El deber de un buen líder.
El líder, para motivar a los demás, debe considerar lo siguiente:
- Creer en sí mismo: El que no cree en sí mismo no sabe lo que tiene que decir y no sabe cómo actuar. El que no está firme en sus convicciones, difícilmente podrá llegar a otros.
- Interesarse por los demás: El motivar no es manipular. Se motiva a los otros para lograr un bien colectivo.
- Escuchar atentamente: Comprender qué dicen y lo que quieren. Sólo así se puede motivador. Si una persona identifica los mensajes que recibe con sus intereses o con sus sentimientos, actuará con gran motivación.
- Proveer constantemente de refuerzos positivos: Para motivar hay que analizar siempre el lado positivo de las cosas. Si algún colaborador tiene una buena actuación se le debe premiar reconociendo su éxito e impulsándole a más. Si otro se equivoca hay que alentarlo hasta que logre hacer las cosas bien.
- Involucrarse: Se debe conocer a la gente, motivarles a actuar para que puedan satisfacer sus necesidades.