El fundador de Grupo Insud salió a desmentir acusaciones sobre trabas al acuerdo argentino con Pfizer
Lo hizo a través de la red social Twitter respondiendo a una nota publicada por diario La Nación. Según el CEO, la vacuna que se producirá en sus laboratorios (Oxford/AstraZeneca) no está demorada, así como tampoco está “evitando” que llegue la vacuna de Pfizer.
Luego de que en una editorial publicada por diario La Nación la periodista Laura Di Marco referenciara un supuesto “lobby de amigos empresarios del gobierno para que la Argentina no cierre el acuerdo con Pfizer” y mencionara a Hugo Sigman entre ellos, el CEO de Grupo Insud y accionista de mabXience reaccionó con una serie de Tweets que buscan “aclarar” tales afirmaciones.
De acuerdo al empresario, no existe ningún lobby y, de hecho, tiene una amistad de años con la compañía Pfizer. Además, según Sigman, “la Argentina va a necesitar más dosis que las que puede proveer AstraZeneca, por lo que no se entiende por qué habría de ‘trabar’, como sostiene la nota, la llegada de otras vacunas”.
Continuando con su respuesta y para dar más claridad al asunto, el empresario explicó que mAbxience, la compañía de la que es accionista, no vende la vacuna de AstraZeneca al Ministerio de Salud, sino que produce el principio activo que es enviado a México, donde Liomont (otro laboratorio), se encarga de fraccionarlo y envasarlo. Y que, luego, AstraZeneca vende y distribuye las vacunas en Latinoamérica a un precio muy bajo porque “no obtiene beneficios mientras dure la pandemia”.
En el editorial también se sugiere que el gobierno estaría buscando la “foto política de la vacuna” previendo las elecciones del año que viene y que Sigman fue aportante en la campaña de Alberto Fernández, por lo que hoy el presidente “debería devolver el favor” al CEO. Ante esto, el magnate respondió que le resulta difícil comprender por qué se siembran dudas, sospechas y acusaciones en un momento tal sensible para la población, cuando su laboratorio sólo destinará un 14.7% del total de su producción (22 millones de dosis) a la Argentina.
Entre las afirmaciones que siguen, el escrito periodístico indica que en el año 2010 se dio una “trama similar” con la vacuna contra la gripe A, de la cual Sigman habría sido el gran beneficiario junto con el ministro de salud de ese momento, Juan Manzur. De acuerdo al fundador de Insud, la compañía que ganó una licitación pública internacional para producir la vacuna antigripal fue la biofarmacéutica Sinergium Biotech, la cual tiene distintos accionistas como la familia Bagó, Sielecki, Gold y Sigman. Y que la comercializó a precio nacional, evitando grandes gastos en dólares.
Finalmente, la nota declara que la diputada Graciela Ocaña denunció que la mitad de las dosis no llegaron a la gente y que no se supo dónde estaban, a lo que el CEO manifestó que “se ignora que el plan lo elabora el Ministerio de Salud Pública con bastante anticipación a la fecha de inicio de la campaña de vacunación”: “Así sucede mundialmente. Como es imposible conocer de antemano el desarrollo de la enfermedad a veces sobran dosis y a veces faltan, como aconteció este año, pero no es cierto que se produzcan deliberadamente vacunas de más”.
El editorial de Laura Di Marco había sido publicado luego de que el ministro de salud y el presidente de la Nación anunciaran que una comisión especial se encontraba en Rusia evaluando la calidad de la vacuna para transportarla al país y de que, a los pocos días, el presidente ruso dijera que la “Sputnik-V” no sería recomendada para mayores de 60 años.