El mundo va a cambiar y mucho más deprisa de lo que crees

Puede parecer difícil de creer, pero nuestros hijos más jóvenes no irán a la autoescuela. Ésta es probablemente la última generación que conduce manualmente sus vehículos como hoy lo hacemos sus padres. ¿Habías caído en eso?

Es una especie de chiste entre los frikis que la pirámide de Marslow tiene dos nuevos niveles de necesidades: ¡la batería del móvil y la WiFi!

Claramente, son nuevos agentes de nuestra motivación y comportamiento, por encima (hasta cierto punto, claro) de determinadas necesidades básicas (comida, refugio, etc.). Puede sonar ridículo, pero estas nuevas necesidades son indiscutibles para muchos ciudadanos.

Habrás visto miles de cifras e infografías sobre la evolución de internet, su base de usuarios, extensión geográfica… incluso el número de folios que necesitaríamos para imprimir todo su contenido (1000 millones de páginas, por cierto) pero hoy no vengo a hablar de esas inacabables estadísticas.

Todos sabemos que el futuro no se parecerá a lo que hoy conocemos; el trabajo de nuestros hijos, para empezar. Pero fallamos estrepitosamente cuando tratamos de calibrar la velocidad a la que el cambio va a suceder, y tampoco apreciamos correctamente el grado de impacto sobre nuestras vidas. Por ejemplo, todos hemos oído hablar de los vehículos autónomos, pero no todo el mundo advierte la consecuencia que mencioné en el primer párrafo ¿o sí?

Acabo de terminar una interesante lectura: “La nueva normalidad” de Peter Hinssen. Peter afirma que “estamos a mitad de camino de la revolución digital. Aunque ya hemos atravesado un montón de cambios, lo que nos queda por delante es un desafío mucho mayor”.

Mi madre decía que nada ha cambiado más la vida de las mujeres, y ha favorecido su independencia, que la invención de la lavadora. Si echáis un vistazo a este gráfico de HumanProgress, es fácil entender por qué. (Por cierto, antes de que nadie caiga en la broma fácil, en casa nos repartimos las tareas al 50%).

Toda nuestra vida cambiará radicalmente, no sólo por la famosa Internet de las cosas (IoT) sino por la estrecha relación e integración de todas las llamadas “nuevas tecnologías”: robótica, neurociencia, inteligencia artificial... Parece una perogrullada, pero dedica unos minutos a pensar en el impacto sobre tu vida cotidiana y te sorprenderás.

En cuanto al mundo de los negocios, permíteme que robe otra cita al Sr. Hinssen: “Lo digital se ha convertido en la nueva normalidad, y eso tendrá un enorme impacto en la manera como las empresas se comunican con los clientes y en el modo en que se organizan internamente”

Sin límites digitales. Es el tema del evento de Cisco Connect en Madrid del 12 de Mayo en Kinépolis. Puesto que Cisco ha elegido a mi empresa, CommScope, como su socio para la infraestructura de red, tienes una buena oportunidad para venir a conocernos. ¡Pásate!