objetivo.

Existe una numerosa familia de arquitecturas cognitivas capaces de implementar algunos aspectos de la consciencia. Dejando a un lado la cuestión de la autoconsciencia, creamos ya máquinas capaces de tener una consciencia de entorno, con la que creamos artefactos capaces de moverse de manera autónoma. También creamos máquinas capaces de poner su foco de atención en un solo aspecto de la infinidad de sensores ambientales que procesan, y actuar en consecuencia. Además, creamos máquinas capaces de experimentar y recordar experiencias subjetivas (qualia), e interactuar con su entorno basándose en ellas. Todo ello de manera cada vez más integrada y alcanzando unos mejores resultados prácticos.

El pasado marzo, gracias al convenio de colaboración firmado entre la Universidad de La Rioja (UR), y los Colegios Profesionales de Ingenieros Informáticos de La Rioja ( CPTIR y CPIIR), hemos celebrado en la Facultad de Ciencias y Tecnología de la UR las conferencias Consciencia Artificial en su primera edición. En un salón de actos abarrotado, los asistentes pudieron conocer de la mano de investigadores de nivel postdoctoral de la Harvard Medical School, los fundamentos de la neurociencia que sustentan nuestro conocimiento sobre la consciencia humana que intentamos emular. Aprendieron también de la mano de los fundadores de empresas punteras en desarrollo de nuevas tecnologías, los fundamentos de los algoritmos de Inteligencia Artificial General (AGI) y sus aplicaciones. Como no podía ser de otra manera, las empresas riojanas tuvieron especial protagonismo en estas conferencias.

En La Rioja tenemos iniciativa, investigamos, creamos y trabajamos en tecnologías de vanguardia de primer nivel. En esta primera edición de las conferencias, diferentes empresas riojanas nos mostraron cómo, por ejemplo, mediante modelos de grafos semánticos construyen artefactos cognitivos o mentes artificiales para que máquinas y personas puedan conversar en un marco de sentido común. También cómo mediante estas tecnologías somos capaces de detectar el fraude reduciendo drásticamente el tiempo necesario para lograrlo. En las conferencias quedó patente que esos modelos de CA usados y potenciados en La Rioja arrojan resultados prácticos. Empresas de aquí que emplean talento de aquí.

La investigación de fondo que con el tiempo arroja estos resultados continúa. Recientemente, se anunció que se ha completado la arquitectura cerebral neurona a neurona de un animal complejo. Se prevé que acabaremos por conseguir documentar la arquitectura cerebral completa del ser humano. Neurociencia, Bioquímica, Psicología, Ingeniería, Física, Informática son solo algunas de las ramas de conocimiento que suman al desarrollo de la CA, y en todas ellas la comunidad de investigadores, docentes, desarrolladores y profesionales del sector TIC de La Rioja estamos presentes.

Gustavo Bueno, riojano ilustre donde los haya, nos advirtió en su cierre categorial que cada ciencia por separado no agota toda la realidad de un objeto de estudio. Integrar todo el conocimiento es el reto por conseguir. La consecución de una CA parte de metódicos y rigurosos estudios multidisciplinares. Seguiremos trabajando, comunicando nuestros avances y compartiendo conocimiento, en la siguiente edición de las conferencias Consciencia Artificial.