Creatividad en las organizaciones

Cuando pensamos en la creatividad podemos analizarla desde el punto de vista organizacional, y encontrar que este concepto es clave para el desarrollo de estas entidades. Andrea Echeverri (2018) recopila conceptos e ideas entonrno a la creatividad organizacional y empieza por definirla como la generación de ideas nuevas y originales, potencialmente relevantes o útiles en relación con nuevos productos, servicios y procesos organizativos. Considera que la creatividad es el primer paso para la innovación organizacional, que puede ser entendida  como la aplicación exitosa de ideas creativas por parte de la organización. 

La creatividad en las organizaciones corresponde al ámbito de los seres humanos, y se necesita poseer ciertas características individuales para que esta florezca, Woodman, Sawyer y Griffin (1993) elaboran la siguiente lista que contempla cuáles son las habilidades que deben aportar los individuos:

·      Persistencia en la tarea

·      Curiosidad

·      Apertura al cambio

·      Capacidad de asombro

·      Flexibilidad de pensamiento 

·      Capacidad para asumir riesgos y aceptar desafíos

·      Conocimiento de la tarea

·      Habilidades para la integración social

Por otro lado la organización debe promover el uso de la creatividad y generar ciertas condiciones propicias Woodman, et. alt. (1993) proponen que debe haber:

·      Promoción de la autonomía individual y grupal

·      Disponibilidad de recursos

·      Excelentes canales de comunicación

·      Interés por responder a las demandas, necesidades expectativas de los destinatarios del servicio

·      Incentivación del pensamiento creativo

·      Aceptación del riesgo y la competencia

·      Liderazgo participativo, transformacional y visionario.

Determinando cuales son las condiciones que debe aportar la organización y los individuos podemos pensar que necesitamos hacer para que exista una buena combinación con resultados que aporten valor. Ya que para los adultos cada vez resulta más difícil mantener estimulado su lado creativo, para Falco Mariana (2016) esto de se debe a que existen muchos obstáculos que no permiten tomar riesgos, al mismo tiempo que la motivación se extingue rápidamente. Así que debemos adoptar estrategias que nos ayuden a conectar nuevamente con ese lado creativo que nos ayude en retomar el conceptual blending (mezcla de conceptos) con el cual se pueden proponer nuevas ideas dentro de la organización.

Para lograr los objetivos de cambio, aumento de productividad y competitividad,  Falco (2016) propone mirar a los recursos humanos como elementos clave, compartiendo la postura con de Escalona (2007), la capacitación del recurso humano se convierte en factor decisivo para el desarrollo de la organización, y no solo se debe considerar el desarrollo de habilidades cognoscitivas sino también es indispensable las actitudes socio-afectivas, que impacten en el potencial creativo tanto de los colaboradores como de la organización.

Pero además de una capacitación constante ¿Qué otros elementos se deben considerar para fomentar la creatividad en la organización? De acuerdo a Daniel Goleman (1996) la inteligencia emocional, puede ser una buena herramienta para estimular la productividad laboral, ya que al mejorar el estimulo de la inteligencia emocional, mejora significativamente el éxito de una empresa. Actualmente las empresas se están comprometiendo cada vez más a fomentar la creatividad y la inteligencia emocional, en una encuesta realizada en Linked In el 47% de los que encuestados manifestaron que en sus lugares de trabajo siempre se generan espacios para la creatividad, si bien es un nivel alto, los que contestaron nunca 19% y algunas veces 34%, suman el 53% por ciento, lo que nos indica que aún se tiene que realizar una gran labor de concientización en el área de recursos humanos para el fomento y estimulo de la creatividad y la inteligencia emocional en ambientes laborales.

Otro punto importante para implementar estas directrices es el liderazgo, Calzadilla (2001) nos dice que el nuevo gerente debe poseer grandes dotes humanas, que le ayuden a transmitir a sus subordinados esa energía  que estimule en todos un cambio paradigmático, que ponga el ejemplo, motive a asumir riesgos, genere ambientes creativos, fomente la inteligencia emocional y la comunicación efectiva. Así pues el estilo gerencial de antaño debe ser sustituido por uno nuevo, uno innovador, flexible y holístico.

La misma organización debe desarrollar una cultura orgnizacional que promueva la generación de ideas, nuevas maneras de hacer las cosas, y poner especial atención a los procesos de aprendizaje organizacional, como la realización de programas de formación y el desarrollo de sistemas de mejora continua, las practicas de gestión de las competencias de los empleados y los sistemas de remuneración que buscan medir, mejorar, comunicar y reconocer sus competencias.

En una economía que esta reivindicando a la creatividad como un elemento de valor, se deben encontrar estrateigas que permitan potenciar la resolución creativa de problemas, nuevas formas de hacer las cosas y desarrollar nueva ideas.

Es importante para las organizaciones volcar todos sus recursos tangibles e intangibles para asegurarse el éxito en su supervivencia y desarrollo, mientras que mejoran las condiciones de vida no solamente de los colaboradores que trabajan con ellos sino de la población en general y la creatividad en la organización puede ayudar a cumplir estos objetivos.