Dejar ir

La razón por la que el miedo nos atrapa, la principal, es porque le habla a nuestro instinto de preservación de la vida. Esto es una trampa y contiene un secreto: la trampa es que nunca estamos realmente seguros, y el secreto es que no se puede lograr nada sin arriesgar la ilusoria seguridad. Podemos hacer cosas que mejoren nuestras probabilidades, pero la seguridad completa depende de muchos factores que no están bajo nuestro control. 

La mayor parte de las cosas que nos dan miedo y que tienen poder sobre nosotros, están relacionadas a mantener la seguridad, con permanecer en lo que conocemos. Si logramos ser conscientes de que esta seguridad es ilusoria, lograremos más cosas en nuestra vida.

 La mayor parte de las cosas buenas en la vida, nuestra o de la humanidad, provienen de algún ¨riesgo¨. El principal freno del riesgo es el monólogo de nuestra mente o de nuestros seres queridos, que quieren prevenirnos de tomar decisiones que puedan conducirnos a una situación de dificultad. 

A veces el ruido viene de personas que nos quieren y es bien intencionado, pero a veces también de personas que han fracasado y proyectan su frustración. Debes escuchar con criterio.

 Si una oportunidad viene a nuestra vida debemos tomarla. Son eventos inusuales y especiales. Cuando vienen, muchas personas no las aprovechan porque están atrapadas en el paradigma de ¨no estar listos todavía¨. En el mundo militar y empresarial se debe tener cuidado de no quedar atrapado en la fase de preparación. En la Grecia clásica, existía el dios Kairós, que en la mitología cristiana es conocido como el tiempo de Dios. Este era representado como un pequeño hombre, sin cabellera y con un mechón de pelo en la frente, parado sobre una esfera y sosteniendo una daga en una de sus manos. Este dios o genio representa la volatilidad de las oportunidades, que deben ser tomadas de frente, aprovechando el momento al acercarse, y como nos hieren si no las tomamos.

 Brandon Web en su libro sobre el miedo nos invita a ser conscientes de un fenómeno psicológico que él llama ¨cámara de eco¨ y de su monólogo. La cámara de eco es un trauma que vivimos en algún punto de nuestra vida, y que genera una respuesta y resonancia en eventos que estamos viviendo actualmente. La mayor parte de nuestros miedos provienen de este fenómeno. Es una hiper nostalgia que nos detiene. Cuando nos damos cuenta de qué nos está pasando, debemos activar el switch y cambiar el diálogo mental, hacer el esfuerzo de estar en el presente. 

Debemos aprender a “morir” con cada situación difícil, permitir que algo muera en nosotros. Esto nos ayuda a apropiarnos de nuestra vida. Debemos dominar el miedo a la muerte y saber, en cada una de nuestras células, que algún día vamos a dejar de existir. La muerte no viene sólo al final, sino que nos acompaña toda nuestra vida. Al final, gran parte de nuestros miedos son en realidad miedo a la muerte. Incluso para aceptar que estamos equivocados en una discusión, requiere que muramos un poquito, que dejemos a un lado nuestro ego. 

Elizabeth Kubler Ross, en su libro ¨La Rueda de la Vida¨ nos escribe en la portada el pensamiento ¨Vive tu vida, de tal manera que cuando llegue al final, haya valido la pena haberla vivido¨. En sus terapias a pacientes desahuciados, descubrió que más del 80%, rechazaban la muerte no por miedo a lo que hay después, sino por no haber cumplido sus sueños, por no haber vivido.

 No se puede ser un verdadero emprendedor exitoso hasta que no se está dispuesto a perderlo todo. El emprendedor exitoso ha pasado, en promedio, por 3 o 4 quiebras. Puede ser interesante ver la película ¨El día de la marmota¨ para entender cómo funcionan los procesos de aprendizaje vitales. Para poder vencer el miedo se debe dejar ir la ilusión de la seguridad. Preguntarse regularmente, ¿si muriera hoy, estaría bien, me iría en paz?

 Algunos consejos prácticos:

1.      La preparación no debe durar eternamente, hay que entrar en acción. Nunca te vas a sentir totalmente preparado.

2.      Deja fuera la basura, no te dejes frenar por el miedo de otros. Pero ten la cortesía y asertividad de escuchar los consejos de los demás.

3.      Revisa el miedo: ¿estamos peleando contra algo del presente o haciendo boxeo de sombra con el pasado?

4.      Si el miedo es algo real, viene bien cambiar el switch y tomar acciones positivas que ayuden a enfrentar la situación. Si el miedo viene de un eco con el pasado, revisa tú diálogo mental y enfócate en lo que puedes cambiar.

5.      Abraza la idea de que eres mortal, sigue los consejos de Elizabeth Kubler Ross, vive la vida sin dejar pendientes.