Covid/Home Office/Presencialidad
Desde mi punto de vista el Covid mas allá de sus efectos de pandemia y drama sanitario global ha generado un cambio del comportamiento laboral mas que preocupante.
No hay dudas que la aplicación parcial del home office pre pandemia lograba un equilibrio entre el ejercicio responsable y metódico del trabajo a distancia de la gente y la presencialidad que mantenía el contacto social y laboral con compañeros , jefes y clientes que no era menor.
Hoy el ejercicio obligatorio del trabajo a distancia ha bajado la efectividad profesional de la gente y hasta profundizando en el analisis tiene su lógica. El integrar el trabajo al ámbito del hogar, ya de por si es un cambio profundo, no es lo mismo “ el me voy a trabajar y salir de casa” y otra es “ me voy a trabajar.... estoy en el living”.
Ese living que comparte los zoom de los hijos con su escuela, el zoom de la pareja con el trabajo, el compartir lo laboral con la educación de los hijos ayudándolo en sus clases virtuales, deberes, el día a día de preparar comidas, meriendas, compras, etc, etc.
Lo que significa la convivencia 24 hs al día y las posibles crisis que ello genera con un entorno desacostumbrado y el consecuente estado de ánimo para afrontar el trabajo con una actitud de conflicto emocional motivada por relaciones o adaptaciones familiares con quienes la convivencia full se limitaba a los fines de semana o periodo de vacaciones donde en ambos casos , aparte de ser voluntario, se generaba en un clima distinto y deseado para todos. Agreguemos el miedo al contagio.
Si a esto le sumamos la inestabilidad laboral y el temor que eso genera, acompañado de una crisis económica que afecta en forma pareja a todas las categorías de negocios en que trabajes y el empobrecimiento de todas las clases sociales, que no solo afecta en lo personal y al entorno de tu posición laboral .Amigos en situaciones difíciles , la distancia obligatoria con la familia y gente querida ,que antes frecuentábamos socialmente como cosa natural, compartiendo lo bueno y lo malo pero mirándonos en vivo a los ojos.
Todo esto y mucho mas siento que existe un nuevo fenómeno que es la “ depre viralaboral”, que ha generado la carencia de ideas, de esfuerzo por hacer cambios, por imaginar el negocio en el que estamos pos covid y comenzar a planificar como será nuestra empresa, mercado, hábitos de consumo y productos a futuro.
Los cambios internos de cultura y de descripción laboral , áreas de Recursos Humanos que ya deberan replantearse su roll ante el cambio de escenario abarcando nuevas áreas que estén mas dirigidas a comportamientos y motivaciones perdidas, el ámbito familiar y éste será tambien un proceso de cambio que debería comenzar a evaluarse lo antes posible.
La no presencia física nos hizo perder el valor agregado de los referentes consultados de mas jerarquía-experiencia-conocimiento , hasta el detalle de ver pasar a nuestro lado a un director y reconocer en su cara la situación de la empresa a simple vista.
En síntesis, estamos en problemas y así como la no escolaridad de tanto tiempo de nuestros hijos , la no presencialidad laboral va a llevar años recomponer la evolución profesional de mucha gente de empresas que hoy esta aislada y retomar un nivel profesional que lamentablemente observo que está en crisis.
No todo está perdido tampoco, tal vez sea momento de aplicar en nosotros el auto marketing y transformar esta situación en una oportunidad que siempre esta subyacente, y generar un cambio de modelo que puede ser beneficioso y que las crisis provocan.
Pensemos si no estamos ante una nueva oportunidad, ojalá que así sea.